El Jaguar F-PACE es el primer todoterreno de Jaguar. Es un modelo cuya orientación principal no es el confort, puesto que tiene una suspensión firme. El precio de venta parte de 46 660 € (precio de todas las versiones). Hay una versión deportiva denominada F-PACE SVR que tratamos por separado en este artículo.
Jaguar pretende ser con este modelo una alternativa a los todoterrenos de su tamaño más costosos, que son el Audi Q5, el BMW X3, el Lexus NX y el Mercedes-Benz GLC, pero principalmente a los más deportivos: el BMW X4 y el Porsche Macan. El F-Pace es, tras el Lexus NX, el que ofrece más espacio para las piernas de sus ocupantes, mientras que por anchura y altura disponible está en un término medio (mediciones del interior). La sensación que transmite el habitáculo es que es un coche de calidad aunque mirando con más detenimiento se encuentran detalles que Jaguar debería mejorar o subsanar. El maletero, que tiene 650 litros de capacidad, es el más grande, aunque su capacidad depende del tipo de rueda de repuesto que lleve. Hay más información sobre el habitáculo y el maletero en el apartado de Impresiones del interior.
El Macan es más preciso y eficaz en carretera lenta que el F-PACE; quizás en vías rápidas no hay una diferencia grande. Con el F-PACE se puede ir muy rápido pero cuesta más pasar exactamente por el lugar por el que se desea. Además, la electrónica del Macan pasa desapercibida casi siempre mientras que, en el modelo de Jaguar, su funcionamiento dificulta hacer una conducción fluida ya que, cuando actúa, lo hace frenando el coche de manera notable.
El F-PACE no es un todoterreno auténtico pero la altura libre al suelo (21 cm) y la tracción total facilitan el avance fuera del asfalto. Además se beneficia del conocimiento de Land Rover en este campo, ya que el All Surface Progress Control —un sistema que permite mantener una velocidad constante (entre 3,6 y 30 km/h; acelera y frena el coche en función de los obstáculos y la orografía)— es el equivalente del All-Terrain Progress Control de Land Rover.
Para facilitar la conducción fuera del asfalto o en lugares con obstáculos (como un garaje) la opción «Surround Camera System» resulta recomendable. Un conjunto de cuatro cámaras —colocadas en el parachoques frontal, el portón y en los retrovisores exteriores— proporcionan una vista cenital del coche y sus alrededores. No sirve para maniobrar al centímetro pero sí para evitar golpes por despiste o falta de visibilidad.
El motor Diesel de 180 CV ya es suficiente para hacer una conducción rápida, y se oye poco en el habitáculo. El Diesel de 300 CV da una aceleración grande y tiene un funcionamiento más refinado pero cuesta, a igualdad de equipamiento, alrededor de unos 11 000 € más. De la versión de gasolina de 380 CV lo más llamativo es el sonido. El motor, que es el mismo que tiene el F-Type, tiene un sonido espectacular al acelerar con intensidad. Quien quiera algo discreto, mejor que se olvide de él. Desde febrero de 2017, también se puede pedir con otros dos motores Diesel de 163 o 240 CV y con otro de gasolina de 250 CV.
Todos los F-PACE que hemos probado estaban asociados a un cambio automático y a un sistema de tracción total, elementos que son de serie en toda la gama excepto en el Diesel de 180 CV, que también se puede adquirir con tracción trasera.
El precio del F-PACE Diesel de 180 CV con cambio automático y tracción total es 52 060 €. Es más caro que un Audi Q5 y un BMW X3 equivalentes, aunque igualando en lo posible el equipamiento, la diferencia se reduce hasta casi igualarse (ficha comparativa de equipamiento). Esta versión consume una media (según los datos homologados) de 5,3 l/100 km, una décima más que el BMW X3 xDrive20d Automático (190 CV). El motor Diesel de menor potencia, que tiene tracción en las ruedas posteriores y cambio manual, consume 4,9 l/100 km, una cifra que mejoran algunas de sus alternativas (listado comparativo de todoterrenos que miden más de 4,65 metros de longitud y que tienen un motor Diesel de entre 150 y 170 CV, ordenado por consumo). Este motor, como el de 180 CV, requiere del aditivo AdBlue para el tratamiento de los óxidos de nitrógeno (NOx; imagen de la boca de llenado).
Hay cinco niveles de equipamiento, llamados Pure, Prestige, R-Sport, Portfolio y S. Temporalmente hubo un sexto —First Edition—, que correspondía a una edición limitada a 2000 unidades para todo el mundo (80 de ellas para España) de la que no quedan unidades a la venta. Las diferencias básicas entre los cuatro primeros se pueden ver en esta comparativa.
En el nivel First Edition la carrocería puede ir pintada en el mismo color azul (Caesium Blue) del prototipo C-X17 de 2013 —aunque también hay otros tres más: Halycon Gold, Rhodium Silver y Ultimate Black—, las llantas son de 22 pulgadas, los asientos están tapizados en cuero Windsor y tiene el sistema multimedia InControl Touch Pro con pantalla de 10,2 pulgadas. El F-PACE First Edition sólo estaba disponible con el motor Diesel de 300 CV (por 88 320 euros) y con el de gasolina de 380 CV (por 100 260 euros).
El F-PACE es el primer Jaguar que puede tener una cámara estereoscópica, junto al retrovisor central, con capacidad para detectar la presencia de peatones en el frontal, además de otros vehículos. Una centralita analiza las imágenes de la cámara y determina si hay riesgo de atropello y, en caso de que así sea, activa la frenada de emergencia para evitarlo. Por encima de 40 km/h, alerta al conductor acústica y visualmente en caso de riesgo antes de iniciar la frenada de emergencia.
Otra función de la cámara estereoscópica es detectar las líneas de limitación de carril con la misión de alertar de una posible salida involuntaria de la vía y proporcionar información para que el sistema de mantenimiento de carril haga las correcciones necesarias en la dirección y mantenga al vehículo entre las líneas. El F-PACE también tiene un sistema de reconocimiento de señales, un programador de velocidad activo, aviso de presencia de vehículo en el ángulo muerto de los retrovisores y una alerta por posible fatiga del conductor.
Un elemento novedoso del F-PACE es la pulsera llamada «Activity Key». Su aspecto es parecido al de las pulseras que miden la actividad física (imagen), pero su función es otra: abrir y cerrar el portón sin tener que llevar el mando del coche. Así, el propietario puede dejar el mando en la guantera (que queda inútil al activar la pulsera) y se puede ir a dar un baño o a hacer alguna actividad deportiva en la que llevar el mando encima pueda ser un inconveniente. Su funcionamiento es el siguiente: se deja el mando en el coche y se coloca la pulsera en la muñeca. Se acerca ésta a la “J” del logotipo de Jaguar en el portón; un destello de los intermitentes confirma su activación. A partir de ese momento, el mando no es operativo y al coche solo se puede acceder con la pulsera. Para desactivarla y que el mando recupere su funcionalidad, hay que repetir el proceso: acercar la pulsera a la “J” tras haber pulsado el botón del maletero.
Asegurar a todo riesgo (sin franquicia) el F-Pace tiene un coste elevado. Las ofertas que dan las aseguradoras en nuestro comparador de seguros no bajan de 1000 € en ningún caso, salvo en Mapfre, que permite asegurarlo por menos.
El Jaguar F-PACE se fabrica en Solihull, Reino Unido.