Es un prototipo basado en el Audi Q3. Su carrocería es más ancha que la del modelo del cual deriva, va 25 mm más cerca del suelo y lleva un motor de 360 caballos de potencia.
Lleva un motor de 2,5 l de cilindrada, con cinco cilindros y turbocompresor (que Audi llama «TFSI»), similar al que lleva el Audi TT RS plus. En la presentación del Q3 ya condujimos una unidad con este motor pero con 20 CV menos. Y es el segundo prototipo del Q3 con este motor, ya que en el Salón de Ginebra de 2012, Audi mostró el Q3 Vail, en este caso con 314 CV. El cambio de marchas es automático («S tronic» de doble embrague) de siete velocidades.
La tracción es a las cuatro ruedas. Como en todos los Audi que llevan el motor colocado en posición transversal, no hay un diferencial entre las ruedas anteriores y las posteriores. Por el contrario, lo que distribuye la fuerza del motor entre uno y otro eje es un embrague formado por varios discos intercalados (unos unidos al eje delantero y otros al trasero), accionados hidráulicamente y controlados electrónicamente. En condiciones normales de adherencia, la mayor parte de la fuerza del motor va a las ruedas delanteras.
El Audi RS Q3 concept puede alcanzar 265 km/h de velocidad y acelerar desde 0 hasta 100 km/h en 5,2 segundos. Este valor de aceleración está a medio camino entre el que consigue un Audi S3 (265 CV) y un Audi RS3 (340 CV). Lleva neumáticos de medidas 255/30 (un perfil muy bajo para un coche con carrocería de todoterreno) y las llantas son de 20 pulgadas de diámetro.
El motor va rodeado por una especie de cubierta de fibra de carbono con unas rejillas de ventilación en los laterales y la tapa de la culata va pintada de color rojo. Los cilindros van numerados y el filtro de aire está dentro de una carcasa de aluminio.
La carrocería tiene un aspecto llamativo (en parte por el aspecto del paragolpes delantero y posterior o por las prominentes molduras situadas bajo las puertas) y va pintada en un color mate que Audi ha denominado «azul ordos», en contraste con el color negro de algunas piezas. Los faros y pilotos están oscurecidos respecto a los de un Audi Q3 normal.
Algunas piezas de la carrocería están fabricadas de plástico reforzado con fibra de carbono («CFRP») como, por ejemplo, la parte exterior de las entradas de aire del paragolpes delantero, las cubiertas de los espejos retrovisores y el alerón que hay justo por debajo del paragolpes.
En el interior se repite la combinación de color negro y azul de la carrocería. El azul se encuentra principalmente en el tejido Alcantara que recubre parte de los asientos y de los guarnecidos de las puertas, pero también en las molduras de «CFRP» que hay por algunos sitios. Para conseguir que este material tenga tonalidad azul, Audi dice que «en su producción ha mezclado fibras de vidrio de color azul brillante».
Unas de las cosas más llamativas del interior es que el cuentarrevoluciones lleva caracteres chinos. Audi presentará este coche en el próximo Salón del Automóvil de China, que se celebrará los próximos 25 y 26 de abril.