El motor de gasolina tiene cuatro cilindros, 1,4 litros de cilindrada, sobrealimentación mediante un turbocompresor e inyección directa. Su potencia máxima es 156 CV a 5000 rpm y su par máximo es 250 Nm entre 1600 y 3500 rpm. Para dar cabida al motor eléctrico, el motor de combustión está desplazado 57,5 milímetros a la izquierda (visto desde el frente).
El motor eléctrico es síncrono y de imán permanente. Su potencia máxima es 116 caballos (a 2500 rpm) y su par máximo es 330 Nm (al ralentí). Está ubicado dentro de la caja de cambios automática DSG de seis velocidades, formando un módulo único (este módulo se fabrica en la planta de componentes que Volkswagen tiene en Kassel-Baunatal, Alemania).
La potencia máxima del conjunto es 218 CV y el par máximo 400 Nm. El consumo medio según el ciclo de homologación NEDC es 1,6 l/100 km de gasolina y 12,2 kWh/100 km de energía eléctrica (el consumo del Golf GTE es, respectivamente, 1,5 l/100 km y 11,4 kWh). Estos datos no son comparables a los que obtienen los vehículos que sólo tienen motor de combustión, ya que el consumo se calcula de otra manera. Con el motor eléctrico el Passat GTE puede recorrer hasta 50 km y con la combinación de ambos la autonomía es de unos 1100 km.
El Mercedes-Benz C 350 e —el único turismo híbrido enchufable comparable con el Passat GTE por tamaño— tiene un sistema propulsor más potente (279 CV) y mejores prestaciones (es 1,5 segundos más rápido en acelerar de 0 a 100 km/h), pero su consumo homologado es superior (2,1 l/100 km) y tiene menos autonomía eléctrica (31 km). Ficha técnica comparativa.
La disposición de los componentes mecánicos es, a grandes rasgos, la siguiente: motor de combustión, embrague (en baño de aceite), motor eléctrico y caja de cambios (el motor eléctrico gira solidario al eje primario de la caja de cambios). De este modo, si el embrague está abierto, no hay conexión entre el motor de combustión y el eléctrico y es este último el encargado de mover el vehículo (el otro permanece apagado). Si el embrague está cerrado, ambos motores aportan trabajo, en la proporción que la unidad de control decida. También es posible que el embrague esté cerrado y que sólo trabaje el motor de combustión. En ese caso, el motor eléctrico tratará de oponer la mínima resistencia posible.
La batería es de iones de litio, está ubicada debajo de la fila trasera de asientos y el maletero y tiene una capacidad de 9,9 kWh (la capacidad útil es 8,7 kWh). Está compuesta por ocho módulos con 12 celdas electrolíticas en cada uno. La tensión nominal es 353 voltios. Tiene un sistema de refrigeración por líquido que trata, por un lado, de conseguir que la temperatura óptima de funcionamiento se alcance lo antes posible y, por otro, que ésta se mantenga constante. La garantía de la batería es de 8 años o 160 000 km (lo que primero se cumpla).
El principal medio para cargar la batería es mediante su conexión a una red eléctrica de 230 voltios a través de un enchufe convencional. El tiempo de carga varía en función de la potencia de la red: 4 horas y 15 minutos a 2,3 kW o 2 horas y 30 minutos a 3,6 kW. Esta última opción es la que Volkswagen ofrece mediante su sistema de carga mural «Wallbox», que puede ser instalado en un garaje.
La toma de carga está oculta detrás de una tapa en la parrilla (imagen) y no detrás del logotipo, como en el Golf GTE (imagen), porque en el Passat GTE el radar del programador de velocidad activo está detrás de él. Cuando se conecta el cable de carga se puede elegir entre comenzar la carga inmediatamente, o bien, programarla para que empiece más tarde (lo que puede ser beneficioso en caso de que se tenga contratada una tarifa eléctrica con discriminación horaria). La programación de la carga (y de otras acciones como activar el sistema de climatización a una determinada hora para que el habitáculo esté a una temperatura concreta) se debe hacer a través del sistema multimedia. También puede hacerse con un teléfono móvil inteligente utilizando una aplicación específica para ello, llamada Car-Net e-Remote, que es gratuita durante el primer año.
La batería también se carga durante las fases de deceleración. Volkswagen llama e-BKV al sistema de frenos del Passat GTE. Se trata de un sistema que, cuando debe dar una deceleración suave, utiliza la resistencia al giro del motor eléctrico que pasa a funcionar como un generador para cargar la batería. A partir de cierta demanda de deceleración, se suma la intervención del sistema hidráulico convencional, por lo que la carga de la batería no se interrumpe.