El Kodiaq es un SUV de 4,76 metros de longitud y cinco o siete plazas. Es más largo que el modelo de primera generación, tiene un aspecto distinto, más equipamiento y, por vez primera, hay una versión híbrida enchufable. En general, el Kodiaq tiene un diseño orientado a la practicidad y facilidad de uso. Sus dimensiones interiores son normales para el tamaño exterior y es confortable para viajar. Está a la venta con precio de partida de 44 270 euros (todos los precios del Škoda Kodiaq 2024).
Algunas de sus alternativas son el Hyundai Sanfa Fe, el Mazda CX-60, el Renault Espace o el KGM Torres. Por precio, el Kodiaq no es de los más baratos. En el caso de los híbridos enchufables, sólo cuestan menos el BYD Seal U DM-i, el DFSK E5 y el Leapmotor C10 REEV (listado).
El precio de partida corresponde a la versión de gasolina de 150 caballos que lleva hibridación ligera (1.5 TSI mHEV). Es un mínimo muy razonable ya que consigue mover con suficiente soltura una carrocería tan voluminosa como la del Kodiaq, al menos si no circula con mucha carga. Otro aspecto interesante de este motor es que consigue consumos ajustados sin que la conducción tenga que ser especialmente cuidadosa. El Diesel de 150 caballos consumirá algo menos, pero cuesta 3000 euros más y no tiene etiqueta medioambiental Eco y sí la C (ficha comparativa).
Hay otro motor Diesel de 193 caballos, otro de gasolina de 204 y la mencionada versión PHEV que también tiene 204 caballos y 123 kilómetros de autonomía. Todos los motores van combinados con un cambio automático de doble embrague (el DSG de siete relaciones, salvo en el híbrido que es de seis) y dos de ellos, el de 193 y el de 204 CV, con un sistema de tracción total.
Aparte de su buen equilibrio entre prestaciones y consumo, nos ha gustado mucho lo bien que reacciona en circunstancias difíciles (como así ha sido en nuestras pruebas en circuito) y lo fácil que es de conducir en todo caso. La unidad que hemos probado tenía las ruedas más anchas posibles en la gama Kodiaq y la suspensión de dureza variable, elementos que han podido influir en el resultado final (más información en Impresiones de conducción).
Es práctico por varios motivos. El acceso y salida de las dos primeras filas de asientos son operaciones que se realizan con facilidad por el buen tamaño de las puertas (que además se abren en un buen ángulo) y porque las banquetas no están muy alejadas del exterior. El interior es muy amplio para cuatro ocupantes. Por contra, es más bien estrecho entre puertas y, por ello, no es una buena opción para transportar cinco adultos o tres niños en sillas. La tercera fila (en el caso de que cuente con ella) es muy parecida a las de sus rivales. Consta de dos plazas adicionales que pueden valer para niños que no estén crecidos y no necesiten llevar silla infantil, pero no son cómodas para adultos.
El maletero es muy grande, aunque no podemos compararlo con el de sus rivales porque no disponemos de datos precisos acerca de su volumen. Está dotado de muchos elementos para transportar la carga de forma cómoda; algunos son de serie y otros son opciones.
El interior cambia mucho respecto al del Kodiaq 2021. La pantalla central más grande es de 13” (imagen) es una opción de 510 € que reemplaza a la de 10" de serie, la palanca del cambio de marchas ahora está por detrás del volante (como en otros coches recientes del Grupo Volkwagen) y, otra novedad, es que en el salpicadero hay tres mandos rotatorios con una pequeña pantalla de 32 mm en su interior (llamados Smart Dials; imagen). Sirven para controlar diversas funciones y su practicidad es relativa, pero hay que reconocer que si son vistosos. Hay más información en el apartado Impresiones del interior.
Algunos elementos de equipamiento
El Kodiaq 2024 lleva un airbag central (entre los asientos delanteros) que antes no tenía. Otra novedad es que, en opción, puede tener Emergency Assist —que es la función que llega a detener el coche automáticamente si detecta que el conductor no está controlando el Kodiaq—y asistente en atascos —toma el control longitudinal y lateral a menos de 60 km/h si se encuentra en una vía rápida—. Más adelante habrá un sistema de aparcamiento remoto —se puede mover el coche adelante y atrás desde el móvil, a una distancia inferior a cinco metros; puede ser de utilidad si hay que aparcar en un lugar estrecho que deja poco sitio para abrir la puerta—. La detección de vehículos en el ángulo muerto aumenta frente al modelo anterior de 70 a 90 metros (hay nuevos radares).
Hay unos nuevos faros de ledes (Matrix LED) que según Škoda alumbran un 15% más y tienen un 50% más de ledes (son una opción que cuesta 815 € e incluye también la banda luminosa en la parrilla y los pilotos animados). El equipo de sonido de serie tiene nueve altavoces; el opcional (de la marca Canton) tiene 14. Los asientos opcionales ERGO cuentan con función de masaje (mediante 10 cámaras neumáticas).
Otros elementos disponibles son un nuevo asistente de voz (Laura) basado en Chat GPT. Según Skoda, podrá «responder a preguntas de conocimiento general, además de controlar los sistemas de infoentretenimiento, navegación y aire acondicionado del vehículo». Más adelante las funciones y posibilidades irán creciendo. Desde la aplicación MySkoda se pueden controlar diversos parámetros del coche, abrir o cerrar las cerraduras, mandar rutas al navegador o activar la calefacción independiente. En la versión híbrida enchufable también se puede gestionar la recarga o controlar el aire acondicionado.
La carrocería del Škoda Kodiaq mide 4,758 metros de longitud (61 mm más que antes), pero es más estrecha (18 mm) y baja (24 mm) que la del modelo anterior. El incremento en la longitud se debe a que los voladizos son más grandes, porque la distancia entre ejes solo es 3 mm mayor.