Este SUV de 4,32 metros de longitud es una puesta al día del ZS que MG puso a la venta en 2021, no un modelo completamente nuevo. Hay cambios en el diseño de la carrocería y del habitáculo, pero los más importantes se dan en el sistema de impulsión del MG ZS, donde ahora hay versiones de gasolina —106 y 111 CV—, además de eléctricas —156 y 177 CV— (más información sobre los MG ZS eléctricos).
Con el motor de gasolina de 106 caballos el precio empieza en 17 890 euros (precio, ficha y equipamiento de toda la gama MG ZS). Es uno de los SUV de su tamaño más baratos a la venta en España (listado, ordenado por precio, de SUV entre 4,1 y 4,4 metros de longitud), junto con el SangYong Tivoli de 135 caballos y el Dacia Duster Eco-G de 101. El precio es un punto atractivo de este coche, pero no el único.
El MG ZS es un poco más que un medio de transporte lo más básico posible para ir de un sitio a otro. Esa afirmación sí valdría para un Mahinda KUV100. Lo que ha conseguido MG es ofrecer un producto que, siendo sencillo y por ello barato, cumple bien y que puede dejar buena sensación. Tiene un aspecto moderno y no presenta materiales bastos, o por lo menos no resultan evidentes. Es amplio para cuatro ocupantes y tiene un maletero grande, de 448 litros (más información en el apartado Impresiones del interior). El equipamiento es abundante, si bien faltan algunas cosas.
El nivel de equipamiento básico, denominado Comfort, tiene todo lo necesario incluídos unos faros que alumbran sorprendentemente bien, Apple CarPlay, Android Auto o conexión Bluetooth para el teléfono. El nivel superior, Luxury, incluye florituras para un vehículo de 19 190 euros, como la instrumentación de pantalla (imagen), cámaras de visión periférica (imagen), asientos con calefacción (y el del conductor con regulaciones eléctricas, imagen) la advertencia de vehículos en el ángulo muerto (imagen) o la tapicería «estilo cuero» (imagen). Estos elementos son prescindibles si lo que se busca es un precio bajo, pero lo cierto es que son muy útiles (salvo la tapicería de imitación a cuero), facilitan la conducción y la hacen más cómoda.
De todos los elementos opcionales mencionados anteriormente me quedo con la visión periférica. La imagen que ofrece no es de buena calidad, pero sí es de gran ayuda en la ciudad (por ejemplo para dejar el coche bien centrado entre las líneas de un aparcamiento) e incluso vale para ver por dónde están pisando las ruedas en una utilización campestre (imagen). Aunque no es un SUV pensado para circular fuera de la carretera (ya que no tiene tracción total), dispone de control de descenso de pendientes.
Aunque puede tener muchas cosas para su precio, también es cierto que hay otras que se han quedado en el olvido. Por ejemplo, las lunas no están nada tintadas (algo que tiene la inmensa mayoría de coches del mercado y que da un plus de privacidad y protección), el volante solo tiene regulación en altura, no hay luz en los espejos de cortesía ni en la guantera, así como tampoco termómetro exterior.
El MG con el motor de 106 caballos me parece el más recomendable porque tiene un precio muy interesante. Aunque parezca contradictorio, también pienso que esta versión puede defraudar (al menos al principio) porque este motor tiene una respuesta pobre al acelerador si no se lleva engranada la marcha adecuada (más información en el apartado Impresiones de conducción). En la actualidad, la mejor relación entre precio y prestaciones la ofrece el Ssanyong Tivoli de 163 caballos.
El otro motor de gasolina disponible para el ZS, de 111 caballos, probablemente tenga mayor contundencia en cualquier circunstancia (al ser turboalimentado) que el de 106. Si ambos costasen lo mismo (o casi), el de 111 sería una elección mejor. La realidad es que el de 111 caballos parte de una cantidad considerablemente mayor: 20 990 euros. Esto se debe a que va asociado, obligatoriamente, al nivel de equipamiento más completo o bien al cambio automático.