El T-ROC es un avance del aspecto de un nuevo todoterreno de Volkswagen. Una peculiaridad de su carrocería es que el techo está compuesto por dos piezas que se pueden desmontar y guardar en el maletero (imagen). El interior es de cuatro plazas.
Mide 4,18 metros de longitud, 1,83 metros de anchura y 1,50 metros de altura. Por lo tanto, salvo por anchura, es de menor tamaño que el Volkswagen Tiguan (4,43 x 1,81 x 1,70 metros respectivamente). La distancia entre ejes del Volkswagen T-ROC es 2,60 metros, algo mayor que la de un Volkswagen Golf y muy larga para la longitud total de la carrocería. El T-ROC, es de mayor tamaño que el Taigun, otro prototipo sobre el que Volkswagen está preparando un modelo de producción.
El T-ROC está construido usando como base la nueva plataforma modular (MQB) que el Grupo Volkswagen ha desarrollado para vehículos de distintos tamaños con motor en disposición transversal. Dentro de la marca Volkswagen, ya la utiliza el Golf.
Tiene un motor Diesel de 2,0 litros de cilindrada y 184 caballos que va en combinación con un cambio de marchas automático de siete marchas. Este motor es el mismo que tiene el Volkswagen Golf GTD pero, en este modelo, va asociado a un cambio automático de seis velocidades en lugar de siete. La tracción es en las cuatro ruedas, mediante un embrague Haldex de quinta generación.
El consumo medio homologado de este prototipo es 4,9 l/100 km, que es un valor bajo si lo comparamos con el de modelos actuales que estén en venta (listado de todoterrenos de tamaño y potencia similar, ordenado por consumo).El Volkswagen T-ROC puede acelerar desde parado hasta 100 km/h en 6,9 segundos y su velocidad máxima es 210 km/h.
En función del tipo de superficie por la que se circule, se pueden elegir (desde un mando giratorio ubicado junto a la palanca de cambios) distintos modos de conducción: Street, Off-road y Snow. Al accionar cada uno de esos modos, se altera el funcionamiento del sistema de tracción y la respuesta del motor, del cambio de marchas automático DSG, del antibloqueo de frenos ABS, del asistente de arranque en pendiente y de la ayuda electrónica de descenso de pendientes. Además, en el modo Off-road se activa un dispositivo compuesto por unos led y unas cámaras, que recogen información de los obstáculos que hay en la parte delantera y trasera del vehículo. Estas imágenes aparecen representadas en la pantalla de una tableta extraíble que hay en la consola.
Los datos de la instrumentación aparecen en una pantalla ubicada detrás del volante y es de 12,3 pulgadas. Su aspecto y la información que muestra cambian en función del modo de conducción elegido. Por ejemplo, en el modo de conducción Off-road, el velocímetro indica hasta 80 km/h en lugar de 260 km/h. En una segunda pantalla aparecen los datos del climatizador. La tercera pantalla es la tablet señalada en el párrafo anterior, la cual, además de mostrar las imágenes que recogen las cámaras de la parte frontal y posterior, también sirve como soporte a las imágenes de otra cámara (extraíble para usar fuera del coche) ubicada en la base del espejo retrovisor.
El diseño de este prototipo ha estado dirigido por Walter de Silva y Klaus Bischoff.