Consumo Plug-In Hybrid 225 (descatalogado)
Cuando el 308 circula únicamente con el motor eléctrico, el consumo energético es moderado, ni especialmente alto ni lo contrario. Según los datos reflejados por el ordenador de viaje, en vías de circunvalación a un ritmo suave gasta a razón de 18 kWh/100 km (puede recorrer alrededor de 55 km, un dato cercano a los 59 homologados), mientras que en autopistas y al ritmo del resto del tráfico, asciende a unos 28 kWh/100 km (35 km de autonomía, aproximadamente).
Una vez se agota la carga de la batería, el motor de combustión entra en funcionamiento y, por ende, comienza a utilizar carburante, pero lo hace a un ritmo similar o muy poco por encima del de modelos sin sistema de hibridación. Es decir, aún con el peso que supone la instalación de un sistema de este tipo (este 308 pesa 1708 kilos), el consumo de combustible siempre se mantiene en niveles moderados.
Un buen ejemplo de ello son los resultados que obtuvimos al hacer nuestro recorrido de consumo, cuyas principales características están explicadas aquí. Lo hicimos dos veces, una partiendo con el 90 % de carga de la batería y otra sin carga. En el primer caso (con carga), el 308 gastó 4,9 l/100 km de combustible y 1,8 kWh/100 km de electricidad, y en el segundo (sin carga), empleó 6,5 l/100 km y 0,2 kWh/100 km. Con estos datos y para este recorrido, la diferencia de coste entre salir con carga y sin ella es de 1,5 €, aproximadamente (estimando un precio de la gasolina de 1,80 €/l y de la electricidad de 0,30 €/kWh). En recorridos más largos, dicha diferencia tenderá a ser más pequeña si no se para a cargar.
El dato de consumo sin carga en la batería, de 6,5 l/100 km, es muy bueno incluso si lo comparamos con modelos de potencia similar sin sistema de hibridación: 7,9 l/100 km para el Peugeot 508 PureTech de 224 CV, 7,2 l/100 km para el Opel Insignia 2.0 CDTi Biturbo 210 CV u 8,6 l/100 km en el Audi A4 allroad 45 TFSI de 245 CV. Otros modelos que sí llevan un sistema híbrido enchufable de características similares, como el Mercedes-Benz A 250 e o un Volkswagen Passat GTE (ambos con 218 CV), igualmente gastaron más, aunque especialmente en el caso del Mercedes-Benz, las diferencias fueron mínimas (gastó 0,2 l/100 km más en el mismo recorrido).
Recarga Plug-In Hybrid 225
Como es habitual en los sistemas híbridos enchufables con baterías de capacidad semejante a la del 308 Hybrid (tiene 12 kWh brutos), solo se pueden hacer recargas en corriente alterna. De serie admite 3,7 kW de potencia, pero opcionalmente se puede pedir un cargador embarcado que alcanza los 7,4 kW (cuesta 400 €). Nosotros solo la hemos recargado a 3,4 kW, la potencia habitual contratada en los domicilios. Según Peugeot, a dicha potencia son necesarias casi 4 horas, y nuestras mediciones lo confirman prácticamente al minuto.
Si se carga con una tarifa de unos 0,30 €/kWh (puede ser más o menos, en función del contrato con la compañía eléctrica), cada recarga supone un coste de aproximadamente 3,5 € (la energía suministrada suele ser de unos 11,8 kWh). Considerando que la autonomía entre recargas puede llegar a ser de unos 50 kilómetros, el coste por cada 100 kilómetros asciende a 7 euros. O lo que es lo mismo, un 40 % menos (aproximadamente) que utilizando combustible (tomando como referencias un consumo medio de 6,5 l/100 km y un precio del litro de gasolina a 1,80 €).
La información que proporciona la instrumentación durante el proceso de carga es la habitual: tiempo estimado para finalizar la misma (es un dato bastante fiable), el porcentaje del proceso, la velocidad a la que lo está llevando a cabo (en km/h) y los kilómetros de autonomía ganados.
La toma de carga está en aleta trasera izquierda y se accede a ella a través de una portezuela de apertura manual. Como es habitual, alrededor del conector hay una luz que, en función del estado de carga (cargando, finalizada, programada o error), se ilumina de un color u otro.