El Mercedes-Benz SLS AMG Roadster es la versión descapotable del SLS AMG. Está disponible desde primeros de junio de 2011, a partir de 226.000 € (precio, equipamiento y ficha técnica), aunque las primeras entregas no se realizarán hasta otoño. Es 11.000 € más costoso que el modelo de carrocería cerrada.
Es más costoso que un Audi R8 Spyder de 525 CV y un Porsche 911 Turbo S Cabriolet de 530 CV, pero claramente más asequible que un Aston Martin DBS de 517 CV (listado).
El SLS AMG Roadster tiene una capota de lona que obliga a prescindir de la principal característica de la versión cupé, las puertas de apertura vertical (imagen). En el SLS AMG Roadster, las puertas se abren como en la mayoría de turismos (imagen).
El mecanismo de colocación y recogida del techo de lona es automático y se puede accionar en parado o en movimiento, siempre que la velocidad sea inferior a 50 km/h. Tarda 11 segundos en completar la operación. La estructura de la capota es de acero, aluminio y magnesio. Estos dos últimos materiales se utilizan por tener un peso inferior al acero.
La parte textil del techo del SLS AMG Roadster está formada por tres capas aislantes, la exterior hidrófuga. Se podrá elegir entre tres tonos diferentes: negro, rojo (imagen) o beige (imagen). La luneta es de cristal. El volumen del maletero, tanto con el techo plegado como desplegado, es de 173 litros. Es casi idéntica a la del SLS AMG Coupé (176 litros).
El motor es el mismo que lleva el SLS AMG de carrocería cupé, un V8 atmosférico de 6.208 cm³, e inyección directa que da 571 CV a 6.800 rpm (más información técnica). Va acoplado a una caja de cambios automática «AMG SPEEDSHIFT DCT» de siete velocidades. Tiene una función («RACE START») que permite salir desde parado con la máxima aceleración.
El SLS AMG Roadster tiene tracción trasera y un diferencial autoblocante. Acelera de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 317 km/h. Son unas cifras idénticas a las de la versión cupé. Ambos consumen lo mismo: 13,2 l/100 km..
El SLS AMG Roadster acelera más que otros descapotables de similares características como un Jaguar XKR de 510 CV, un Audi R8 Spyder de 525 CV o un Aston Martin DBS de 517 CV. Un Porsche 911 Turbo S Cabriolet de 530 CV acelera desde parado hasta 100 km/h más rápido pero tiene una velocidad punta inferior (listado). El SLS AMG Roadster gasta más que el 911 Turbo S y el XKR, pero menos que el R8 Spyder, el DBS o un Bentley Continental GTC (listado).
Como es habitual en las versiones descapotables derivadas de un modelo con carrocería cerrada, la estructura está reforzada. Es de aluminio y pesa 243 kg, sólo uno más que la del cupé. El SLS AMG Roadster pesa 1.735 kg, es decir, 40 kg más que la versión de carrocería cerrada. El peso se reparte en una proporción 43/57 entre el eje delantero y el trasero.
Opcionalmente puede llevar una suspensión adaptativa («AMG RIDE CONTROL») con tres modos de funcionamiento: «Comfort», «Sport» y «Sport plus». El control de estabilidad tiene tres programas: «ESPON», «ESPSport» y «ESPOFF».
Hay un dispositivo, denominado «AMG Performance Media», que da información sobre diferentes parámetros como la aceleración lateral y lineal, el tiempo empleado en una aceleración de 0 a 100 km/h, los tiempos por vuelta en circuito o la temperatura del aceite del motor o el líquido refrigerante, entre otros.
El SLS AMG Roadster lleva llantas de aleación de medidas 265/35 ZR 19 en el eje delantero y 295/30 ZR 20 en el trasero. Son de igual tamaño que las de la versión de carrocería cupé. Opcionalmente puede llevar unos discos de freno cerámicos, que según Mercedes-Benz son un 40% más ligeros que los de serie. Es posible elegir unas pinzas de freno pintadas en color rojo.
El equipamiento de serie incluye ocho airbags, asientos de diseño deportivo y con calefacción tapizados de cuero, el mando «COMANDAPS» para manejar varias funciones del coche, como el navegador, el equipo de sonido o el DVD, climatizador de dos zonas o acceso y arranque sin llave, entre otros elementos (ficha de equipamiento).
Como los otros descapotables de Mercedes-Benz, el SLS AMG Roadster puede llevar el sistema «AIRSCARF», que envía aire caliente a la cabeza y el cuello de los ocupantes mediante unas salidas de ventilación que hay en los reposacabezas (imagen). Es posible adquirir elementos de seguridad como el sistema de detección de objetos en el ángulo muerto («Blind Spot Assist»). En algunos mercados se puede optar por una conexión a internet de alta velocidad.
Precio del seguro
Contratar un seguro a todo riesgo para un SLS AMG Roadster tiene un coste alto. Por ejemplo, para un empresario casado de 50 años con carné desde los 18 y seis sin siniestros, que utilice el coche de forma ocasional, recorra hasta 10.000 km anuales, aparque en un garaje individual y resida en Barcelona, nuestro comparador de seguros da dos posibilidades, ambas con Mapfre: 6903 € —con vehículo de sustitución— y 6785 € . Se diferencian por la relación entre calidad y precio, mayor (6,60) en el caso del de menor precio.