El salpicadero del Audi A6 e-tron es similar al que Audi también ha estrenado recientemente en modelos como el A5, el Q5 o el Q6.
Casi todas las funciones se manejan desde dos pantallas que están integradas en una superficie curva que parece flotar del salpicadero. La pantalla de la instrumentación tiene 11,9 pulgadas y la del sistema multimedia 14,5 (imagen). También es posible instalar un sistema de información proyectada en el parabrisas que ofrece mucha información y animaciones muy útiles del funcionamiento de los asistentes a la conducción.
Hay una tercera pantalla opcional y de menor tamaño que las otras dos (10,9) que va situada delante del asiento del acompañante (imagen). Permite que el pasajero controle muchas cosas de forma cómoda ya que la central queda un poco lejos de su alcance (especialmente si lleva el asiento un poco retrasado). Se puede, entre otras muchas cosas, introducir una ruta en el navegador mientras el conductor está concentrado en la carretera, consultar el ordenador de viaje o cambiar la fuente de sonido. No obstante hay ajustes que sólo se pueden hacer desde la pantalla principal (la central) como, por ejemplo, regular la climatización o activar la función de masaje del asiento del conductor.
En el anterior Audi A6 había una pantalla especialmente dedicada al sistema de ventilación que ha desaparecido en el A6 e-tron 2025. En este modelo, los controles principales del sistema de climatización aparecen de forma permanente en la parte inferior de la pantalla del multimedia, por lo cual se encuentran fácilmente con la vista. Sin embargo, si queremos llegar a funciones algo más avanzadas no queda más remedio que abrir el menú correspondiente, lo que requiere más atención por parte del usuario.
En la consola central que hay entre los asientos quedan unos pocos mandos como la ruleta para controlar el sistema de sonido, el selector de los modos de conducción, el botón que da acceso directo a los asistentes a la conducción, el que activa las cámaras de aparcamiento y el freno de estacionamiento (imagen). También está la palanca de las posiciones de marcha (que ahora es un pequeño mando plano en lugar de una palanca). Por lo tanto, Audi ha distribuído las pantallas y mandos en este A6 e-tron de una forma muy similar que BMW en el i5.
No he tenido tiempo suficiente para familiarizarme con las pantallas del Audi A6 e-tron. Supongo que, como cualquier coche moderno (y más en los que tienen tantos y tantos menús, especialmente en las unidades más equipadas) hay que pasar por un periodo de adaptación y aprendizaje, porque al principio puede resultar todo un poco desconcertante. En el Q6 e-tron mi compañero Alfonso Herrero dijo que pasados unos días, su manejo le pareció mejor que el sistema anterior de Audi.
Lo que no tiene BMW ni Mercedes-Benz y sí Audi es la posibilidad de añadir cámaras retrovisoras en sustitución de los espejos tradicionales. Audi ha mejorado la posición de sus pantallas respecto a donde estaban situadas en el Audi e-tron 2019. Ahora están más elevadas respecto al punto de vista del conductor, aunque no acaban de situarse en una posición tan natural como los espejos tradicionales retrovisores. Otra novedad es que los brazos donde van las cámaras ahora son plegables.
Audi dice que una de las principales ventajas de estas cámaras retrovisoras se aprecian por la noche, pero no hemos podido probarlas en esas circunstancias. Durante el día se sigue apreciando una clara falta de profundidad en la imagen que dificulta saber a la velocidad que se acercan los vehículos que nos van a rebasar.
La sensación que he tenido con este Audi A6 e-tron ha sido similar que con el Q6 e-tron en lo que respecta a la calidad percibida. En general, la ejecución de su interior es buena, pero no superior a la de los modelos equivalentes con motores de combustión. Algunos plásticos de recubrimiento son más sencillos y hay detalles mejorables, como por ejemplo la tapa de la guantera (que parece muy fina y ligera).
Posición de conducción y habitabilidad
La posición de conducción es la clásica de una berlina y se parece mucho a la del anterior Audi A6 con motor de combustión. El asiento del conductor va relativamente cerca del piso y los pedales alejados, por lo que las piernas irán generalmente estiradas. El tipo de asiento puede variar mucho la experiencia de conducción, a mi me han resultado más cómodos los deportivos (aunque es una valoración totalmente subjetiva).
Sin duda, lo menos favorable del puesto de conducción es la gran cantidad de reflejos que produce el panel curvo donde van alojadas las pantallas. He probado el Audi A6 e-tron en días soleados de invierno y los brillos me han parecido excesivos e incómodos. Otra fuente importante de molestias de la misma naturaleza es la moldura de color negro brillante que hay en el salpicadero delante del acompañante.
Las plazas posteriores del Audi A6 e-tron tienen prácticamente el mismo espacio que el BMW i5 Touring, mientras que el Mercedes-Benz EQE es ligeramente mayor en todas las cotas. El piso en las plazas posteriores no es completamente plano sino que tiene un pequeño abultamiento en la zona central, algo que también ocurre en sus rivales. Esto se debe, según nos ha explicado Audi, a la propia forma de la carcasa que alberga la batería.
Espacio de carga
El espacio de carga por debajo de la altura de las ventanillas es igual en ambas carrocerías del A6 e-tron: 502 litros. Un BMW i5 tiene 570 litros con carrocería familiar y 490 con la de tipo berlina. El Mercedes-Benz EQE tiene sólo 430 litros.
En los laterales hay ganchos para colgar objetos, puntos de luz y unas palancas para abatir los respaldos de la segunda fila de asientos. Por debajo del piso hay un compartimento donde caben los cables de recarga y algún que otro objeto. La otra posibilidad para llevar los cables de recarga es el maletero delantero (imagen), que tiene 27 litros de capacidad (no disponible en sus rivales de BMW y Mercedes-Benz).