No es fácil de creer. Y de hecho no es literalmente verdad. Pero casi. El mejor participante del Shell Eco-Marathon (la piloto de un equipo japonés) dio el pasado sábado nueve de junio, seis vueltas al circuito de Nogaro, de 3,6 kilómetros de longitud, con 0,006 litros de gasolina. 6 centímetros cúbicos para recorrer casi 22 kilómetros. 29 centímetros cúbicos para recorrer 100 kilómetros. Sólo un litro para recorrer 3.444 kilómetros.

¿Cómo lo hacen? El truco principal es de conducción. La velocidad media mínima durante las seis vueltas es de 25 km/h y los equipos participantes se ajustan lo más que pueden a esta media. Y para ello, el conductor del coche (que no puede pesar menos de 45 kg), arranca el motor durante unos segundos (no más de tres o cuatro en los mejores equipos) y con la velocidad que gana durante ese instante, se lanza con el motor parado a recorrer todos lo metros que puede. Como los coches pesan poco (unos 25 kg los mejores) con poca potencia alcanzan rápidamente velocidad y después recorren muchos metros por inercia, ya que las ruedas son muy finas (poco rozamiento con el suelo) y los coches tiene poca resistencia aerodinámica (poco rozamiento con el aire). Al final no necesitan encender el motor más que un tres o un cuatro por ciento del tiempo total de marcha.

El piloto puede pasarlo mal, especialmente si hace sol. No puede circular aire por dentro del coche (estropea la aerodinámica) y el habitáculo es mínimo, en condiciones casi asfixiantes. Sería imposible pasar seis días seguidos dentro del coche para recorrer 3.500 km en estas condiciones. Aun así, parece increible recorrer 22 kilómetros de un tirón con menos gasolina de la que cabe en un dedal.

El reglamento no es demasiado detallado, por lo que la libertad de los participantes para diseñar los motores, transmisión y carrocería es elevada. Esta libertad es buena porque incentiva la creatividad, pero también perjudica la igualdad ya que la diferencia de presupuesto entre unos equipos y otros puede suponer grandes diferencias en el resultado.