Porsche ofrece a los clientes de cualquiera de sus modelos la opción de acudir a la fábrica a recoger su coche cuando sale de la línea de montaje. En km77.com hemos tenido la oportunidad de viajar a la que tiene en Leipzig y realizar algunas de las actividades que Porsche ofrece a los propietarios de un Cayenne o un Carrera GT.
Leipzig, ciudad situada al noroeste de Alemania, es donde se fabrican estos dos modelos. Porsche inauguró estas instalaciones el 20 de agosto de 2002 para la producción del Cayenne.
La visita y el resto de las actividades incluidas son una opción m�s de compra del vehículo, como pueden serlo unas llantas diferentes o un color de carrocería distinto. En el caso de Cayenne, el precio de esa opción es 678 €.
Por esa cantidad, Porsche atiende de forma a individual a ese cliente a su llegada a las instalaciones, le muestra la cadena de montaje, le entrega su coche y le ofrece la posibilidad de circular en los dos circuitos de pruebas, uno de asfalto y otro de tierra.
Además conocerá el centro de clientes, un edificio con forma troncocónica invertida (imagen) que alberga una colección de modelos representativos de la marca, un restaurante con vistas panorámicas, una tienda, la sala de conferencias y el centro de control del circuito. Lo que no está incluido en ese dinero es el viaje y el alojamiento, que corre a cargo del cliente.
Las actividades que nosotros realizamos son muy similares a las que el cliente puede hacer, aunque es posible que varíen ligeramente en duración o el orden en que se realizan, y sobre todo, en el hecho de que nosotros no nos volvimos a casa a bordo de un Cayenne, algo que sí hará quien acuda como cliente.
Si no se es cliente, Porsche tambien acepta visitas de grupos organizados (30 personas) pagando 655 € por persona.
Al llegar a la fábrica, y tras una pequeña bienvenida, salimos directamente al circuito de pruebas. La pista tiene 3,75 km de longitud y 12 m de anchura. Normalmente está separada en dos: una de ellas (de 1,74 km de longitud) es donde se hace una pequeña prueba de cada Cayenne o Carrera GT que acaba de salir de la línea de montaje; en la otra (de 2,16 km), se realizan cursos de conducción para clientes u otras actividades de la marca. En caso de necesidad, se pueden crear hasta cuatro pequeños circuitos independientes.
La más grande reproduce —a menor escala— algunas curvas famosas de otros circuitos, como la bajada que hay en el de Laguna Seca («Sacacorchos»), las chicanes «Mobil 1» de Nürburgring y «Bus Stop» de Spa-Francorchamp o la curva de Lesmo del circuito de Monza (plano del circuito).
Los coches que yo tuve la oportunidad de conducir fueron un Cayman S (295 CV), un 911 Turbo (480 CV) y tres Cayenne: S (340 CV), Turbo (450 CV) y Turbo S (521 CV). El recorrido se hizo, en nuestro caso, guiado por un instructor en un 911 GT3.
Tras el circuito de asfalto vino el recorrido fuera de él. Un trayecto de 6 km de longitud, situado en una antigua parcela de prácticas militares (aún se puede ver algún búnker), alberga diferentes obstáculos naturales (cruce de puentes, superfices bacheadas) y artificiales (una rampa con un 60 por ciento de inclinación o un balancín).
Tras disfrutar al volante regresamos al centro de clientes, donde visitamos la colección de coches (imagen) y comimos. Durante la comida, gracias a las vistas panorámicas de 360 º que ofrece el edificio, observamos las vueltas de demostración que daban los instructores a un grupo de visitantes de un Club Porsche a bordo del Cayenne Turbo S.
Tras la comida visitamos parte de la fábrica (imagen). Si lo normal es que cualquier instalación de montaje de un automóvil esté limpia, �sta sorprende aún más. También llama la atención el ritmo de trabajo, mucho más relajado que en plantas de gran volumen como puede ser la de Opel en Figueruelas (Zaragoza).
La zona dedicada a la producción ocupa 18.600 m² y la de administración otros 3.200 m². Actualmente hay 400 empleados que trabajan en dos turnos, un total de 38 horas semanales cada uno. De este modo, cada día salen de la cadena de montaje 150 unidades del Cayenne y 2 ó 3 del Carrera GT (cuya producción ya ha finalizado). A día de hoy, un total de unos 130.000 Cayenne y 1.270 Carrera GT han salido de estas instalaciones.
En esta fábrica se montará el futuro Panamera, que se comercializará en 2009. Para ello Porsche construirá, a partir de septiembre, un nuevo edificio de 25.000 m², un centro logístico de 30.000 m² y contratará a 600 nuevos empleados.
Los motores del Panamera se fabricarán en la planta de Zuffenhausen (donde se hacen los del Cayenne) mientras que las carrocerías llegarán pintadas de la fábrica que tiene Volkswagen en Hanover.
Por último, y a modo de gran sorpresa, Porsche nos permitió montar como copilotos en este Carrera GT (612 CV) durante un par de vueltas. |