La sensación de espacio atrás es grande porque el techo y los asientos traseros están más alejados que en otros coches de este tamaño. Aunque la altura en las plazas traseras es normal, el techo se abomba por el centro, por lo que da una mayor sensación de espacio.
En espacio para las piernas también está por encima de la media, aunque lejos de los mejores (que son el Honda Civic y el Fiat Stilo). Los pasajeros de las plazas traseras pueden meter los pies por debajo de los asientos delanteros hasta cierto punto, porque hay algo por debajo que impide meterlos del todo. Aún así, esto contribuye a que puedan ir con las piernas poco encogidas.
Como suele ser normal en Opel, la anchura interior es más bien escasa. Delante no causa problemas, detrás lo hace muy inadecuado para llevar a tres pasajeros. Además, el asiento central trasero es tan incómodo como suele ser normal en coches modernos de este tipo, pensados para que dos vayan más cómodos.
Otra característica de Opel es que hace las puertas con una forma que facilita mucho el acceso, porque el vértice superior trasero está muy retrasado. Eso sí, al abrir la puerta hay que apartarse un poco para esquivar ese borde. También por la forma de la puerta y de los cristales, la ventanilla trasera baja casi del todo.
Una buena (e inusual) cualidad de estos asientos traseros del Astra es que tienen unos reposacabezas apropiados para personas altas; normalmente se quedan demasiado abajo para sujetar bien la cabeza. Resulta extraño que esta versión no tenga un reposabrazos central trasero. En cambio, los reposabrazos laterales son amplios.
Lo pasajeros de las plazas traseras se pueden vaciar los bolsillos en las bolsas rígidas de las puertas; también pueden guardar cosas en las bolsas tras los asientos delanteros y en un pequeño hueco que hay detrás del freno de mano.
Tienen dos luces independientes, una para cada lado. No lucen mucho y, si alguien piensa en leer de noche, lo más probable es que tenga que encender las dos.
El maletero es menos fácil de cargar que en otros coches de este tipo porque el borde de carga está más bien alto, y también porque la boca del maletero está a unos 20 cm del borde del paragolpes trasero. La forma que tiene no plantea problemas para aprovechar el espacio, que es el normal en un coche de este tamaño.
El maletero está normalmente equipado. Tiene una cinta de goma que puede valer para sujetar objetos pequeños o enganchar bolsas. También hay un espacio muy bueno para meter la caja de los triángulos, siempre que no sea excesivamente gruesa.
Al menos en la versión que hemos probado (Enjoy), no hay huecos con tapa para dejar objetos pequeños ni argollas para un pulpo. Debajo del suelo del maletero hay una rueda de repuesto de emergencia, con espacio para meter la rueda normal; por 50 € Opel coloca una rueda de repuesto de tamaño normal.