De acuerdo con nuestras mediciones, el habitáculo del Crossland X es más amplio que el del Opel Mokka X, si bien las diferencias no son abultadas. Al compararlo con aquellos monovolúmenes que tienen un tamaño parecido sale peor parado, sobre todo en lo referente a espacio para las piernas de los ocupantes en las plazas posteriores (mediciones frente a monovolúmenes). Los 68 centímetros medidos en esta cota son muchos menos de los que tiene un Nissan Note (hasta 79 cm) o un Ford B-MAX (72 cm).
La anchura entre puertas tampoco es grande, lo que dificulta que tres adultos puedan viajar cómodamente en las plazas traseras (aunque es algo que pasa en mayor o menor medida con todos sus rivales) aunque sí cabe un adulto entre dos sillas infantiles si estas no se sujetan con los ISOFIX (al hacerlo con los cinturones se pueden aproximar más a las puertas). La cota más favorable es la altura libre al techo, suficiente para que las personas de gran estatura (de unos dos metros) no tengan problemas en acomodarse, tanto delante como detrás, sin que sus cabezas rocen.
Las puertas son altas pero no anchas, de forma que no dejan un hueco muy generoso al abrirlas. En la parte delantera no supone ningún inconveniente (más bien, una ventaja al abrirlas en aparcamientos estrechos), pero en la parte trasera puede ser una molestía para colocar a un bebé en su sillita, además de que para salir hay que doblar el cuerpo para esquivar el pilar trasero (en este caso, el marco de la ventanilla que va en él; imagen).
El Crossland sobresale por la capacidad del maletero. Tiene 410 litros, 54 más que el Mokka y uno de los más grandes tanto entre los monovolúmenes de tamaño similar (listado de monovolúmenes de menos de 150 CV que miden de 4,1 a 4,3 m ordenado por capacidad de los maleteros) —donde únicamente le superan el Hyundai ix20, el KIA Venga (ambos con 440 l) y el Fiat 500L (412 l)— como los modelos con carrocería de todoterreno (listado de todoterrenos de entre 4,1 y 4,3 metros de longitud de menos de 140 CV, ordenados por volumen de maletero).
El piso del maletero se puede colocar en dos alturas distintas. Al hacerlo en la superior se crea un doble fondo de unos 12 centímetros de altura y al abatir los respaldos de los asientos traseros no se crea un escalón. Si se coloca en la posición inferior, la altura hasta la bandeja aumenta y se obtiene un volumen de carga más grande.
Opcionalmente, Opel ofrece una banqueta posterior con ajuste longitudinal a través de un carril con 15 cm de recorrido (disponible desde de agosto de 2017, dentro del «pack versatilidad»). Esto permite jugar con el espacio disponible para los pasajeros y el equipaje (al aumentar uno, disminuye el otro). Colocándolos en la posición más adelantada, el volumen del maletero es de 520 litros (110 más que con los asientos en la posición de mayor espacio para las piernas). También forma parte de la lista de opciones unos respaldos divididos en tres partes, en proporción 40:20:40.
El habitáculo está bien surtido de huecos para dejar aquellos objetos que normalmente se llevan en los bolsillos, como unas llaves, una cartera o un teléfono móvil. Los hay en cada una de las cuatro puertas (pero son de tamaño pequeño porque apenas cabe una botella de agua de un tercio de litro; imagen), entre los dos asientos delanteros (imagen) y por delante de la palanca de cambios. Este último, además, tiene un fondo de goma y puede tener un sistema de carga por inducción (imagen). La guantera tiene un tamaño normal (imagen; suficiente para guardar la documentación del vehículo y algún objeto pequeño más), está iluminada y tiene una salida de ventilación.
El aspecto del salpicadero es muy similar al del Mokka X e incluso al del Astra. El sistema multimedia tiene una pantalla de 7 u 8 pulgadas (en función del nivel de equipamiento) situada en la parte superior de la consola, en una posición en la que no es necesario apartar mucho tiempo la vista de la carretera para consultar la información. La superficie de la pantalla más grande (imagen) es mate y transmite sensación de buena calidad (no hemos probado la más pequeña).
El sistema es compatible con Android Auto de Google y CarPlay de Apple, pero además puede tener conexión inalámbrica a intenet mediante una red wifi y el sistema OnStar, que permite conectar con un centro de asistencia para realizar consultas rutinarias o de emergencia. Opcionalmente también puede tener un sistema de información proyectada en una lámina de plástico (Head-up Display) que proporciona datos de la velocidad a la que circula el vehículo, el funcionamiento de los asistentes a la conducción y las indicaciones del sistema de navegación.
Los materiales con los que está cubierto todo el habitáculo también son muy similares a los del Mokka X. No tienen un aspecto muy lujoso, pero parecen bien ajustados entre sí. Únicamente la parte superior del salpicadero está fabricada con plástico blando; el resto es duro, aunque de buena apariencia. La postura al volante está bien conseguida porque se parece a la que se tiene en un turismo, con el volante poco tendido y los pedales bien situados (por ejemplo, en un Peugeot 2008, los pedales están en un plano demasiado horizontal y resultan incómodos de pisar). Los cinturones de seguridad no tienen regulación en altura, por lo que hay que adaptar la altura del asiento para ajustarlos al cuerpo.