El habitáculo del BYD Seal U es equiparable al de muchos de sus rivales por calidad de materiales y ajustes —sea un Škoda Enyaq o un Ford Mustang Mach-E por ejemplo—. Hay muchas partes de tacto blando (incluso en las plazas posteriores, que suele ser un lugar menos cuidado), las piezas encajan bien unas con otras, los botones tienen un accionamiento preciso y agradable y la sensación a bordo es la contraria a ir en un coche barato.
La pantalla de la instrumentación (de 12,3 pulgadas) es, quizá, uno de los puntos débiles del interior por la calidad de sus gráficos y por la resolución del panel. Admite cierto grado de personalización de la información y tiene varios diseños para mostrar la misma (imagen), pero no resulta especialmente intuitiva. La pantalla del sistema multimedia está mejor resuelta desde el punto de vista estético, de opciones de configuración y de resolución, aunque tiene fallos importantes de traducción y convendría dar un repaso a la organización de los menús para facilitar la navegación por ellos (imagen).
Son tantos los que tiene que, al menos inicialmente, cuesta tener controladas las funciones de uso más habitual. Con el paso del tiempo y una vez estudiadas todas sus posibilidades, la situación mejora notablemente, pero no resulta un sistema tan intuitivo como el que utilizan Tesla, Volkswagen o Leapmotor en sus modelos.
El sistema multimedia no requiere de cables para hacer funcionar Android Auto y Apple CarPlay. Estas aplicaciones se abren a pantalla completa, pero siempre con la pantalla colocada en posición horizontal (en vertical no es posible visualizar ni Android ni Apple). Lo que no nos ha gustado es que si estamos utilizando cualquiera de estas dos aplicaciones desaparece el menú del climatizador, por lo que si queremos hacer algún ajuste que no sea de los más básicos (para modificar la velocidad del ventilador o la temperatura solo se ha de tocar la pantalla con tres dedos y deslizarlos hacia la izquierda/derecha o hacia arriba/abajo), tendremos que salir de Android Auto o Apple CarPlay para acceder al menú completo.
No obstante, es cierto que siempre se pueden hacer la mayoría de los ajustes a través del sistema de órdenes vocales, que se activa diciendo «Hi BYD» (hay que pronunciarlo en inglés, esto es, hay que decir: hai bi guay di) y que funciona bastante bien (sin llegar a ser tan bueno como los de BMW o Mercedes-Benz).
Los asientos delanteros son muy confortables, están tapizados en piel artificial y tienen de serie ajustes eléctricos, calefacción y ventilación. Lo que no nos ha gustado de ellos es la ausencia de regulación en altura del reposacabezas, algo que echarán de menos aquellas personas que sean más altas que la media. En las puertas y la consola central hay un buen número de huecos para dejar objetos y, en el caso del nivel de equipamiento Design, existen dos superficies para cargar por inducción teléfonos móviles (de 15 W cada uno; imagen).
La amplitud es sobresaliente. En la fila posterior de asientos hemos medido 82 centímetros de espacio para las piernas, un dato muy bueno que solo supera el Leapmotor C10 (83 cm). Otras alternativas como el Škoda Enyaq, el Volkswagen ID.4 o el Tesla Model Y se ven claramente superados en este aspecto. La anchura entre puertas también es muy buena (139 cm) y la altura hasta el techo es correcta (una persona de 1,85 metros va cómoda si se repantiga un poco). Tabla comparativa de mediciones del interior.
Los respaldos de esta fila tienen regulación en inclinación (algo de lo que carece, por ejemplo, un Škoda Enyaq), si bien las banquetas no se pueden deslizar en sentido longitudinal (tampoco el de sus alternativas). El suelo es plano, pero quien se siente en la plaza central irá menos cómodo que sus compañeros de los lados porque el asiento en esa parte es más duro y estrecho. Los pasajeros de la fila posterior cuentan con un reposabrazos abatible en el centro y una consola central en la que hay dos salidas de aire y dos puertos USB de tipo C (imagen).
El maletero tiene un volumen de 425 litros, un dato más bien pobre en relación a sus competidores (listado comparativo ordenador por volumen de maletero). Eso sí, la zona de carga tiene unas formas que facilitan el aprovechamiento del espacio disponible y tiene un piso móvil que se puede colocar en dos alturas (con muy poca diferencia entre ambas; imagen). Si se coloca en la superior forma una superficie continua con los respaldos posteriores cuando estos se abaten. El portón tiene accionamiento eléctrico de serie.
Delante no hay maletero, aunque bien podría haber uno porque hay un vasto vacío bajo el capó que podría sido aprovechado para colocar una bandeja de plástico que permitiera guardar los cables de recarga, por ejemplo.