Opel Zafira es la nueva denominación que recibe el monovolumen de cinco o siete plazas que fue lanzado en 2012 como Opel Zafira Tourer. Opel ha actualizado su aspecto exterior y el equipamiento. Una de las principales novedades es que le ha incorporado el sistema de información y entretenimiento de otros modelos recientemente presentados, con más posibilidades de conectividad.
En la carrocería cambian el parachoques delantero, la parrilla, los faros y los pilotos. Ahora Opel ofrece opcionalmente faros con todas las funciones de iluminación desempeñadas por ledes. El Zafira mide 4,66 m, por lo que es una alternativa a monovolúmenes como el BMW Serie 2 Gran Tourer (4,56 m), el Citroën Grand C4 Picasso (4,60 m), el Ford Grand C-MAX (4,52 m) o el Renault Grand Scénic (4,63 m).
Está a la venta desde mediados de agosto y las primeras entregas comenzaron en septiembre de 2016. Sus precios parten de 17 930 euros para la variante de cinco plazas y de 18 250 euros para la de siete, ambas con el motor de gasolina de 1,4 litros y 120 caballos. Por el tamaño de su carrocería y por el volumen del maletero no hay ningún monovolumen más asequible, tanto con cinco como con siete plazas (listado de monovolúmenes de cinco plazas y listado de monovolúmenes de siete plazas que compiten con el Opel Zafira, ordenados por precio). Los más cercanos son el Dacia Lodgy Stepway, que por planteamiento no compite directamente con el Zafira (su calidad de acabados es más sencilla y sus posibilidades de equipamiento, menores) y el Kia Carens, que tiene un motor de 135 caballos pero es más corto y tiene un maletero menor.
La gama de motores consta de tres versiones Diesel —1.6 CDTI de 120 CV o 135 CV y 2.0 CDTI 170 CV—, dos de gasolina —1.4 Turbo 120 CV o 140 CV— y una de GLP de 1,4 litros y 140 caballos. Las de menor consumo son las versiones Diesel de 120 CV, tanto con cinco como con siete plazas (entre las dos hay una diferencia de coste de 308 euros; ficha comparativa), con una media homologada de 4,5 l/100 km. Es una media normal, superior a la de un Peugeot 5008 Active 2.0 BlueHDi de 150 CV (4,1 l/100 km) o la de un BMW 218d Gran Tourer de 150 CV (4,3 l/100 km) e idéntica a la de un Kia Carens 1.7 CRDi VGT de 115 CV (4,5 l/100 km) —ficha comparativa—.
Nosotros hemos conducido la versión más potente de gasolina, de 200 CV (puesto que ya condujimos en su día la más potente Diesel y estas impresiones de conducción siguen vigentes), que por el momento no llegará a España. El motor mueve con mucha soltura al Zafira pero su respuesta está claramente marcada por la entrada en funcionamiento del turbocompresor. Desde que se pisa el acelerador hasta que se obtiene una respuesta enérgica transcurre un tiempo notablemente mayor que el habitual en los actuales motores de gasolina sobrealimentados. Es silencioso y de funcionamiento agradable. La suspensión de dureza variable (chasis adaptativo electromecánico FlexRide, según lo llama Opel) absorbe bien la energía en cualquiera de las dos posiciones y da un grado de confort bueno, aunque no evita que la inclinación de la carrocería sea algo acusada cuando se circula por carreteras sinuosas con la posición más firme activada.
En el interior hay cambios en el diseño de la instrumentación, en el de la consola y en el de algunas molduras decorativas, aunque la estructura general se conserva (imagen del salpicadero del Zafira Tourer 2012 e imagen del salpicadero del Zafira 2017). La calidad de los ajustes y de los materiales empleados por Opel es correcta, aunque no de las mejores (en un Ford Grand C-MAX los plásticos de la parte inferior del salpicadero encajan entre sí con más solidez, por ejemplo). Siguen existiendo las mismas soluciones para compartimentar la carga que en el Zafira Tourer 2012: huecos en las puertas de generoso tamaño, una consola central con un carril donde se pueden desplazar los cajones (imagen) y un maletero amplio y diáfano (710 l en configuración de cinco plazas, mayor que el de sus alternativas según este listado comparativo) con argollas para sujetar la carga y un hueco escondido bajo el piso.
En lo concerniente al espacio interior, y puesto que no hay cambios en el habitáculo más allá de los citados, las impresiones de interior que dimos para el Zafira Tourer a este respecto son perfectamente válidas: es amplio para cinco ocupantes (para siete la amplitud es correcta siempre que en las plazas traseras viajen niños o se usen ocasionalmente por adultos), funcional y cómodo. Existe la posibilidad de que el techo sea de cristal y el parabrisas se prolongue hasta casi el pilar central (Opel lo denomina techo panorámico). El espacio de carga varía en función de la disposición de los asientos: en configuración de cinco plazas tiene un volumen de 710 litros, y con todos los asientos traseros plegados es de 1860 litros (exactamente lo mismo que en el Zafira Tourer).
Hay disponibles dos nuevos sistemas multimedia, IntelliLink R4.0 y Navi 950 IntelliLink, que se manejan a través de una nueva pantalla de siete pulgadas que está situada a menor altura. La pantalla es táctil y tiene menos botones que antes. Opel dice que es «más grande» que antes y que «se ha realizado siguiendo los niveles de calidad de las tabletas de gama alta», aunque la pantalla del sistema IntelliLink del Zafira Tourer 2012 también es de siete pulgadas. Entre el equipamiento disponible no hay la posibilidad de tener, ni como opción, un sistema de apertura del portón trasero mediante un gesto con el pie.
El sistema multimedia de menor coste es el IntelliLink R4.0, con compatibilidad a Apple CarPlay (imagen) y Android Auto pero sin sistema de navegación y, desde octubre de 2017, el más costoso es el IntelliLink Navi 4.0, que tiene navegador (imagen) pero y compatibilidad con los sistemas antes citados. También está disponible el sistema OnStar de asistencia personal (desde diciembre de 2015 es de serie en todos los Zafira Tourer. Se activa pulsando una tecla y pone a los pasajeros en contacto con un centro de atención 24 horas que puede facilitar información sobre destinos, programar rutas en el navegador o dar asistencia en caso de avería o accidente), y un servicio de conexión wifi para siete dispositivos móviles.
En el Zafira 2017 puede haber los mismos asistentes a la conducción y dispositivos de seguridad ya presentes en el modelo previo: el programador de velocidad activo, el sistema de iluminación adaptativa (con los faros de ledes), el asistente de reconocimiento de señales, la alerta por cambio involuntario de carril y la alerta de colisión frontal. Sigue estando disponible un dispositivo para transportar bicicletas denominado FlexFix, que se oculta en el paragolpes trasero.