SsangYong ha actualizado por segunda vez el Korando, un todoterreno de 4,41 m de longitud. Este modelo fue lanzado en 2011 (más información del Korando 2011) y recibió cambios en 2014 (más información del Korando 2014). Puesto que, en definitiva, sigue siendo el mismo coche, las impresiones de interior y de conducción que publicamos en su día siguen siendo útiles para quien esté interesado, hasta que probemos con más detenimiento una unidad actual.
Los cambios afectan al exterior, al habitáculo y mínimamente al equipamiento disponible. Son nuevos ambos paragolpes, el capó, los faros, los antinieblas, las aletas delanteras y las llantas de aleación, que pueden ser de 16, 17 o 18 pulgadas en función del nivel de equipamiento.
El salpicadero y los paneles de las puertas reciben nuevos materiales que ajustan mejor, aunque siguen siendo sencillos. También cambian el volante, la instrumentación (imagen), los mandos del sistema multimedia y los pomos para los selectores de marchas tanto automático como manual. SsangYong dice que ha mejorado el aislamiento acústico y de rodadura, aunque no nos ha facilitado información técnica al respecto.
Está a la venta con un único motor Diesel de 2,2 litros de cilindrada y 178 caballos de potencia, con tracción delantera o total, cambio manual o automático y tres niveles de equipamiento (Line, Premium y Limited; listado con todas las versiones y precios). El más asequible, el Korando D22T 4x2 Line, está a la venta desde 19 150 euros. No existe ningún todoterreno de este tamaño y potencia más barato. Le sigue el Fiat 500X Cross 2.0 Multijet de 140 CV 4x4, que aparece en este listado comparativo de todoterrenos con características similares, y que es es mucho más caro, más pequeño y menos potente. Un Ford Kuga con la misma potencia (179 CV) y cambio automático, cuesta 30 990 euros, que son 2740 euros más que la versión más equipada del Korando (ficha comparativa).
El Korando 2017 puede ser una buena alternativa para quien necesite un todoterreno y no pueda o quiera desembolsar los, habitualmente, más de 25 000 euros que suelen costar. A cambio obtendrá un vehículo de aspecto sencillo, bien equipado y con un nivel de refinamiento normal, a costa de renunciar a algunos elementos de seguridad que sí están disponibles en sus competidores (como el servofreno de emergencia con detección de obstáculos o el avisador de cambio de carril involuntario, que sí pueden tener otros modelos de SsangYong, como el Tivoli o el XLV).
El motor Diesel tiene un funcionamiento algo tosco en marcha, más por el ruido que produce que por las vibraciones, que apenas llegan al interior. En todo caso, no me resultó molesto. En autovía y en carreteras poco sinuosas, mueve con suficiente soltura la carrocería del Korando, aunque adolece de poca fuerza al arrancar desde ralentí y en ocasiones hay que tener cuidado de no calar el motor, sobre todo en pendientes.
En la misma presentación, conduje un Tivoli con motor Diesel 1.6 de 115 caballos, que me pareció mucho más refinado, silencioso e, incluso, igual de veloz. El tacto de la dirección es algo blando y esto obliga a ser cuidadoso en las curvas para no bambolear a los pasajeros haciendo ligeras correcciones. En marcha, la sensación de seguridad es buena y el nivel de confort, normal. Los asientos son firmes, confortables y sujetan bien el cuerpo, y el puesto de conducción está bien resuelto para viajar sentado con una postura parecida a la que se adopta en un turismo.
El habitáculo es amplio para cuatro ocupantes. El Korando aventaja a muchos de sus rivales por espacio para las piernas de los pasajeros de atrás (tabla comparativa de mediciones de interior), tiene buena anchura a nivel de hombros y suficiente altura para que personas altas quepan sin tocar con el techo.
El respaldo de la segunda fila se puede inclinar en varias posiciones en un margen de 17,5º. El maletero es grande para las dimensiones de su carrocería: tiene una capacidad de 486 litros, prácticamente igual que un SEAT Ateca (485 l) o un Hyundai Tucson (488 l), más que un Audi Q3 (460 l), que un Ford Kuga (456 l) y menos que un KIA Sportage (503 l) o un Peugeot 3008 (520 l).
La tracción total que puede tener se conecta automáticamente mediante un embrague de tipo Haldex, con una función de bloqueo de diferencial central que transmite el 50 % de la potencia a cada eje hasta a 40 km/h. Los ángulos característicos son normales: 22,6º de ataque, 28,3º de salida y 18,5º ventral. La altura libre al suelo no es mucha en comparación con la que pueden tener otros modelos, 180 mm, suficiente sólo para avanzar con seguridad por caminos forestales y pistas que no estén muy deterioradas.
En el equipamiento de serie de la versión básica (Line), SsangYong incluye el programador de velocidad, la luna delantera térmica, el equipo de sonido con entradas USB y auxiliares o las llantas de aleación de 16 pulgadas. A partir del nivel intermedio (Premium) tiene navegador, cámara de marcha atrás, climatizador automático, llantas de 17 pulgadas, volante y pomo de cuero o asientos delanteros calefactables. Con el nivel superior (Limited) está incluída la tapicería de cuero, el techo solar, las llantas de 18 pulgadas, los sensores de aparcamiento delantero y trasero, los asientos traseros calefactables o el arranque y apertura sin llave. El sistema multimedia se maneja a través de una pantalla de siete pulgadas y la cartografía de la navegación es del especialista Sygic.
Según el comparador de seguros de coches de km77, asegurar a todo riesgo sin franquicia un Korando D22T con tracción total, cambio automático y nivel de equipamiento Limited para una conductora de 40 años, residente en Madrid, que aparca el coche en garaje comunitario, hace menos de 25 000 kilómetros al año y se desplaza con él rutinariamente, puede tener un coste mínimo de 557 euros si se hace con Mutua Madrileña, aunque es una póliza de baja calidad (5,21 sobre 10 puntos posibles). Por 574 euros, Pelayo ofrece una póliza mucho mejor (6,96 sobre 10) con una relación entre calidad y precio buena (7,2 sobre 10).