Hasta ahora, la única versión disponible del Scénic RX4 tenía un motor de gasolina de 2,0 l de cilindrada y 140 CV de potencia máxima (de inyección indirecta), Renault comienza a vender este modelo con el motor turbodiésel dCi de 105 CV. Es básicamente el mismo motor que el de la versión normal del Scénic (llamado dTi), pero con inyección directa por conducto común. Su potencia máxima es 105 CV a 4.000 rpm y su par motor es de 204 Nm a 1.500 rpm. Las ventajas del sistema de conducto común no se notan sólo en la potencia, también en el consumo y el ruido.
Poco más cambia el RX4 dCi con relación al de gasolina en los demás aspectos: el peso sólo aumenta 20 kg, la carrocería, el interior y el sistema de tracción son iguales. Se trata de una variación sobre la carrocería del Scénic pero con tracción total permanente, más altura sobre el suelo y unos neumáticos distintos, que dan como resultado un coche de carretera, pero apto para caminos no asfaltados.
A un precio muy poco superior a la versión existente del RX4 (3.900.000 pesetas frente a 3.775.000), este motor resulta más apropiado para el tipo de vehículo que es el Scénic RX4, y de hecho, la marca espera que el 70% de las ventas sean de la nueva versión Diesel.
Como equipamiento de seguridad, tiene de serie antibloqueo de frenos, cuatro airbags (conductor, pasajero y laterales delanteros), cinturones de seguridad con tensores de emergencia y limitadores de esfuerzo, reposacabezas regulables ergonómicos, y cinturones de tres puntos. Para el confort, posee climatizador, elevalunas eléctricos delanteros y traseros, reglaje eléctrico de retrovisores exteriores, reglaje interior de faros, huecos para objetos con capacidad total de 110 litros, hueco delantero refrigerado o cierre centralizado por telemando de radio frecuencia.
Como equipo opcionales con sobreprecio, puede dotarse al coche con tapicería de cuero, sistema de navegación Carminat, pintura metalizada, techo practicable y barras de techo.