No es el primer prototipo que Volkwagen presenta con este nombre ya que en el año 2000 hubo otro Dune (galería de imágenes), realizado sobre el New Beetle, denominación que tenía la generación anterior al Beetle actual. Pero de éste dice que «Mientras su antecesor era un modelo de ciencia ficción, con el actual Dune Volkswagen presenta un modelo con posibilidades de pasar a la serie».
El diseño del Beetle Dune tiene elementos característicos de los todoterreno por lo que podía anticipar una versión del Beetle algo adaptada para circular fuera del asfalto. Contrariamente a esto, Volkswagen dice en la nota de prensa que el Dune «cuenta con el potencial para ser la versión deportiva del Beetle», lo que en principio parace ser contradictorio en un coche que tiene, como uno de sus elementos diferenciadores, una mayor altura.
El Beetle Dune es 50 mm más alto que un Beetle de producción, 12 mm más largo y 48 mm más ancho debido a unos pasos de rueda de mayor tamaño. Los neumáticos son de medidas 255/45 montados en llantas de 19". El alerón del techo y el del portón se utilizan, además de para findes aerodinámicos, de soportes para transportar unos esquís.
Volkswagen ha elegido pare este prototipo un motor de gasolina con inyección directa y sobrealimentación que da 210 CV, acoplado a un cambio automático de doble embrague (DSG), suponemos que el mismo que tiene la versión más potente del Beetle que se comercializa actualmente (ficha técnica Volkswagen Beetle 2.0 TSI). Como en éste, la tracción es a las ruedas delanteras. Las prestaciones del Beetle Dune son ligeramente peores que las del Beetle de producción con el mismo motor: alcanza 227 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 7,5 segundos.
El habitáculo tiene una decoración específica y, como guiño a modelos pasados, la guantera superior ha sido reemplazada por un asidero. La pantalla del sistema multimedia es de tecnología AMOLED. El logotipo «DUNE» aparece en varias zonas del coche.