El A1 clubsport quattro es un prototipo. Audi dice que lo ha diseñado como un vehículo de calle para usar en circuito.
El motor que lleva es el de 2,5 l y cinco cilindros en línea que llevan el Audi TT RS y el RS 3 Sportback (en los cuales da 340 CV), aunque potenciado para que llegue hasta 503 CV (imagen). Para alcanzar esta potencia, Audi ha modificado el turbocompresor, el intercambiador de calor del aire de admisión, los conductos de admisión y el sistema de escape. Como el Audi A4 DTM, la salida de escape está por delante de la rueda trasera izquierda.
El sistema de tracción es a las cuatro ruedas y el cambio es manual de seis velocidades. Este prototipo pesa 1.390 kg (Audi no ha comunicado en qué condiciones). El Audi RS 3 Sportback (con el mismo motor aunque con una carrocería más grande) pesa 1.650 kg en condiciones de homologación, es decir, con conductor y líquidos.
Este prototipo es capaz de alcanzar 100 km/h saliendo desde parado en 3,7 segundos y 200 km/h en 10,9 segundos. Comparativamente sobresale más por su capacidad de aceleración que por su velocidad máxima, limitada a 250 km/h. El Audi S3 de 265 CV también llega a 250 km/h.
El interior tiene profundas diferencias respecto a cualquier otro Audi A1. El A1 clubsport quattro lleva en la consola unos indicadores de aguja que señalan la carga de la batería y la presión y temperatura del lubricante (imagen). No lleva apoyabrazos ni tiradores en las puertas (imagen). En su lugar Audi ha colocado unas tiras de tela (imagen) y ha reubicado los mandos de los elevalunas en la consola. También hay una cinta de tela para abrir la guantera, en lugar del habitual tirador.
Detrás del volante no están las habituales palancas que llevan la mayor parte de los coches. Los mandos de los intermitentes y de las luces de largo alcance van en los brazos del volante (imagen) y el que acciona el limpiaparabrisas en la fila de mandos de la consola. No lleva sistema de sonido, de navegación o de entretenimiento. El velocímetro está graduado hasta 350 km/h. El fondo del cuenta revoluciones está pintado de color rojo brillante (al igual que el pedal del acelerador).
Solo tiene dos plazas. Los asientos, de tipo baquet, son los mismos que lleva el Audi R8 GT, con la estructura fabricada de plástico reforzado con fibra de carbono. Los arneses tienen cuatro puntos de anclaje.
La parte trasera del habitáculo ha sido reservada para alojar una barra que une los dos laterales del chasis, cuya función es dar más rigidez a la estructura. Justo detrás de los asientos delanteros también hay dos lugares previstos para alojar dos cascos (imagen). La batería está entre el sitio reservado para los cascos, por debajo de la superficie de carga. En los Audi A1 que se comercializan la batería va situada detrás de los asientos traseros.
Lleva ruedas de medidas 255/30 R19 y las llantas son de un diseño que Audi denomina «turbina». Los frenos delanteros tienen pinzas de seis pistones y los discos son de material cerámico. Los discos traseros son de hierro. Una peculiaridad de la suspensión es que los amortiguadores tienen regulaciones independientes de la dureza para el movimiento compresión y para el de extensión.
La carrocería tiene varios cambios. El más llamativo es que es 60 milímetros más ancha que la de cualquier otro A1. Han cambiado los paragolpes, las puertas y los paneles laterales (imagen). La cubierta del techo es de fibra de carbono (imagen); también son de este material las grandes tomas de aire del paragolpes delantero (imagen), el difusor que va alojado en el trasero (imagen) y otros detalles del exterior e interior de la carrocería. El alerón que va colocado al final del techo es de doble plano.
Audi ha dicho que, próximamente, algunos detalles de aspecto presentes en este prototipo estarán disponibles como accesorio en los A1 de producción.