El bastidor es de acero estampado, con algunas piezas hechas de una chapa de resistencia ultra alta (1.000 MPa de límite elástico). En parte debido a su gran volumen, el peso es muy alto; según la versión, está entre 1.640 y 1.735 kg.
La suspensión delantera es de tipo McPherson y la trasera es un tipo de paralelogramo deformable patentado por Renault. Esta suspensión tiene de peculiar que los elementos superior e inferior del paralelogramo están interconectados. Como en toda suspensión moderna, tiene variantes de alineación previstas por la elasticidad de los casquillos de la suspensión y del subchasis en que se apoya. Los muelles son helicoidales en los dos ejes.
Dado su peso, necesita unos frenos muy grandes: 324 mm de diámetro delante y 300 detrás. Tiene servofreno de emergencia, antibloqueo y repartidor electrónico. El control de estabilidad es equipo de serie en toda la gama. La dirección tiene asistencia hidráulica variable en función de la velocidad.
La transmisión es a las ruedas delanteras en todo caso. Los motores de cuatro cilindros tienen una caja de cambios manual de seis velocidades, la misma que lleva el Laguna. La versión de gasolina va ligeramente corta de desarrollo, ya que en sexta velocidad llega a un régimen mayor del de potencia máxima. El Diesel, en cambio, no llega en sexta al régimen de potencia máxima. En ambos casos se ofrecerá opcionalmente una caja de cambios automática de cinco velocidades con mando secuencial (que Renault denomina Proactiva).
Los Vel Satis con motores de seis cilindros únicamente se ofrecen con la caja automática de cinco velocidades (Proactiva). Esta caja tiene una función que la desembraga del motor cuando el coche está parado, lo que reduce el consumo urbano y limita la presión que hay que hacer sobre el freno en esos momentos.