El Citroën ë-C4 es el Citroën C4 eléctrico. Hay dos versiones, una de 136 CV con batería de 50 kWh (brutos) y, desde junio de 2023, otra con 156 CV y batería de 54 kWh (brutos también).
Están en venta por 35 205 y 38 905 euros respectivamente (fichas de precios y equipamiento). Algunos de sus rivales son el MG ZS, el Hyundai Kona Eléctrico, el Kia e-Niro, el Mazda MX-30 y el Volkswagen ID.3. También lo es el Peugeot e-2008, vehículo con el que comparte plataforma y sistema propulsor (Citroën y Peugeot pertenecen al mismo grupo empresarial, Stellantis). De todos ellos, el Citroën es el que tiene un precio de partida más bajo tal y como se puede comprobar en este listado.
No obstante, si tenemos en cuenta que por apenas 1000 euros más de lo que cuesta la versión de 156 CV es posible adquirir un Tesla Model 3 de 283 CV —un coche que supera en casi todo (por no decir en todo) al Citroën—, ser el más barato dentro de su segmento apenas tiene valor.
Nosotros hemos probado la versión de 136 CV y hemos observado que en conducción normal su autonomía es de unos 280 km, una cifra que se aleja notablemente de los 354 km de la homologación en el ciclo WLTP (más información en Autonomía real y recarga). La versión de 156 CV, gracias a que tiene una batería de mayor capacidad y una gestión más eficiente de la energía, tiene una autonomía homologada de 414 km. No sabemos en cuántos se quedarán en la práctica porque no hemos tenido oportunidad de probarla.
Con independencia del motor, el Citroën ë-C4 es un modelo que se adapta muy bien al perfil de cliente que solo busca en un coche «algo» con lo que desplazarse. Un simple dispositivo de movilidad que funcione bien, sea sencillo de manejar y cómodo. Nada más. Como se mueve con un motor eléctrico, las vibraciones y el ruido son inapreciables. Además, no hay caja de cambios, la dirección se mueve con poquísimo esfuerzo, el habitáculo está bien aislado acústicamente y la suspensión es confortable. Más información en Impresiones de conducción.
Su carrocería mide lo mismo que la del resto de C4 —4,36 metros de longitud, 1,80 m de anchura y 1,52 m de altura—. También son idénticos el espacio para los pasajeros y el maletero (380 litros). Ambos están en un término medio entre sus alternativas. Las impresiones del interior que escribimos para el C4 son perfectamente válidas para el ë-C4.
El motor eléctrico de 136 caballos es de imanes permanentes. Está colocado por delante del habitáculo y mueve el eje delantero de ruedas. Hay un interruptor en la consola central con el que se regula su funcionamiento en base a tres programas de conducción: Eco, Normal y Sport. Con cada uno de ellos no solo cambia el mapa de respuesta al acelerador, sino también la potencia máxima: 82 CV en Eco, 109 CV en Normal y 136 CV en Sport. En cualquier caso, si el acelerador se pisa a fondo, el motor moverá el coche con toda la fuerza que tenga. De acuerdo con Citroën, el ë-C4 acelera de 0 a 100 km/h en 9,7 s (9,4 según nuestras mediciones) y alcanza una velocidad máxima de 150 km/h.
La batería del ë-C4 de 136 caballos tiene 50 kWh de capacidad bruta, de los cuales 46 son aprovechables. Según Citroën, el tiempo de recarga del 0 al 80 % en una toma de corriente continua de 100 kW es de 30 minutos. En una doméstica, con corriente alterna a 230 V y 16 A, son necesarias 15 horas para pasar del 0 al 100 %. Nosotros, en una estación CC de 350 kW, hemos necesitado 28 minutos en cargar del 5 al 80 % y 33 minutos adicionales para llegar al 100 % (Autonomía real y recarga).
El motor del ë-C4 de 156caballos es diferente (Peugeot se refiere a él como «síncrono híbrido»). En este caso, la batería tiene una capacidad bruta de 54 kWh y una composición química distinta. Su cátodo está compuesto por un 80 % de níquel, 10 % de manganeso y 20 % de cobalto (en lugar de un 60% de níquel, 20% de manganeso y 20% de cobalto de la batería de 50 kWh). Según Citroën este cambio se traduce en una «mejor densidad energética y una mayor duración de la batería». El motor de esta versión de
De serie, el ë-C4 viene con un cargador integrado monofásico de 7,4 kW (7,5 horas para una carga completa), aunque opcionalmente se puede pedir uno trifásico de 11 kW (5 horas para una carga completa). El estado de la carga, así como su programación, se puede gestionar desde un dispositivo móvil (teléfono o tableta) mediante la aplicación My Citroën. La garantía de la batería es de 8 años o 160 000 kilómetros «para un 70 % de su capacidad de carga original».
Como cualquier otro C4, el ë-C4 viene de serie con unos amortiguadores con topes hidráulicos. Estos amortiguadores funcionan como uno convencional cuando el movimiento vertical de la rueda es pequeño. En cambio, cuando este es grande, un émbolo que hay en el interior se desplaza hacia los extremos y choca contra unos muelles que frenan el movimiento de manera progresiva. La suspensión, en general, proporciona un alto confort de marcha, en ocasiones tan bueno como para dar la impresión de ir casi flotando. En otras reacciona como una suspensión convencional de calidad normal (impresiones de conducción).
Hay cuatro niveles de equipamiento: Live (disponible desde mayo de 2023) Feel, Feel Pack y Shine (este nivel de equipamiento queda reservado para el motor de 156 caballos; anteriormente se podía elegir con el de 136). En todos ellos son de serie elementos como el climatizador de dos zonas, el freno de estacionamiento eléctrico, los retrovisores exteriores con ajuste eléctrico y llantas de 18 pulgadas (con un diseño exclusivo, diferente al del C4). En Feel Pack entran además cosas como la cámara trasera de ayuda al aparcamiento, el sistema de navegación GPS, el sistema de información proyectada en el parabrisas (head-up display) y los retrovisores con plegado eléctrico. En Shine se incluyen también la alerta de vehículos en el ángulo muerto y el sistema de reconocimiento de señales.
Otros sistemas de seguridad y ayuda a la conducción disponibles son la alerta por cambio involuntario de carril, el programador de velocidad activo con función de arranque y parada automáticos en atascos, el cambio automático de luces y el sistema de aparcamiento semi automático (tanto en paralelo como en batería). En esta ficha comparativa se pueden ver cuáles de ellos son de serie y en opción según el nivel de equipamiento.
El Citroën ë-C4 tiene muchas posibilidades de personalización, tanto para el exterior como para el interior. Hay siete colores distintos para la carrocería que se pueden combinar con otros cinco paquetes decorativos para las molduras que rodean los faros antiniebla y los «Airbump». En el habitáculo hay seis ambientes que combinan distintos colores en algunas piezas del salpicadero, las puertas y los asientos.
Asegurar a todo riesgo sin franquicia el ë-C4 más asequible cuesta más que el C4 con motor de combustión más caro (C4 BlueHDi 130 S&S EAT8 Shine). En concreto, la póliza del ë-C4 es de 651 euros al año, mientras que la del C4 es de 481, en ambos casos con Qualitas Auto, la compañía que mejor precio ofrece para estos dos modelos según el comparador de seguros de km77.com. Los datos que hemos introducido para el cálculo han sido: mujer soltera de 37 años, con residencia en Madrid, una plaza de aparcamiento individual y que recorre 15 000 km al año.