El Audi Q5 es un todoterreno ligero de cinco plazas, basado en la plataforma del A4. Tiene un tamaño inferior al Q7 y mayor al Q3. Por la gama de motores y el precio que tiene, es una alternativa al BMW X3, el Mercedes-Benz GLK o el Volvo XC60, entre otros todoterreno. El Q5 está disponible desde 35 840 € (todos los precios).
Por estabilidad, el Q5 está muy próximo al X3, que es la referencia en este tipo de coches. Es un coche cómodo, seguro por sus reacciones y con mucho equipamiento disponible. En relación a su tamaño exterior no sobresale por la amplitud del habitáculo (más información en las impresiones del interior).
El Q5 no tiene reductora ni diferenciales bloqueables delante o detrás. Sí hay un control de velocidad para el descenso de pendientes. Tiene unos ángulos de ataque y salida de 25º; el ventral es 17,5º —poco para superar obstáculos complicados—. La altura libre al suelo es de 20 centímetros, un buen valor, mientras que la altura de vadeo es 50 centímetros, un dato normal (imagen).
El ABS tiene un modo de funcionamiento para fuera del asfalto que detecta el tipo de suelo por el que se está circulando —arena, grava o piedras—, lo que modifica su respuesta.
La distancia entre ejes (batalla) es grande (2,81 metros), lo que permite que el habitáculo del Q5 sea espacioso. Los respaldos de los asientos traseros pueden reclinarse y, opcionalmente, la banqueta se puede desplazar longitudinalmente 100 milímetros (más información en las impresiones del interior). El equipamiento de serie incluye varios huecos para objetos, portabebidas y tomas de corriente. Hay una opción que incluye un portabebidas climatizado, con capacidad de calentar o enfriar (imagen), y un punto de fijación en el suelo del lado del acompañante para colocar distintos portaobjetos.
El maletero tiene una capacidad de 540 litros. Además, tiene un doble fondo. Abatiendo los respaldos traseros hacia adelante (imagen), mediante una palanca de desbloqueo ubicada en el maletero, la capacidad de carga aumenta hasta 1560 litros.
Opcionalmente, el respaldo del asiento del acompañante puede abatirse para facilitar el transporte de objetos largos (imagen). Audi también ofrece un kit de fijación mediante guías para el equipaje, una red divisoria y una bandeja protectora.
Hay tres versiones de gasolina —180, 211 y 271 CV— y tres Diesel —143, 170 y 240 CV—, además de una híbrida —Q5 Hybrid quattro—. Desde octubre de 2011, el motor Diesel de menor potencia está disponible con tracción delantera o total («quattro»). El resto sólo se puede adquirir con tracción en las cuatro ruedas. La caja de cambio puede ser manual de seis velocidades, automática de doble embrague («S tronic») con siete relaciones (más información) o automática de convertidor de par («Tiptronic») de ocho marchas.
La tracción es permanente a las cuatro ruedas mediante un diferencial «Torsen», el sistema que emplea Audi en los modelos que tienen el motor colocado longitudinalmente, excepto en el R8. En condiciones normales transmite la fuerza al eje delantero y trasero en una relación 40/60. Según la adherencia, puede variar este reparto desviando hasta un 65% del par hacia la parte delantera o hasta un 85% a la parte trasera.
