El Lexus LS es un turismo de lujo que está a la venta en dos versiones diferentes: el LS 460 que tiene un motor V8 de gasolina y 381 CV de potencia máxima; y el LS 600h, de propulsión híbrida (con motor de gasolina y eléctrico).
Como ocurría en anteriores generaciones de Lexus LS (ésta es la cuarta), se trata de un modelo que, en conjunto, está al mismo nivel que las mejores berlinas de lujo y, en ciertos aspectos, por encima. La principal diferencia de esta generación con relación a las anteriores es que sus cualidades dinámicas están más próximas a las de los mejores.
El Lexus LS siempre ha sido cómodo en el sentido más amplio del término —que engloba facetas como la suspensión, el ruido o la climatización— y, por esa razón, muy recomendable para quien ocupe las plazas traseras. Esta generación, además, tiene una agilidad y una respuesta al acelerador que lo pueden hacer muy satisfactorio también para quien lo vaya a conducir y aprecie esas características.
En España hay cinco niveles de equipamiento, con la posibilidad de variar algunos de los elementos que llevan cada uno de ellos (todos los precios y equipamientos). El más asequible cuesta 91.600 €; por el más caro hay que pagar 116.245 €.
No hay otro coche de más de cinco metros de longitud y potencia similar que cueste menos que este Lexus (tabla comparativa). Un BMW 750i cuesta 104.600 €; un Mercedes-Benz S 500, 107.600 €. Lo más próximo es un Audi A8 4.2 FSI quattro tiptronic (92.150 €).
El Lexus no sólo es más asequible que el resto sino que, además, su equipamiento de serie es más abundante. Si lo igualamos, la diferencia de precio frente a los coches mencionados anteriormente se incrementa (tabla comparativa a igualdad de equipamiento).
Las dos versiones más costosas (Ambassador y President) tienen algunos elementos de equipamiento enfocados al confort y entretenimiento de los pasajeros (más información en las impresiones del interior). Por ello, decidir la versión que es más interesante en cada caso, además de basarse en gustos o el desembolso que supone, debería hacerse en función de si el coche es comprado para conducirlo o para viajar en sus plazas traseras.
Un bajo nivel de ruido, el aislamiento que consigue la suspensión neumática y el confort que proporcionan sus asientos, hacen del Lexus LS un coche muy recomendable para viajar, principalmente por vías rápidas.
En ciudad, a pesar de su gran tamaño, no resulta muy aparatoso de manejar gracias a que gira en poco espacio (tiene el mismo radio de giro que un Opel Astra de 5 puertas), a que los retrovisores exteriores proporcionan una buena visibilidad y al sistema de ayuda al aparcamiento trasero con cámara y sensores de proximidad; el dispositivo que aparca el coche de forma automática es vistoso, pero no útil (comentario sobre este dispositivo).
Este Lexus es un coche con un nivel de seguridad activa elevado, en parte por el excelente funcionamiento del control de estabilidad VDIM (más información). Creo que, de los sistemas que he probado, es uno de los que mejor actúa ante un subviraje.
Tiene airbags frontales, laterales y de rodilla delanteros, y de cortina para las plazas exteriores; los airbags laterales traseros sólo están en las dos versiones más costosas (imagen con todos los airbags).
Esta generación del LS es la primera que puede tener dos versiones de carrocería: normal o alargada. En España, la alargada no estará disponible con el 460, sólo con el 600h.
La versión normal mide 5.029 mm de largo y la versión alargada, 5.151. Esos 122 mm de diferencia que hay en longitud también los hay en la distancia entre ejes (2.969 y 3.091 mm, respectivamente). La anchura y la altura son las mismas en los dos casos: 1.875 y 1.476 mm (otras diferencias entre las dos carrocerías).
Con estas dimensiones, el Lexus LS es uno de los coches de este tipo de menor tamaño, tanto en la variante normal como en la alargada. Además, lo normal es que la diferencia entre la versión normal y la alargada sea mayor: así es en todos los turismos de dos carrocerías mayores de 5 m, salvo en el Volkswagen Phaeton.