El Peugeot 3008 es un modelo de tracción delantera con una carrocería de aspecto todoterreno que mide 4,45 metros de longitud. La gama está compuesta por dos versiones con motor de gasolina (de 131 CV y de 165 CV) y tres con uno Diesel (120, 150 y 181 CV).
El precio de venta parte de 25 550 euros (precio, equipamiento y ficha técnica de todas las versiones), que corresponde a la versión de gasolina de 131 CV. Es más costoso que un un Hyundai Tucson, un KIA Sportage o un Renault Kadjar con motores de gasolina de potencia similar. Estas tres alternativas cuestan menos de 22 500 € con un equipamiento de serie inferior al del Peugeot (ficha comparativa de precio y equipamiento). El Ford Kuga 1.5 EcoBoost 120 CV también es más barato; el SEAT Ateca 1.4 EcoTSI 150 es el más costoso, rápido y equipado de todos los modelos citados (ficha comparativa).
Una alternativa interesante al 3008 es el Opel Grandland X. Es el mismo coche con otra apariencia, ya que han sido desarrollados sobre la misma plataforma. Su interior es más tradicional: el cuadro de instrumentos es de agujas y aunque también tiene una pantalla en el salpicadero desde la que se maneja casi todo, Opel no ha prescindido de botones en la consola para manejar el climatizador. A igualdad de motor, el Opel tiene un precio de partida considerablemente menor debido a su también menor cantidad de equipamiento; si se iguala en lo posible, el Grandland X sigue siendo un poco más asequible (ficha comparativa).
Un aspecto destacable del 3008 es su silencio de marcha, ya sea con motores Diesel o de gasolina. Los 3008 que más hemos conducido son los de gasolina de 131 CV y los Diesel de 120 CV y 181 CV, todos con el equipamiento GT Line. Los motores de 120 y 131 CV nos han parecido suficiente para un uso normal del vehículo. Quien quiera sentir un empuje intenso al pisar el acelerador o ejecutar los adelantamientos en poco espacio, puede recurrir a los motores más potentes, como es el caso del Diesel de 181 CV. El consumo de carburante es bajo (a velocidades legales por autopista, es sencillo que el consumo sea inferior a 6,0 litros de media). Hay rivales que gastan aún menos, aunque la diferencia con ellos no es grande.
Dinámicamente, también es satisfactorio. Es ágil (para sus dimensiones y planteamiento), reacciona de forma segura en circunstancias adversas y tiene una dirección rápida que guía con precisión al resto del coche. Este buen equilibrio entre agilidad y seguridad lo consigue con una suspensión que es firme pero een absoulto incómoda. La dirección, que es rápida, ayuda a tener esa percepción de que al coche le cuesta poco cambiar de trayectoria. En el apartado Impresiones de conducción damos más datos al respecto de sus cualidades dinámicas, consumo y prestaciones.
El puesto de conducción puede no gustarle a todo el mundo. El volante no se puede alejar mucho del salpicadero —lo que obliga a llevar las piernas más flexionadas de la cuenta para alcanzar bien los pedales— y, como en otros Peugeot modernos, la instrumentación se ve por encima del aro del volante. Para conseguirlo, Peugeot utiliza un volante pequeño, que no puede ir colocado alto respecto al tronco del conductor y que está achatado tanto por su parte superior como inferior.
En las plazas traseras el espacio para las piernas es, sin ser escaso, ligeramente inferior al de gran parte de sus alternativas, mientras que la anchura entre puertas y la altura libre hasta el techo es grande (tabla comparativa de mediciones del interior). El acceso y salida de su interior resulta confortable por la altura a la que están los asientos y porque no están muy alejados del borde de la carrocería. El maletero es amplio, tiene un volumen de 520 litros, que es lo mismo que tiene un Tiguan y más que el resto de alternativas.
