El Range Rover 3.0 Td6 sobresale por su nivel de acabado y equipamiento, por su comodidad en carretera, por sus aptitudes en conducción todo terreno y, sobre todo, por su elevado precio. Creo que es un producto de excelente calidad pero, por lo que cuesta, hay otros todo terreno que merece la pena considerar.
Con 4,95 m de longitud, 2,01 m de ancho y 1,86 m de alto es uno de los todo terreno más grandes que se venden en España, sólo superado por el Chevrolet Tahoe (5,05 m) y el Nissan Patrol GR 5p (5,01 m). Su habitabilidad es superior a prácticamente todos sus competidores, sobre todo en anchura, espacio para las piernas y capacidad del maletero (535 litros).
La tercera generación del Range Rover se ha desarrollado mientras Land Rover era propiedad de BMW. Por eso tiene muchos elementos mecánicos y componentes de origen BMW, entre ellos el motor turbodiésel y el cambio automático Steptronic. Desarrolla 177 CV y tiene un peso muy elevado, que repercute negativamente en sus prestaciones y consumo. No es un coche que destaque por su capacidad de aceleración, pero está al mismo nivel de otros todo terreno de parecida potencia y menor peso, lo cual prueba que su motor tiene un buen funcionamiento.
Su consumo medio es elevado en términos absolutos: incluso en conducción suave hemos medido en torno a 13 litros/100 km. Además del peso, también debe vencer una elevada resistencia aerodinámica.
La suspensión neumática que lleva de serie permite variar la altura de la carrocería. Esto aporta importantes ventajas en estabilidad y confort de marcha en carretera, y en su capacidad para sortear zonas trialeras en un uso todo terreno. Es un coche estable, pero no demasiado ágil cuando hay muchas curvas. Con la suspensión en su posición más baja se nota claramente una mayor estabilidad.
Fuera del asfalto es mejor todo terreno de lo que haría pensar su tamaño y peso. La elevada altura a la que se puede situar la carrocería permite transitar sin dificultad por zonas en las que otros 4X4 tocarían con el suelo permanentemente o, simplemente, no pasarían.
Tiene una transmisión y una suspensión que permiten moverse por zonas trialeras con eficacia. Se puede mover con facilidad por lugares agrestes sin exigir una gran experiencia o pericia del conductor.
Se ofrece con tres tipos de equipamiento (SE, HSE y Vogue), todos ellos con un excelente nivel de acabado y buena calidad en sus materiales. Como creo que el equipamiento de serie del SE es completo y en las versiones HSE y Vogue hay muchos elementos que probablemente no utilicemos, lo mejor puede ser comprar la versión SE y ponerle las opciones que más nos interesen.
A mí me parecen especialmente recomendables los faros bi-xenón (aunque las luces halógenas que lleva son potentes y ofrecen una buena iluminación) y también el control de distancias de aparcamiento (dado el tamaño de la carrocería). El resto entra dentro de los gustos y necesidades de cada conductor (tabla comparativa de equipamiento). Sólo merecen la pena las versiones HSE y Vogue si queremos todo el equipamiento que llevan (sumándole todas las opciones a la versión SE sería un poco más caro).
Para alguien que quiera un todo terreno de lujo y requiera las máximas cualidades fuera del asfalto o en zonas trialeras, probablemente el Range Rover sea una de las opciones más acertadas.