El habitáculo del A4 que se comercializa desde 2012 tiene algunos cambios decorativos que afectan principalmente a las combinaciones de colores posibles.
Audi también aprovechó ese momento para reducir el número de mandos. En la climatización hay dos menos (los de la intensidad del caudal del aire y la orientación del mismo estaban duplicados), el «Audi Drive Select» pasa de estar compuesto por tres botones a uno solo y del sistema multimedia han desaparecido los de las funciones Name, Info, Car y Set up (a las que ahora se accede desde el mando central).
Por lo demás, no hay diferencias con los A4 que probamos de la gama anterior a esta, por lo que siguen siendo válidas las impresiones del A4 berlina 2008 (más información) y del A4 Avant 2009 (más información). A modo de resumen, el A4 es un coche con una amplitud normal para su tamaño exterior, con una calidad de acabados muy buena —ligeramente por encima de un BMW Serie 3 — y con un puesto de conducción en el que se puede ir sentado muy cerca del suelo y que, por ese mismo motivo, no resultará cómodo entrar y salir a todo el mundo.