Gasolina | Diesel | ||||||
Versión | CV | Cambio | Tracción | Versión | CV | Cambio | Tracción |
2.0 TFSI | 180 | Manual (6 vel.) | Total | 2.0 TDI | 143 | Manual (6 vel.) | Delantera |
2.0 TFSI | 211 | Manual (6 vel.) / Aut. Tiptronic (8 vel.) | Total | 2.0 TDI | 143 | Manual (6 vel.) | Total |
3.2 FSI | 271 | Aut. S tronic (7 vel.) | Total | 2.0 TDI | 170 | Manual (6 vel.) / Aut. S tronic (7 vel.) | Total |
Híbrido | 3.0 TDI | 239 | Aut. S tronic (7 vel.) | Total | |||
Versión | CV | Cambio | Tracción | ||||
Hybrid quattro | 245 | Aut. Tiptronic (8 vel.) | Total |
El Q5 2.0 TDI de 143 CV con tracción delantera se puede adquirir a partir de 35 840 €. Es un precio ligeramente inferior al de un Mercedes-Benz GLK o un Volvo XC60, ambos también de tracción delantera y motor Diesel de 143 CV en el primer caso y 163 CV en el segundo (listado). Hay modelos de tamaño y potencia similares mucho más económicos, como un Renault Koleos, un KIA Sportage o un Nissan Qashqai (listado).
La variante 2.0 TDI de 170 CV y tracción total («quattro) del Q5 está en venta a partir de 43 120 €, un precio superior al del XC60 y el GLK, pero inferior al del BMW X3, los tres con motores Diesel de 160 a 185 CV (listado).
Además de la versión que hemos probado con detenimiento (2.0 TDI de 170 CV), durante la presentación internacional pude conducir brevemente otras tres versiones, las de gasolina de 211 y 271 CV y la Diesel de 239 CV. Todas me parecen muy recomendables dentro del grupo de potencia al que pertenecen.
El de 211 CV mantiene las buenas cualidades que hemos visto en todos los modelos que hemos conducido con este motor: es suave, silencioso y empuja con fuerza en un margen amplio. El más potente compensará a quien busque las máximas prestaciones disponibles. Sin embargo, si esto no es una prioridad, el de 211 CV me parece la mejor opción porque su consumo es menor y resulta suficiente para mover con soltura al Q5.
Entre los Diesel de 170 y 240 CV hay una diferencia grande en el empuje que dan los dos motores —en los de gasolina la sensación no es tan acusada—. El 2.0 TDI de 170 CV tiene el nuevo sistema de inyección por conducto común, lo que le hace es mucho más suave y silencioso que antes.
También sorprende porque empuja desde pocas revoluciones y llega a alcanzar un límite de giro elevado —unas 5.000 rpm— con mucha fuerza. El Q5 3.0 TDI de 240 CV puede ser una opción a tener en cuenta si se quiere un coche rápido y que gaste poco.
Todos los motores pueden ir asociados al cambio automático «S tronic» de doble embrague y siete relaciones. Su funcionamiento me ha parecido correcto y preferible, sin duda, a cualquier cambio manual. El control de estabilidad (ESP) tiene una función que detecta si sobre el techo se ha colocado una baca —capaz de soportar hasta 100 kg— y por lo tanto si el centro de gravedad del Q5 es más alto. En este caso, el ESP anticipa su funcionamiento.
Diseño y equipamiento
El aspecto de la carrocería mantiene los rasgos de otros modelos de Audi. En los faros hay una tira de led para la función de luz de día (imagen). También hay diodos para varias funciones de los pilotos (imagen). El portón es de aluminio. Como los pilotos están colocados en él, al levantarlo no se ven. Por ello, algunas de sus funciones están duplicadas —intermitentes y luces de posición— en los que hay colocados en el paragolpes y que incluyen también la de marcha atrás y la luz antiniebla. Los intermitentes y la luz de posición del paragolpes sólo se activan al abrir el portón (imagen).
Algunos elementos de la carrocería pueden ir pintados en negro —de serie—, en el mismo color que la carrocería o en un color que haga contraste. Opcionalmente, hay dos paquetes, denominados «S line» y «Offroad-Style», que modifican el aspecto exterior.
El primero le da una apariencia más deportiva (galería de imágenes) mediante unos paragolpes diferentes, llantas de 19 ó 20 pulgadas y una suspensión más firme. El otro incluye protectores para los bajos, tanto en la parte delantera como la trasera, y llantas de 19'' —que en principio no son las más adecuadas para el campo—. Los neumáticos de serie en casi todas las versiones son de medidas 235/65 y van montados en llantas de 17 pulgadas. Opcionalmente, puede llevar llantas de aleación de hasta 20 pulgadas (imagen).
