En 2015 Toyota renovó el Auris 2013, tanto su variante de cinco puertas (prueba del Toyota Auris 5p 2013), como la de carrocería familiar (prueba del Toyota Auris Touring Sports 2013).
Desde su lanzamiento al mercado a principios de 2015, el Auris ha sufrido varias modificaciones en la gama de motores y en el equipamiento. El último fue en mayo de 2018, momento en el que Toyota dejó de vender las variantes Diesel y de gasolina.
La única versión disponible desde la fecha mencionada es la híbrida —140H de 136 CV—, que en mayo de 2016 tuvo una actualización de software para conseguir una mejor alineación entre el régimen del motor y la velocidad del coche, y, según Toyota, proporcionar así una sensación de aceleración más lineal. En la misma fecha, Toyota actualizó el Auris con dos nuevos colores disponibles para la carrocería —«Gris meteoro» y «Azul océano»— y mejoras en el sistema multimedia «Toyota Touch 2» —nuevos menús para acceder a las diversas funciones del sistema— y en el acceso al portal en línea para clientes «My Toyota».
Las versiones con carrocería de cinco puertas tienen un precio de partida de 19 240 euros y las que tienen una de tipo familiar (Touring Sports), de 20 990 €. Todos los precios.
Hasta mayo de 2018 también estaba disponible con dos motores Diesel —90D de 90 CV y 115D de 111 CV— y uno de gasolina —120T de 116 CV—. Este último iba ligado a un cambio manual de seis relaciones, permitía al Auris acelerar de 0 a 100 km/h en 10,1 segundos y tenía un consumo medio homologado de 4,8 l/100 km. Estas cifras le colocaban como uno de los modelos más rápidos y eficientes entre sus alternativas (tabla comparativa de cuatro de las mejores alternativas en estos aspectos).
El motor Diesel de 1,6 litros y 111 CV que estuvo en venta hasta mayo de 2018 proporcionaba unas buenas prestaciones al Auris: aceleración de 0 a 100 km/h en 10,5 segundos y un consumo medio de 4,2 l/100 km.
En algunas versiones con motor de gasolina o Diesel, existía la opción de montar una caja de cambios automática de tipo variador continuo denominada Multidrive S. Tenía algunas modificaciones con respecto a la que utilizaba el Auris 2013, con el fin de hacerla más eficiente. Asimismo, Toyota añadió un modo llamado Sport con el que trataba de simular el funcionamiento de un cambio automático con relaciones fijas (se pueden seleccionar las marchas con toques en la palanca o en las levas que hay detrás del volante).
La suspensión y la dirección han sido revisadas para mejorar el confort de marcha y la precisión de guiado. Dentro del conjunto de elementos relacionados con la seguridad, hay disponible un nuevo paquete opcional llamado «Toyota Safety Sense», consistente en una cámara y un láser instalados por delante del retrovisor central que se emplean para las siguientes funciones: sistema de alerta por riesgo de colisión, alerta por cambio involuntario de carril, cambio automático de luces cortas y largas y reconocimiento de señales de tráfico. Toda la información que proporcionan estos sistema se visualiza en la pantalla de 4,2 pulgadas que hay en el centro de la instrumentación.
En el interior Toyota dice haber mejorado la sensación de calidad. Ésta es buena en cuanto a ajustes, pero hay abundantes plásticos duros que, aunque bien enrasados, están en zonas muy visibles (como la consola, la guantera bajo el reposabrazos central delantero o los paneles de las puertas) y tienen una superficie brillante que da un aspecto pobre al interior. Algunos mandos han cambiado de lugar y de forma, como los que controlan el sistema multimedia y el climatizador. En la instrumentación, se han añadido sendas viseras a los dos indicadores principales (velocímetro y cuentarrevoluciones) para dar un efecto de profundidad (imagen). Los asientos están cubiertos con nuevas telas.
La nueva pantalla del salpicadero (de tipo capacitivo) funciona correctamente. Las zonas táctiles que sustituyen las funciones que antes hacían pulsadores mecánicos tienen un tamaño y una respuesta a las pulsaciones correcto. La superficie que recubre el marco de la pantalla es de color negro brillante y no aparenta ensuciarse con facilidad (imagen). Sustituir botones que no requerían apenas apartar la vista de la carretera, no nos parece una decisión acertada. En Toyota nos explican que esto se debe a la búsqueda de un diseño más limpio y diáfano de la consola.
En el exterior, el cambio más notable es que el paragolpes delantero tiene un aspecto distinto. El diseño de las llantas, que pueden ser de 16 o 17 pulgadas, es nuevo.
Según el comparador de seguros de coches de km77, asegurar a todo riesgo un Auris Hybrid con el nivel de equipamiento «Feel» tiene precio mínimo de 401 euros. Este precio corresponde a una póliza de NUEZ Seguros con una calidad normal (5,41 puntos sobre 10) y una relación entre calidad y precio buena (7,71 puntos sobre 10 posibles). El tomador es una mujer de 40 años, con 20 de carné, que recorre hasta 20 000 km anuales, aparca en un garaje colectivo y vive en Salamanca.