El ESFLOW es un prototipo de Nissan. Tiene aspecto de cupé, dos plazas, tracción trasera y su alimentación es exclusivamente eléctrica.
Dos motores eléctricos idénticos situados en una posición central, por delante del eje trasero, son los encargados de dar la potencia de manera independiente a las dos ruedas traseras.
Nissan afirma que el ESFLOW puede alcanzar 100 km/h en menos de 5 segundos.
La energía para los motores la proporciona una batería de iones de litio, similar a la que Nissan emplea en el LEAF pero colocada de otro modo: los paquetes de celdas están situados a lo largo de los ejes delantero y trasero del vehículo (en el LEAF están situadas debajo del piso).
La autonomía anunciada es de 240 km, 80 km más que el LEAF. Los faros (del ESFLOW) esconden los terminales de carga de las baterías que se encuentran en las tomas de aire situadas debajo.
El chasis es de aluminio. Una estructura en forma de jaula en la zona posterior de los asientos soporta el peso del coche en caso de vuelco. Esto ha permitido eliminar el montante delantero. De esta manera el conductor tiene mejor visibilidad.
Los faros y el logotipo de Nissan están tintados en azul oscuro. Las llantas, de seis brazos, tienen inserciones de carbono en color azul y este mismo material adorna las estriberas laterales, el alerón del techo y los bajos de los parachoques. Hay unas cámaras que reemplazan a los retrovisores exteriores.
Los asientos fabricados en acero están fijados a la estructura de seguridad trasera. Este sistema aligera el peso pero no permite la regulación del asiento. Nissan ha diseñado un volante y unos pedales que se mueven eléctricamente solucionando así este inconveniente.
El ESFLOW es el tercer prototipo diseñado por Nissan para ser exclusivamente un vehículo eléctrico, los anteriores son el Denki Cube y el LEAF.