Como otros modelos de Audi, puede tener el «Audi Drive Select». Este sistema puede variar la respuesta del acelerador, la asistencia y desmultiplicación de la dirección, el modo de funcionamiento del cambio automático y la dureza de la suspensión de ajuste variable. En función del nivel de equipamiento de cada unidad, pueden cambiar alguna o todas las funciones descritas.
Estos ajustes se pueden modificar a la vez en función de tres programas previstos: «Confort», «Automático» o «Dinámico». Si además el coche tiene el mando central «MMI», el conductor puede crear su propia combinación de ajustes (imagen).
Las versiones con cambio automático «S tronic » y «Audi Drive Select» no tienen la posición «S» («Sport») del cambio de marchas, ya que ésta se selecciona automáticamente con el modo «Dinámico» del «Audi Drive Select».
El Q5 estrenó el asistente para las luces que selecciona automáticamente las de carretera o las de cruce. Funciona igual de bien, o de mal, según se mire, que el que tiene BMW, por lo que los comentarios son igualmente válidos (comentarios). Además, puede tener interesantes elementos de equipamiento, poco frecuentes en un coche de estas características cuando el Q5 llegó al mercado a finales de 2008, como alerta por cambio involuntario de carril («Audi Lane Assiist») que mediante una vibración en el volante advierte al conductor de que está sobrepasando una línea de la calzada o un dispositivo de detección de obstáculos en ángulo muerto («Audi Side Assist»).
También puede tener un programador de velocidad activo («Adaptive Cruise Control») capaz de mantener una distancia constante con respecto al vehículo precedente pero sin función automática de detención y puesta en movimiento.
Otros elementos que puede tener son el sistema de iluminación activa en curva («Adaptive Light»), un asistente de aparcamiento con cámara trasera («Audi Parking System Advanced»), asientos delanteros con reglajes eléctricos así como calefacción y ventilación, conexión Bluetooth para teléfonos, un lector de DVD, sintonizador de TV, reconocimiento de voz, conexión para MP3 y iPod y un sistema de sonido «Bang&Olufsen». El sistema de navegación más costoso integra un monitor de alta resolución, con mapas en tres dimensiones (imagen), y disco duro para almacenar los mapas y música en formato MP3.
Otros elementos opcionales del Audi Q5 son el sistema de entrada y arranque sin llave («Advanced key»), el control de la presión de los neumáticos, un techo de cristal panorámico (imagen), un climatizador automático de tres zonas, las cortinillas para las lunas traseras, el portón del maletero eléctrico o un enganche de remolque abatible (imagen). El equipamiento de serie incluye el control de estabilidad, un freno de estacionamiento electromecánico, climatizador automático y una pantalla en el cuadro de instrumentos en la que se muestra, por ejemplo, la marcha ideal recomendada para conducir del modo más eficiente (fichas de equipamiento).
Precio del seguro
Asegurar a todo riesgo un Q5 2.0 TDI de 143 CV y tracción delantera cuesta un mínimo de 622 € para un un hombre casado de 35 años con carné desde los 18 y tres sin siniestros, que resida en Barcelona, utilice el coche a diario, recorra hasta 15 000 km anuales y aparque en un garaje comunitario. Es una póliza de buena relación calidad-precio —6,6 sobre 10—, según nuestro comparador de seguros. Un seguro a todo riesgo con franquicia se puede obtener desde 289 € —franquicia de 1200 €— y hasta 332 € —franquicia de 290 €—. Una prima a terceros ampliada —robo, incendio y lunas— cuesta, como mínimo, 252 €. En todos los casos son precios de la compañía Balumba, la más asequible para estos supuestos.