Toyota introdujo dos nuevos motores, uno de gasolina y otro Diesel —120T y 115D—, en la gama Auris 2015 y los eliminó en mayo de 2018. Las suspensiones, la dirección y los materiales aislantes también han sido modificados.
El motor de 1,2 litros de gasolina está sobrealimentado mediante turbocompresor. La presión máxima de sobrealimentación es 2,0 bar, tiene distribución variable, inyección directa y puede funcionar con ciclo Otto o Atkinson para aumentar su nivel de eficiencia energética (hay más información del funcionamiento de este tipo de motores en este artículo).
La variante 1,6 Diesel de 116 CV (de origen BMW, ya presente en la gama Toyota Verso), la más potente que se comercializará, ya que Toyota nos ha comunicado que no tiene intención de introducir en el futuro una versión superior, sustituye al anterior motor de 2,0 litros que sigue empleándose en el Toyota Avensis. La explicación de que este último sea descartado es que no resulta rentable adaptarlo al nivel de emisiones Euro 6 en el Auris porque, además, la gran mayoría de conductores demandan actualmente un nivel de potencia más cercano al que da el motor de 1,6 litros. Sus prestaciones eran superiores, ya que aceleraba de 0 a 100 km/h en 10,0 segundos (ahora 10,5) y la velocidad máxima era 200 km/h (190 km/h actualmente). Su consumo también era más elevado (4,3 frente a 4,1 l/100 km del motor 1.6).
El Diesel de menor potencia, con 1,4 litros de cilindrada, tiene un nuevo turbocompresor cuya turbina tiene un eje que gira con un 20 % menos de fricción. El compresor genera mayor presión a bajo régimen (el par máximo ahora se da a 1400 rpm, antes a 1800). El sistema de inyección también es nuevo, ya que tiene una bomba más potente que introduce el combustible en el cilindro a mayor presión (ahora inyecta a 180 MPa, antes a 160) y los inyectores pasan de ser de tipo piezoeléctrico a tipo solenoide. Los pistones son más ligeros y tienen un diseño diferente que, según Toyota, mejora la eficiencia de la combustión en un 3,4 %. En la línea de escape se ha añadido un sistema de reducción catalítica de óxidos de nitrógeno. Todos estos cambios están encaminados a aumentar la potencia a bajo y medio régimen, pero no la máxima, que permanece en 90 CV.
En lo que respecta a elementos que afectan al apartado dinámico y al confort, estos reciben los siguientes cambios: los amortiguadores son nuevos; El diseño de la suspensión delantera, de tipo McPherson, es ligeramente diferente y tiene más elementos aislantes para disminuir el paso de las vibraciones al habitáculo. La suspensión trasera, como en el modelo 2013, es diferente en función de la versión. Con el motor Diesel de 1,4 litros (90 CV) es un eje de torsión (más información de este tipo de amortiguación en este artículo); en el resto se trata de un paralelogramo deformable.
La dirección de asistencia eléctrica ha sido retocada para que el par resistente aumente un poco más que antes a velocidades superiores a «60-80 km/h». También se ha trabajado para que el efecto de retorno sea más preciso y la posición de volante centrado más perceptible. En el Auris 2015 hay materiales aislantes nuevos y empleados en mayor cantidad en determinadas zonas (como en la zona posterior del salpicadero, en el capó y en el túnel de transmisión).