El habitáculo del Audi Q3 es suficientemente espacioso para cuatro ocupantes. Tiene el mismo espacio para las piernas de los ocupantes de las plazas posteriores que un BMW X1 o un Mercedes-Benz GLK. Sin embargo, de los tres, el Q3 es el que tiene menos anchura entre puertas y altura hasta el techo (tabla comparativa).
El peor dato del interior del Q3, en lo que a espacio se refiere, es la escasa anchura entre puertas. Entre que es estrecho y que la plaza central es pequeña e incómoda, resulta inadecuado para cinco ocupantes. Un Land Rover Freelander 2 o un Toyota RAV4 tienen unas plazas traseras más amplias.
La altura libre al techo es suficiente para que ocupantes de unos 1,80 metros viajen cómodamente en cualquier plaza, salvo en la central posterior, donde no es complicado rozar con la cabeza en el guarnecido interior a poco que se superen los 1,75 metros. Con la opción del techo panorámico de cristal, la altura en las plazas delanteras es adecuada para conductores de alrdedor de 1,90 metros de estatura.
El acceso a las plazas anteriores es amplio, mientras que a las posteriores es pequeño. En este último caso, las puertas abren poco y el espacio que queda entre el montante central y la banqueta para pasar las piernas no es grande.
Es posible encontrar una posición de conducción adecuada para personas de tallas muy variadas porque el asiento se puede acercar y alejar mucho del salpicadero. Esto último no es completamente aprovechable por un conductor de mucha altura —más de 1,95 metros— porque los cinco centímetros que puede desplazarse en profundidad el volante son insuficientes para llegar a él con las manos cuando el asiento está en su posición más retrasada, por lo que tendrá que acercar el asiento un poco y llevar las rodillas más flexionadas y próximas al salpicadero.
La posición de conducción es similar a la de un turismo, pero algo más elevada. Aún así, para sentarse en el asiento no es necesario hacer un esfuerzo grande ni dar un pequeño salto hasta llegar a él porque no está muy alto respecto al suelo. La banqueta no puede ir tan cerca del piso como en otros modelos de Audi, como el A3. Algunas versiones llevan unos asientos que ofrecen la posibilidad de alargar la superficie de la banqueta. El reposapiés es sólido y de gran tamaño.
Tanto los asientos delanteros como los traseros son cómodos, con un mullido tirando a firme, que no duro, que impide que el cuerpo se hunda y se mueva. Nuestra unidad de pruebas llevaba unos de diseño deportivo y tapizados en cuero, que sujetaban correctamente el cuerpo. Este cuero —denominado «Cuero Napa»— no parecía muy frío tras haber dejado el coche parado varias horas con una temperatura exterior de entre 5 y 0ºC. El buen funcionamiento del sistema de climatización hace que el habitáculo se caldee rápidamente —no hemos podido probarlo en la situación inversa—.
Mandos, materiales y ajustes
Como en otros modelos de Audi, los mandos tienen un tacto excelente. En su mayoría son idénticos a los que se pueden encontrar en cualquier Audi. Una diferencia es que los del «MMI» que permiten manejar el equipo de navegación y sonido o configurar ciertos elementos del coche están en la consola, bajo las salidas de climatización (imagen), no entre los asientos (imagen).
Los mandos de la climatización están en la parte baja de la consola, lo que obliga a desviar mucho la vista de la carretera para accionarlos. Los principales, para modificar la temperatura, tienen un tamaño grande (imagen) así que es sencillo manipularlos. No sucede igual con otros, como los que permiten elegir entre las diferentes salidas de climatización, que son pequeños. Bajo ellos, está el botón de puesta en marcha del motor (imagen).
La instrumentación es clara y fácil de leer. En el cuadro de instrumentos hay una pantalla monocroma que, opcionalmente, puede ser en color (imagen). La pantalla que hay en la parte superior del salpicadero viene con el equipo de sonido opcional o el navegador. Es una pantalla en color de 6,5” en el primer caso y de 7” —800 x 480 píxeles— en el segundo (imagen). No sale y se esconde automáticamente sino que hay que hacerlo a mano, como en el Audi A1.
Huecos para objetos e iluminación interior
En el habitáculo hay huecos suficientes como para guardar lo que se suele llevar encima habitualmente, como un teléfono móvil, una cartera o unas llaves. Para sujetar un bolso o unas bolsas hay una pequeña percha junto a la parte baja de la consola, en el lado del acompañante (imagen).
Hay unos cajones bajo los asientos (imagen), para cosas pequeñas, además de varios espacios frente a palanca de cambios, tras ella —dos portabotellas—, dentro del reposabrazos central y a la izquierda de columna de la dirección —pequeño cajón—. Atrás hay un espacio pequeño en el interior del respaldo de la plaza central, que se puede utilizar de reposabrazos. De ahí también salen dos portabebidas.
La guantera no es muy grande. Todos los huecos para objetos tienen en el fondo un plástico granulado para evitar que lo que se deposite en ellos se deslice. En los de las puertas hay espacio para colocar una botella de 1,5 litros.
En las plazas delanteras hay una toma de 12V y un encendedor. Hay otras dos salidas de 12V, una en las plazas traseras y otra en el maletero.
Es posible optar por un paquete de iluminación interior por leds, formado por luces de lectura delanteras y traseras, en los parasoles, luz de entrada, en el techo, la zona de los pies y el maletero y otras en los portabotellas delanteros, los tiradores de las puertas y la parte baja de éstas.
Maletero
Tiene un volumen de 460 litros. Es inferior al de un Range Rover Evoque (575 litros). También es menor que el de un Honda CR-V. Un KIA Sportage y un Volkswagen Tiguan tienen un maletero similar, mientras que un GLK y un X1 tienen algo menos que el Q3 (listado).
Los asientos traseros no tienen regulación longitudinal, como sí sucede en un Toyota RAV4 o un Q5, por lo que para ganar capacidad de carga la única solución es abatir los respaldos traseros. Así hay disponibles 1365 litros. Una vez reclinados no quedan horizontales. Con el doble fondo opcional, el piso del maletero y la superficie de los respaldos quedan a la misma altura (imagen); sino queda un escalón grande. Opcionalmente se puede pedir que el respaldo del asiento del pasajero delantero se abata hacia delante para poder transportar objetos largos.
El maletero tiene unas formas regulares que facilitan la colocación del equipaje (mediciones). Si tiene el equipo de sonido con subwoofer en el maletero —colocado bajo el piso—, disminuye mucho la capacidad porque se pierden 17 centímetros en altura.
El borde de carga está a 77 centímetros del suelo, que es mucho si hay que subir objetos pesados y/o voluminosos.
Para sujetar la carga hay cuatro argollas en las que fijar una red (opcional) y dos perchas para bolsas, una cada lado del maletero. Hay otra más que sale bajo la bandeja cubreequipaje. Ésta es dura y se queda fija cuando se abre el portón. Si se quieren introducir objetos altos hay que retirarla con la mano previamente.
Bajo el piso del maletero hay una rueda de repuesto de emergencia, un botiquín y espacio para dejar algunas cosas más de pequeño tamaño. La pequeña dotación de herramientas está guardada junto al paso de rueda derecho, dentro del tapizado.
Los triángulos de emergencia van en el portón. Éste es pesado, por lo que se echa en falta el sistema de apertura y cierre automático que sí está disponible en otros modelos similares. Como los pilotos van en el portón, sus funciones de señalización cuando está abierto la desempeñan los pilotos que hay en el paragolpes (imagen).