Mazda renueva ligeramente el aspecto del Mazda2, tanto en el exterior como en el interior. El motor Diesel 1.4 CRTD cumple con la normativa Euro 4 y algunas versiones pueden llevar control de estabilidad.
Los cambios exteriores afectan a los faros (antinieblas incluidos) y pilotos, que son redondos tras una cubierta de plástico transparente (imagen comparativa), al montante de la puerta trasera, que está pintado de negro (imagen), y a las llantas, de nuevo diseño la de 15" y una de 16" que no existía antes. También hay tres colores nuevos (hacen un total de once): azul, gris y verde. Las barras del techo se han eliminado (ahora mide 1.530 mm de alto, 15 mm menos).
En el interior cambian las tapicerías, tanto los materiales como los colores. El volante incluye mandos para controlar el equipo de sonido y la radio tiene (desde la primavera pasada) la pantalla en la parte superior de la consola.
El control de estabilidad está disponible como opción únicamente con las versiones «Sportive». Otros elementos que puede llevar son los airbags de cabeza (tipo cortina), la llave plegable o un equipo de sonido con reproductor de discos nuevo.
La gama de motores no cambia: hay tres de gasolina y un Diesel. Los de gasolina son un 1,2 l de 75 CV, un 1,4 l de 80 y un 1,6 de 101 CV. El Diesel 1,4 l de 68 CV y 160 Nm ha recibido algunas modificaciones para cumplir la normativa europea de emisiones Euro 4. El consumo medio ha aumentado dos décimas, de 4,5 a 4,7 l/100 km; las prestaciones son las mismas.
Lo que cambia son los inyectores, que tienen los orificios más pequeños para pulverizar el combustible mejor y el sistema EGR de recirculación de gases; el catalizador también es nuevo.