Lamborghini reedita su modelo Countach —aparecido en 1974— con esta producción de 112 unidades que toma como base el Aventador. Tiene 814 CV, tracción total (el original tenía tracción trasera) y la denominación Countach LPI800-4 (800 del «redondeo» de la potencia y 4 por la tracción).
Sus prestaciones son las siguientes: velocidad máxima de 355 km/h, aceleración de 0 a 100 km/h en 2,8 s y de 0 a 200 km/h en 8,6 s. Un Ferrari 812 Competizione (829 CV) alcanza 340 km/h y acelera hasta 100 km/h en 2,9 s y hasta 200 km/h en 7,5 s. Un Lamborghini Aventador SVJ (770 CV) consigue 350 km/h y 2,8 s.
El motor de gasolina es de doce cilindros en V, 6,5 litros de cilindrada y 780 CV. No cuenta con la ayuda de un equipo de sobrealimentación, pero sí con un sistema de hibridación ligera compuesto por el motor eléctrico de 34 CV. El motor eléctrico —alojado en la carcasa del cambio— está alimentado por una red secundaria de 48 V y la energía, en vez de almacenarse en una batería, lo hace en un supercondensador (lo que supone una ventaja de peso al tener una mayor densidad energética). No es un coche eléctrico dado que el motor no se usa para mover sin ayuda del V12 el Countach LPI800-4.
Tanto la carrocería como el chasis están hechos de fibra de carbono. Una porción del techo es de cristal y su transparencia cambia pulsando un botón (es electrocrómico, como el del Mercedes-Benz SLK 2011).
Lamborghini usa nombres para sus modelos relacionados con el mundo de los toros. Countach es una de las excepciones. Según Lamborghini, es «una expresión de sorpresa y asombro en el dialecto piamontés y que se pronuncia Coon-tach».