A finales de octubre estará a la venta el nuevo Corsa, un coche que mejora al actual en dos de sus principales puntos débiles: seguridad activa y espacio interior. Además, Opel ha intentado reforzar las principales cualidades del Corsa, que son las derivadas de sus motores: prestaciones y consumo.
Para ganar espacio ha aumentado de longitud al Corsa hasta el nivel de los más grandes de su clase; ahora es el de mayor batalla entre los coches pequeños. La renovación de la carrocería se ha hecho sin trastocar la imagen de este modelo. En el plano estético, el nuevo Corsa tiene más en común con su antecesor que con otros modelos de la gama, algo que no ocurre con otros Opel recientes. No obstante, a diferencia del actual Corsa, no hay mucha diferencia entre las carrocerías de tres y cinco puertas.
Hay datos que indican que la seguridad activa ha mejorado: uno es que el bastidor tiene una mayor rigidez, aunque la proporción de aumento no es muy grande; otro es que también tiene vías mayores, uno de los puntos de partida para obtener buena estabilidad. En nuestra primera toma de contacto con el nuevo Corsa, las distintas versiones nos han transmitido buenas sensaciones. El Corsa pisa bien sobre el asfalto y tiene unas reacciones equilibradas y predecibles siendo, como es lógico, las versiones más deportivas las que ofrecen una estabilidad más elevada (GSi y Sport). Opel ha corregido además los frenos, que ahora tienen unos discos delanteros ligeramente mayores y ABS con distribución electrónica de frenada (EBD) disponible en todos los modelos (de serie en las versiones Sport, Elegance y GSi).
Lo que no ha hecho, sin embargo, es reaccionar en la fase de desarrollo lo suficientemente rápido para dotarlo con control de estabilidad; el Corsa llega al mercado sin este importante elemento de seguridad. Según nos confirmaba el responsable Ejecutivo de la Línea Corsa, Klaus Nüchter, el control de estabilidad para el nuevo Corsa está en fase de desarrollo, aunque no estará disponible, al menos, hasta el año 2002.
El equipamiento de seguridad sí tiene airbags frontales y laterales (según las versiones). También recibe reposacabezas activos delante y tres reposacabezas regulables en las plazas traseras, al mismo tiempo que cinturones de seguridad de tres puntos en las cinco plazas, los delanteros con tensor de emergencia y limitador de esfuerzo. Es algo ya estándar en un coche moderno, aunque algunos de los competidores del Corsa aún no lo tienen. La novedad en seguridad pasiva llegará en otoño del 2001, con unos nuevos airbag de protección de cabeza, denominados por los responsables de Opel como "airbag de cortina", al desplegarse a lo largo de las ventanillas delanteras y traseras.
La gama de motores cambia notablemente. Todos los de gasolina pueden cumplir la norma Euro 4 de emisiones (en vigor a partir del 2005), los Diesel no. Aunque contaminan menos, Opel ha aumentado la potencia de los gasolina más pequeños: el tres cilindros de 1,0 litros pasa de 54 a 58 CV de potencia, el cuatro cilindros de 1,2 litros pasa de 65 a 75 CV. El actual motor de 1,4 litros y 90 CV sigue igual, salvo por las modificaciones necesarias para que cumpla la norma Euro 4. El Corsa GSi tendrá un motor de 1,8 litros, 16 válvulas y 125 CV de potencia.
Los dos Diesel son de inyección directa con cuatro válvulas por cilindro. Es el motor de 1,7 litros que también lleva el Astra, en dos versiones: una de 65 CV y otra de 75 CV. Una de las novedades del Corsa es que puede montar una nueva caja de cambios manual con mando secuencial y embrague pilotado que ofrece también la posibilidad de un uso automático. Opel la llama Easytronic y es la primera vez que emplea un sistema así. Sólo está disponible en el Corsa 1.2 16V de 75 CV.