Honda tendrá a la venta en enero —por 21.800 €— una versión del Civic con propulsión híbrida llamada «IMA».
Es un coche con motor de gasolina que lleva también un dispositivo eléctrico con dos funciones: ayudar al motor de gasolina en caso de fuerte aceleración y recuperar energía en frenada y retención. No es un coche eléctrico, ya que nunca funciona propulsado por la batería.
No cabe esperar que el Civic IMA sea más rentable que un Diesel de potencia semejante. Un Honda Civic 5p CDTI SE cuesta unos 1.200 € menos que un Civic IMA. Aunque el consumo del Civic IMA es algo menor que el del CDTI (4,9 l/100 km contra 5,0), el costo por kilómetro es mayor por la diferencia de precio del combustible. Además, las prestaciones del Civic Diesel son mejores que las del IMA.
Según se puede ver en nuestra base de datos, el Civic IMA es más caro que cualquier coche de cuatro puertas de 4,4 a 4,5 m, con motor entre 80 y 100 CV (sea gasolina o Diesel). También es el que menos gasta de ese grupo, en litros cada 100 km.
Ahora bien, el Civic IMA tiene una serie de cualidades que lo hacen especialmente satisfactorio de conducir, sobre todo en ciudad. Una de las más importantes es que, cuando el coche se para, automáticamente el motor también se para. En ciudad, y en condiciones donde es frecuente parar y arrancar, resulta muy agradable y beneficioso para el entonrno, porque el coche deja de hacer ruido y contaminar.
Si la rentabilidad no es una prioridad y se valora el silencio en ciudad y tráfico denso, el IMA es preferible a las versiones normales con motor Diesel o gasolina.
El motor de gasolina que lleva el IMA es semejante al del Honda Jazz 1.4. Colocado en serie con este motor de gasolina, tiene un motor eléctrico de corriente continua. La caja de cambios es manual de cinco velocidades (en otros mercados hay opcionalmente una automática de variador).
La idea de Honda es utilizar un motor más pequeño de lo normal en un coche de este tipo, que resulta suficiente para casi todas las condiciones de circulación. Cuando hace falta la aceleración que no puede dar este motor en este coche, entonces el motor eléctrico añade su fuerza al de gasolina, con la energía que obtiene de una batería.
La potencia máxima que puede alcanzar, sumados el motor eléctrico y el térmico, es 90 CV. Alcanza 178 km/h y acelera hasta 100 km/h en 12,8 segundos.
La batería se recarga de dos maneras: una, en retención o frenada el motor eléctrico actúa como generador. Dos, el motor térmico recarga las baterías cuando su nivel de carga baja de un cierto límite, durante la marcha normal.
Por tanto, la reducción de consumo que aporta este coche con relación a otros de prestaciones similares se debe a tres causas: una, tiene un motor más pequeño; dos, recupera algo de energía en aceleración y frenada; tres, no consumo mientras el coche esté parado.
La carrocería del IMA es la del Civic de cuatro puertas, que no se vende en España con ningún otro motor.
El motor eléctrico está colocado a continuación del motor y ocupa muy poco sitio. El sistema eléctrico que incluye las baterías está tras el respaldo trasero. Esto reduce el volumen del maletero a 341 l, menos de lo que tiene cualquier otro coche de cuatro puertas con este tamaño.
Honda vendía anteriormente en otros mercados un coche un coche híbrido llamado Insight, sobre el que el Civic aporta notables ventajas de rendimiento y funcionalidad, especialmente porque la parte eléctrica y mecánica del Civic están mejor integradas.