La toma de contacto ha sido por carreteras alemanas, con tráfico poco fluido en autopista y algo mejor en carreteras de doble sentido (aunque con travesías frecuentes, como suele ocurrir en Alemania).
Como ocurre con otros motores que pueden funcionar con mezcla pobre, el ahorro de consumo solo es sustancioso si se conduce más bien despacio y suavemente. En un recorrido de unos 18 kilómetros a una velocidad constante de 100 km/h (2.800 rpm en 5ª), sólo con el conductor, el ordenador ha marcado 4,9 l/100 km. En un recorrido similar, con dos personas, a una velocidad sostenida de 120 km/h (3.300 rpm en 5ª), el ordenador ha marcado 6,0.
El motor me ha parecido más potente que elástico. Responde bien por encima de 4.500, régimen en el que se produce un cambio apreciable en su sonido. Como no pesa mucho, la aceleración del A2 FSI es buena. Aunque da la potencia máxima a 5.800 rpm, llega a 6.200 con fuerza. El límite del motor está un poco más arriba de ese régimen, y es más parecido al de un Diesel que al de un gasolina: en lugar de un corte de inyección más o menos brusco, hay una bajada grande de potencia.
En recuperación, en cambio, me parece que no es tan bueno. A bajo y medio régimen, la respuesta del coche es uniforme pero no poderosa. Esto se debe, en parte, a que losdesarrollos de transmisión son un poco largos.
Audi ha endurecido la suspensión de todos los A2. Hacía mucho tiempo que no me montaba en uno y por eso no puedo comparar correctamente, pero me parece que la pérdida de confort es más evidente que el aumento de estabilidad, al menos en una conducción normal. El A2 anterior apenas se balanceaba y tenía un buen tacto de dirección. El nuevo también va muy bien, pero se notan claramente los baches, como ocurre en el Clase A.
Hay ciertas diferencias entre el FSI y el resto de la gama: el alerón trasero es más extenso, tiene unos aletines distintos, lleva frenos de disco en las ruedas traseras y un depósito de gasolina algo mayor (42 litros).
Al margen de las cualidades dinamicas, me parece bueno el puesto de conducción (el asiento es firme y sujeta bien), y menos bueno el aspecto de calidad que da el A2, dado su precio. Casi todo el salpicadero está hecho con un plástico duro, poco tratado y con algún borde un poco tosco; Audi reserva el plástico de mejor calidad para unas pocas zonas del salpicadero.