El equipamiento opcional puede ser muy abundante. Prácticamente puede llevar todo lo que hoy en día está disponible en sus alternativas de precio similar. Hay cosas que son muy útiles y otras que no lo son tanto por no estar bien resueltas. Por ejemplo, nos ha parecido bueno el sistema de iluminación de ledes (tanto por su potencia como por el buen funcionamiento de la conexión y desconexión automática de las largas, que hace bien su función: a tiempo para no deslumbrar a otros usuarios y sin confundirse con el reflejo de los paneles viales). Entre aquello que no siempre cumple bien su función, está la cámara de marcha atrás o el conjunto de cámaras que generan una visión cenital del vehículo (Peugeot denominada a esta opción «Visio Park»). No dan una imagen de buena calidad (ejemplo) y por ello no son útiles para apurar al máximo el espacio durante las maniobras. Hay otras cosas como la función de masaje en las plazas delanteras o la iluminación led en el marco del techo panorámico que habrá gente que valore y otra a la que le parezca prescindible. En el apartado Equipamiento damos más detalles sobre lo que puede llevar este coche.
El Peugeot 3008 no es un coche de lujo, pero la calidad de acabado es correcta y en general deja buena impresión. El interior está recubierto con materiales de mejor aspecto que los de un Nissan Qashqai o un Renault Kadjar. Los botones con aspecto metálico que hay en la consola (imagen) en realidad son de plástico, pero transmiten solidez y calidad cuando se manejan.
Todos los motores del Peugeot 3008 tienen un sistema de encendido y apagado automático del motor en las detenciones (Start&Stop). Desde octubre de 2018, las versiones automáticas tienen un cambio de marcha distinto. Desde esa fecha, Peugeot usa una de ocho relaciones en vez de la de seis (EAT6), también de convertidor de par. En este listado se pueden ver todas las versiones automáticas de la gama 3008 que se comercializan.
El 3008 no puede tener tracción en las cuatro ruedas, pero sí puede llevar un dispositivo denominado «Advanced Grip Control» que modifica la gestión del control de tracción para poder avanzar con más facilidad sobre superficies deslizantes y unos neumáticos del tipo M+S (que dan más adherencia sobre superficies poco adherentes pero que nos sirven para suplir legalmente unos de invierno). La altura libre hasta el suelo del Peugeot 3008 es 22 centímetros, que es mucho si se compara con el que tienen sus alternativas (el Hyundai Tucson tiene 17,2 cm, el Nissan Qashqai y el Volkswagen Tiguan tienen 18 cm, mientras que en el Renault Kadjar tiene 19 cm).
Esta es la segunda generación del Peugeot 3008. Está fabricado sobre la plataforma modular EMP-2 —Efficient Modular Plattform 2— que ya se utiliza en otros modelos del Grupo Peugeot-Citroën, como el 308 y el C4 Picasso. Según Peugeot, el uso de esta plataforma ha permitido que el nuevo modelo sea una media de 100 kg más ligero que el modelo al que sustituye. El 3008 de primera generación se puso a la venta en 2009 (más información) y tenía una silueta distinta a la del modelo actual ya que estaba a medio camino entre un monovolumen y un todoterreno. En 2014 Peugeot hizo una serie de pequeños cambios en esta primera generación para actualizarla (más información).
En el comparador de seguros de km77.com hemos calculado el precio de una póliza a todo riesgo para un Peugeot 3008 con el motor Diesel de 120 CV. El tomador es un hombre casado de 39 años que vive en Madrid y guarda su coche en un garaje colectivo. Esta persona, que recorre hasta 30 000 kilómetros cada año, lleva 7 años sin dar una parte de accidente de coche a su actual compañía de seguros. Con estos datos, el precio más bajo lo ofrece la compañía nuez por 505 euros, si bien esta póliza no es de buena calidad (5,34 puntos); por 672 euros, Génesis tiene una póliza de mucha mayor calidad; 8,71 puntos. En este apartado hay más información de cómo valoramos la calidad de una póliza.