La capota es manual y no está previsto que se venda con accionamiento eléctrico. Se quita con facilidad tanto desde dentro como desde fuera del coche. La operación, desde dentro, es muy sencilla. Se libera el único enganche, situado en el centro del marco superior del parabrisas, justo encima del retrovisor, con mucha rapidez. Una vez suelto, se empuja hacia atrás y en dos segundos está plegada en su sitio.
La posición de la capota plegada recuerda a la del Porsche 911, donde la propia capota hace las funciones de tapa del lugar de alojamiento. También es así en el MX-5, pero con algunas diferencias. La primera es que la parte delantera de la capota no es rígida, como en el Porsche, por lo que no queda con tan buen aspecto. La segunda, es que en los laterales no hay ninguna tapa que cubra el hueco, como sí sucede en el Porsche. Para cubrir esas zonas, en el MX-5 se venden unas lonas que su sujetan con botones metálicos y mejoran el aspecto del conjunto.
Para quitar la capota es mejor no salir del coche. Pero para ponerla, si tiene que hacer la operación una persona sola, es mejor que la empiece desde fuera. El primer tramo del recorrido para poner la capota se hace con mucha comodidad desde el exterior y con gran dificultad desde el interior, porque hay que hacer fuerza desde una posición incómoda y se somete al hombro a un esfuerzo poco saludable. Una vez se ha aproximado la capota al montante superior del parabrisas, es imprescindible entrar al coche para acabar la operación.
Antes de fijar la capota en la zona delantera, conviene bajar ligeramente las ventanillas de los dos lados o abrir las puertas, porque de lo contrario hay que hacer mucha fuerza para acoplar el enganche. En cambio, con las ventanillas bajadas, la capota no tira tanto y la operación se realiza sin tanto esfuerzo. Aún así, una persona sola puede tener alguna dificultad para hacerlo y le convendrá tirar hacia delante de los aros de la capota que quedan por encima de la cabeza.
La capota es de material diferente en función del motor que lleve el coche. Para el motor de 1,8 litros el material empleado es vinilo y tela para el motor de 2,0 litros. No conocía esta diferencia cuando probé los coches y no he comparado entre una capota y otra. Sólo he mirado con detenimiento la capota de tela.
La capota es de una sola capa, si bien en algunas zonas existen refuerzos. Por dentro quedan a la vista los hierros que conforman su estructura en algunos lugares. No es una capota que aísle bien de los ruidos y en ocasiones puede ser más ruidoso circular con la capota puesta que sin capota. Son ruidos diferentes, pero con la capota puesta, en algunos asfaltos, retumba mucho en el interior el ruido de rodadura.