Lancia deja de vender este modelo en España en septiembre de 2015. La información que sigue fue redactada cuando aún estaba en venta:
El Lancia Voyager es un monovolumen de gran tamaño y siete plazas que está disponible desde 38 630 € (todos los precios). Cuesta más que un SsangYong Rodius o un Ford Galaxy y parecido a un SEAT Alhambra. Un Renault Grand Espace, un Volkswagen Sharan o un Mercedes-Benz Clase R son más caros (listado).
Es prácticamente el mismo vehículo que el Chrysler Grand Voyager, marca que ya no se comercializa en España. Se diferencia principalmente por tener unos materiales mejores en el habitáculo.
Las siete plazas están distribuidas en tres filas de asientos: 2+2+3. Salvo en el asiento central de la tercera fila, hay espacio suficiente para adultos. Un posible problema que encontrarán los ocupantes de la tercera fila es que hay poco sitio para acomodar los pies (no se pueden meter bajo las plazas anteriores), y además, el respaldo está muy tendido hacia el maletero.
Los cinco asientos de las dos filas posteriores se pueden guardar bajo el piso para incrementar la capacidad de carga mediante un sistema que Lancia denomina «Stow'n Go». Cuando están en su posición normal, el espacio que queda bajo el piso se puede utilizar para guardar objetos.
Las puertas traseras se abren y cierran deslizándose sobre la carrocería. En las versiones más equipadas están movidas por motores eléctricos y se ponen en marcha mediante unos botones ubicados en el habitáculo o a través del mando a distancia. Las puertas tienen un sistema de detección de obstáculos que las abre automáticamente para evitar, por ejemplo, atrapar un brazo. El maletero es normal con siete plazas y muy grande con cinco o dos (más información en las impresiones del interior).
En España únicamente se puede adquirir con motor Diesel. Es de cuatro cilindros en línea, 2,8 litros de cilindrada y 178 CV de potencia. Reemplaza al anterior motor de 163 CV que tenía hasta abril de 2013. En otros mercados también hay una versión de gasolina —3.6 V6 VVT de 287 CV—.
El cambio es automático de seis velocidades, algo lento y suave en general, salvo cuando el coche está próximo a detenerse pues en ese caso transmite una pequeña vibración.
Las siguientes impresiones corresponden al motor de 163 CV: el motor es ruidoso, especialmente a bajas revoluciones, y no es suave de funcionamiento ya que vibra al ralentí y circulando a baja velocidad. Mueve bien el peso del Voyager, al menos sin carga. Es posible que le falte algo de fuerza si se viaja con todas las plazas ocupadas y el maletero cargado.
La carrocería del Voyager, como sucede en muchos monovolúmenes, puede tener movimientos amplios de balanceo y cabeceo cuando se circula en carreteras de curvas lentas y a ritmo rápido. En parte, estos movimientos se deben a que la suspensión es un poco blanda. En carreteras de pocas curvas es agradable de conducir, al menos a ritmo normal.
Gracias a la gran superficie acristalada en todo el contorno de la carrocería, la visibilidad es buena en todas direcciones. El habitáculo no está muy bien aislado de las fuentes de ruido externas. Así, por ejemplo, el ruido aerodinámico es claramente perceptible a partir de 100-120 km/h.
El Voyager Diesel de 178 CV consume 7,9 l/100 km. Es un gasto de carburante ligeramente inferior al de otros monovolúmenes de similar tamaño, como un SsangYong Rodius o un Mercedes-Benz Clase R, aunque este último con un motor mucho más potente (listado). Modelos más pequeños, como un Ford Galaxy, un SEAT Alhambra o un Volkswagen Sharan, gastan claramente menos (listado).
Diseño y mecánica
El exterior es prácticamente idéntico al de la última versión del Chrysler Grand Voyager que se vendió en España —dejó de estar disponible a mediados de 2011—.
Las principales variaciones afectan a la parrilla, los faros, los paragolpes y los faros antiniebla. El interior sí varía en mayor medida, especialmente el salpicadero, la consola y el volante.
Con respecto al Chrysler Voyager, tiene una suspensión ligeramente diferente. Estructuralmente es igual —de tipo McPherson en el eje delantero y de eje rígido en el trasero—, pero según Lancia ha sido revisada para adaptarla al cliente europeo. Las versiones más equipadas tienen una suspensión autonivelante (mantiene constante la altura de la carrocería independientemente de la carga).
Equipamiento
El Lancia Voyager está disponible con tres niveles de equipamiento, denominados «Silver», «Gold» y «Platinum» —entre junio de 2012 y abril de 2013 había uno más, denominado «Gold Plus»—.
Lleva de serie elementos como seis airbags, control de estabilidad, climatizador de tres zonas, reposacabezas delanteros activos, puertas traseras eléctricas, programador de velocidad, tapicería de piel, control de presión de neumáticos y llantas de aleación de 17 pulgadas, entre otros elementos (fichas de equipamiento).
En función del nivel de equipamiento puede tener de serie u opcionalmente un sistema de sonido («Uconnect Tunes») con radio CD MP3, conexiones USB y Aux-In, disco duro de 20 Gb, pantalla táctil, navegador, reproductor DVD, cámara trasera de ayuda al aparcamiento («ParkView») y un dispositivo manos libres Bluetooth.
También es posible optar opcionalmente por otros elementos como un sistema de detección de objetos en el ángulo muerto o un reproductor de DVD con dos pantallas, cascos sin cables y mando a distancia para los pasajeros de la segunda y tercera fila. Permite reproducir dos discos diferentes en cada pantalla. Únicamente hay cinco colores de carrocería disponibles, uno sin coste «Blanco Brillante» y cuatro con sobreprecio: «Negro Brillante», «Negro Carbón», «Azul Oscuro» y «Gris Plata».
Precio del seguro y otros detalles
Asegurar a todo riesgo un Voyager cuyo conductor habitual sea un hombre casado de 45 años con carné desde los 18 y seis sin siniestros, que resida en Sevilla, utilice el coche a diario, aparque en un garaje comunitario y realice hasta 30 000 km anuales tiene un coste mínimo de 732 € según nuestro comparador de seguros. Es una póliza de Direct Seguros con una calidad normal —5,40 sobre 10— y una buena relación calidad-precio —7,07 sobre 10—.
Una prima a todo riesgo con franquicia se puede obtener desde 314 € —franquicia de 600 €—, también con Direct Seguros. Rebajar la franquicia a 320 € supone pagar 47 € más al año (361 €). Una opción para rebajar el precio del seguro es optar por uno a terceros ampliado con lunas, incendio y robo. El más asequible es el de Click Seguros (267 €).
El Voyager ha sido desarrollado conjuntamente por dos equipos de ingenieros de Lancia y Chrysler. Se fabrica en la planta que Chrysler tiene en Windsor, Ontario (Canadá). Desde que llegó al mercado la primera generación, en 1984, se han comercializado 13 millones de unidades del Voyager y el Grand Voyager en 120 países —bajo la marca Chrysler hasta 2011; desde entonces, como Lancia en Europa menos Reino Unido y como Chrysler en el resto del mundo—.