La impresión que me ha dado el Jaguar es que, en calidad aparente, las diferencias con las berlinas alemanas de este tipo ni son muchas ni son grandes.
Tiene de serie tapicería de cuero, con muchos más paños de los necesarios para cubrir los asientos y las puertas. Por ejemplo, los asideros superiores y las bolsas rígidas en las puertas también están forrados de cuero.
Donde no hay cuero, hay un plástico laminado de tacto blando y aspecto mate. Donde no es laminado, el plástico es sólido y de buen tacto; por ejemplo, está muy bien hecha la pieza que envuelve la columna de la dirección y sirve de soporte a las palancas de luces e intermitentes. Como es normal, el plástico de peor aspecto visible desde dentro está en las piezas que recubren los soportes de los asientos. Todo lo que parece madera es madera y muchos elementos cromados son de plástico.
No he visto ningún fallo de ajuste ni he apreciado ruidos en ninguna de las cinco unidades distintas que he conducido. Aunque no he hecho un examen minucioso de todo el coche, creo que el ajuste en general es bueno, salvo detalles de poca importancia.
El espacio es el normal en coches de este tamaño. Atrás sobresale un poco por anchura, y tiene un espacio para las piernas y una altura regulares. He tomado todas las mediciones con los pedales en la posición más avanzada posible (en el sentido de la marcha).
Como equipo de serie en toda la gama, los dos pedales tienen un recorrido longitudinal algo mayor de 6 cm. Si se retrasan los pedales, se reduce proporcionalmente el espacio en las plazas traseras (comentario sobre la utilidad de los pedales móviles).
El puesto de conducción me parece bueno en general. Los asientos sujetan bien el cuerpo aunque tienen tapicería de cuero, las posibilidades de ajuste hacen posible encontrar una buena posición y todos los mandos están a mano.
No sé si porque no ha podido o porque no ha querido, pero lo cierto es que Jaguar no ha hecho con los mandos del XJ lo mismo que BMW con los del Serie 7, Volkswagen con los del Phaeton y Audi con los del A8. Por tanto, el XJ es un coche fácil de manejar sin emplear mucho tiempo en aprender a hacerlo (comentario sobre esto).
La ventilación tiene sus mandos aparte y es fácil de utilizar. Para otras funciones, como el equipo de sonido, el navegador o el teléfono, hay una pantalla táctil. Se llama «táctil» porque en la misma pantalla aparecen los «botones» que hay que pulsar. Precisamente por eso, no se puede manejar al tacto (como si fueran realmente botones), hay que mirar la pantalla y elegir estos botones.
Tiene la estructura de menús sucesivos que también aparece en los mandos únicos, como el «i-Drive» de BMW o el «MMi» de Audi. Me ha resultado sencillo hacer cosas como cambiar el disco en un cargador de varios CD o ajustar el tono. No he intentado hacer cosas más complicadas.
Muchas órdenes se pueden dar con la voz, por ejemplo indicar una dirección al navegador, seleccionar una emisora de radio o hacer una llamada telefónica. No he probado este sistema.
Entre el equipamiento que no puede tener hay cosas como automatismos para abrir la tapa del maletero, para acabar de cerrar las puertas que queden mal cerradas, o para que se desbloqueen las cerraduras cuando el conductor se acerca. El XJ sigue con las cerraduras que se pueden encontrar en una Ford Transit. Como todos los coches que llevan esa cerradura, se pueden cerrar (no abrir) con cualquier llave de cualquier Ford o Jaguar (no pasa en otras marcas del grupo, como Mazda o Volvo).
Entre el equipamiento de serie en toda la gama hay elementos como el freno de estacionamiento automático (muy cómodo); automatismo para la conexión de luces y limpiaparabrisas; automatismo para el oscurecimiento del retrovisor; desbloqueo eléctrico de la guantera; sistema de ayuda al aparcamiento trasero (el delantero es opcional); y programador de velocidad normal, el adaptativo es opcional y tiene función de aviso (más información).
Hay cuatro tipos de decoración interior (clásico, deportivo, «R» monocolor y «R» bicolor). Si sumamos las combinaciones de tapicería y acabado del salpicadero de estas cuatro decoraciones, veinte variantes. Aún hay más variantes si tenemos en cuenta que en algunos casos se puede escoger entre varios colores para las costuras del cuero (cinco distintos).
El elemento de equipamiento que más echaría de menos en un coche así, con relación a lo que tiene la competencia, es un asiento como el que pueden llevar el A8, el Serie 7, el Clase S y el Phaeton. Ese asiento tiene una ventilación interior muy eficaz y más posibilidades de ajuste, entre ellas una articulación en la mitad del respaldo, que es muy útil.