He conducido el 4.2 V8 y el R, ambos con la suspensión variable «CATS» (de serie en el R y opcional en el V8 atmosférico, por 3.060 €).
El V8 en versión de 4,2 me ha parecido un motor muy bueno desde todo punto de vista (salvo en consumo, que no lo he medido); ya lo era la anterior versión de 4 litros de cilindrada. Es un motor con mucha fuerza en cualquier régimen y una respuesta rápida al acelerador. Me parece superior al motor 4.2 del Audi A6 y casi al nivel de Mercedes E 500.
El motor sobrealimentado del R da más fuerza a cualquier régimen. La aceleración es tan grande como cabe esperar de un coche con 396 CV, pero no da la misma impresión de fuerza que el BMW M5, quizá por causa del cambio automático. Este motor tiene un sonido muy peculiar, que proviene en gran medida del compresor.
Los dos motores tienen necesariamente la caja de cambios ZF de seis velocidades que es la mejor que yo he llevado desde el punto de vista de la suavidad y la rapidez, sin contar los de variador. La variante que lleva el S-Type de esta caja es distinta de la que tiene el BMW Serie 7 (que fue el coche que la estrenó).
En lugar de mandos secuenciales, tiene la característica palanca en «J», que es un mando analógico de bloqueo (clasificación de las cajas de cambio). Jaguar ha hecho un sondeo entre sus clientes para que juzguen el mando secuencial de selección de BMW, el mando secuencial de bloqueo de Mercedes, y este mando en «J», y no ha advertido una clara preferencia por ninguno de ellos.
Este mando sirve para limitar el número de marchas que pueden entrar (de dos a cinco), pero no para seleccionar una marcha en concreto. El control electrónico del cambio es tan bueno, que esta función no hace mucha falta. En otros casos es útil, por ejemplo, para impedir que engrane marchas muy largas en ciudad, pero en este no hace falta. Un pequeño defecto de este mando es que, en la parte manual, el pomo de la palanca impide ver en qué posición está («se ve mejor en los coches de volante a la derecha», dice Phil Hodgkinson, ingeniero jefe del programa Jaguar S-Type).
Las dos versiones con motor V8 me han parecido muy seguras. Tienen control de estabilidad de serie, una gran precisión en la trayectoria y son muy poco sensibles al estado del suelo en fuertes apoyos. Los dos tiene como característica muy favorable que, si la carrocería se mueve por causa del estado del suelo, prácticamente no hay rebotes que puedan descolocar al coche.
Para conseguirlo, Jaguar no recurre a unos amortiguadores muy duros. Son capaces de absorber pequeños baches mejor que un M5.