La carrocería del coupé 407 mide 4.815 mm de largo y 1.868 mm de ancho; es, por tanto, más largo y ancho que la berlina. Como la batalla es la misma (2.725 mm), lo que Peugeot ha modificado es la longitud de los voladizos. De este modo, el delantero es 55 más largo que el de un 407 berlina.
La parte inferior del paragolpes delantero está lo suficientemente alta para que no golpee contra los bordillos de altura normal. Además, los sensores de aparcamiento están colocados de tal forma que sólo advierten de los obstáculos que puedan golpear al paragolpes y no de aquellos que quedan por debajo de él.
El acceso al interior es bueno porque las puertas son de grandes dimensiones y dejan un vano muy grande. El inconveniente que tienen es que pesan mucho y en ciertas circunstancias, por ejemplo si el coche está en una rampa o con hace mucho viento, cuesta esfuerzo manipularlas.
Como en otros coches con carrocería cupé o en alguna berlina (imagen), las ventanillas de las puertas no tienen marcos; para facilitar el cierre, bajan automáticamente 1 cm al abrir la puerta y no vuelven a subir hasta que está cerrada (para que el cristal ajuste correctamente contra la goma que asegura la estanqueidad). De serie, el cristal del que está hecho la ventanilla es laminado. Además de ser más seguras en caso de accidente (si se rompen no saltan en mil pedazos), aíslan mejor del ruido exterior.
El maletero es amplio, tiene 400 l de capacidad, y sus formas son regulares. Mide 97 cm de profundidad, con lo que a algunas personas les será difícil llegar hasta el fondo; su anchura es 110 cm.
La tapa del maletero se abre desde el mando a distancia o pulsado el botón que hay oculto en el cero del anagrama «407». Aunque el coche esté pegado a una pared se puede abrir, ya que no golpea. La parte superior del maletero que no corresponde a la tapa está sin tapizar.
Tiene cuatro argollas para sujetar una red y está iluminado. En un lateral está oculto el cargador de discos y el altavoz de graves; en el otro está la batería. Hay una trampilla para comunicar el maletero con el habitáculo y los respaldos traseros se pueden abatir.
El sensor de la conexión automática del limpiaparabrisas queda a unos 30 cm de la parte superior del cristal. No está en el centro, sino ligeramente desplazado hacia el lado derecho, de tal forma que al conductor no le resta apenas visibilidad porque lo oculta el retrovisor.
Los retrovisores exteriores me han parecido pequeños. Tienen función de plegado eléctrico, bien al pulsar el botón correspondiente o bien al cerrar el coche con el mando a distancia. Si se han plegado con el botón del interior, al abrir el coche con el mando no se extienden de forma automática, impidiendo de este modo que golpeen contra una columna o la pared.
Los faros son de xenón para las cortas y las largas; además tienen la función de alumbrado en curva. Su resultado es bueno.