Hay cuatro niveles de equipamiento en la gama S-Cross. Éstos son, de menos a más equipado: «GL», «GLE», «GLX» y «GLX-EL». El más básico tiene de serie un radio-CD compatible con ficheros grabados en Mp3, toma USB y cuatro altavoces (imagen). El nivel de equipamiento «GLE» añade conexión Bluetooth para teléfonos móviles y dos altavoces de agudos.
Los dos niveles más completos, tienen navegador Garmin con pantalla táctil de 6,1 pulgadas, lector de discos compactos, toma USB, lector de tarjetas SD, conexión Bluetooth, siete altavoces (uno de ellos situado en la parte superior de la consola) y cámara de visión posterior (imagen).
Información y ajustes del sistema multimedia
Nuestra unidad de pruebas era un S-Cross con nivel de equipamiento más alto, «GLX-EL». Tenía una pantalla táctil de 6,1 pulgadas que reacciona con gran rapidez a las pulsaciones del usuario. El sistema es sencillo de utilizar, tiene unos iconos de gran tamaño y unos menús muy bien estructurados.
El mayor problema que observamos de este sistema es la ubicación de la pantalla. Está situada cerca del volante pero en una posición muy baja que obliga al conductor a desviar durante bastante tiempo la mirada de la carretera. Además, esta inclinada y hace que se visualicen reflejos, incluso con el techo cerrado y la cortinilla puesta (imagen) —excepto al conducir de noche o en días muy nublados—.
En este nivel de equipamiento, la cámara de visión trasera forma parte de la dotación de serie. Al insertar la marcha atrás, se visualiza en la pantalla táctil la imagen con unos gráficos de colores (no giran con el volante). Incluso en condiciones de luz adversas, la imagen de la cámara es nítida.
Navegación
El navegador Garmin tiene una cartografía de toda Europa desarrollada por Navteq. Los datos están almacenados en un disco duro. Las actualizaciones las puede realizar el usuario sin necesidad de acudir a un centro oficial de Suzuki. Desde esta Web es posible instalar un programa que permite dichas actualizaciones.
Estos se pueden visualizar en dos dimensiones o en perspectiva. El usuario puede elegir el nivel de detalle que desea, aunque en ningún caso se visualizan edificios en tres dimensiones. Destaca una función que muestra los carteles de información y los carriles por los que hay que circular de una manera muy real.
Las indicaciones son correctas y aunque el cálculo inicial de la ruta es un poco lento, no lo es cuando nos hemos saltado una indicación y el sistema realiza un nuevo cálculo de la ruta. También es destacable la rapidez con la que el usuario puede escribir un destino utilizando el teclado. No ocurre como en otros sistemas, por ejemplo el Media Nav del Renault Captur en el que el usuario tiene que esperar un espacio de tiempo entre pulsación y pulsación.
Además de buscar puntos de interés (por localización o teléfono), es posible escribir coordenadas geográficas, buscar una ciudad, un cruce o un lugar directamente en el mapa (pulsando sobre el mismo). Existe una función denominada «Servicios de salida» que funciona solo en las autovías o principales ciudades y que informa de las gasolineras, restaurantes, hoteles y puntos de información cercanos a las salidas (funciona con o sin un destino introducido en el navegador).
El mayor inconveniente es que no tiene un sistema de información del tráfico que funcione de manera gratuita. Para disponer de esta función hay que suscribirse a un servicio de alertas. Suzuki, en el momento de dar esta información, no nos ha aclarado ni el precio de la suscripción ni tampoco si este sistema funciona a través de las ondas de radio o si utiliza la conexión Bluetooth (y los datos del teléfono móvil) para obtener informes del tráfico en tiempo real.
Comunicación
La conexión Bluetooth para teléfonos móviles forma parte del equipamiento de serie en toda la gama excepto en el nivel básico «GL». Hemos utilizado tres teléfonos móviles con distinto sistema operativo y conexión Bluetooth. Son un iPhone 5 —con sistema operativo iOS7 y conexión Bluetooth 4.0—, un Samsung Galaxy S3 Mini (I8190) —con sistema operativo Android 4.1 Jelly Bean y conexión Bluetooth 4.0— y un HTC Desire S —con sistema operativo Android 2.3.5 y conexión Bluetooth 2.1—y, al menos con ellos, la sincronización de la lista de llamadas y de la agenda ha sido satisfactoria (previamente hay que dar permiso en el teléfono).
De los teléfonos que hemos probado, excepto con el HTC Desire S, también se han sincronizado los mensajes de texto. Se pueden reproducir a través de los altavoces. Para responder hay que utilizar obligatoriamente la pantalla, también es posible realizar una llamada al remitente.
Como el resto del sistema, la pantalla principal del menú teléfono muestra una interfaz de fácil comprensión. Es mejorable la manera de buscar un contacto en la agenda ya que solo es posible escribir la primera letra del contacto.
No existen tonos de llamada, perfiles de usuario o la posibilidad de conectarse a Internet para realizar búsquedas en línea o leer el correo electrónico.
Equipo de sonido
Suzuki no da la posibilidad de instalar un sintonizador de radio digital (al menos en nuestro mercado). La analógica funciona correctamente y se pueden almacenar hasta 12 frecuencias como favoritas (en dos bloques, FM1 y FM2). El mayor inconveniente es que no hay un listado con todas las emisoras que se reciben aunque sí se pueden realizar búsquedas por el tipo de programa que emiten (noticias, pop, deporte).
La toma USB es de serie en toda la gama. Está situada en el interior del reposabrazos central, un hueco sin iluminación (imagen). Esta toma tiene una pequeña pestaña (para evitar que se llene de polvo) que dificulta el proceso de conectar una memoria USB. Junto a la toma hay un hueco (con un borde a distinta altura) que permite ubicar sin que se mueva un dispositivo de audio como un iPod. Junto a la pantalla táctil está la ranura del lector de tarjetas SD y la conexión Aux-In (imagen).
El menú principal al reproducir un disco CD o un dispositivo iPod es el mismo que al conectar una memoria USB o una tarjeta SD. Es posible ver el nombre de la canción, del artista, del álbum y la carátula del mismo. Hay una opción que permite ver más información (año de la pista, compositor, editor). La línea de tiempo muestra la duración parcial y total de la canción pero no permite realizar un avance rápido pulsando sobre ella. Destaca la posibilidad de buscar música similar a la que se está reproduciendo. También se pueden hacer búsquedas (por álbum, artista, audiolibros, etc.) o realizar una exploración del contenido (visualizando de esta manera las carpetas).
A través de la conexión Bluetooth es posible reproducir música. Dependiendo del dispositivo, los datos del audio se pueden visualizar en el vehículo. En nuestro caso, excepto con el HTC Desire S, todos han mostrado estos datos.
Nuestra unidad de pruebas tenía un conjunto de siete altavoces. La calidad del sonido es buena (aunque no excepcional). Incluso subiendo el volumen — hasta un punto en el que no éramos capaces de oír una sirena de un vehículo oficial— no se aprecian excesivas vibraciones.
Junto a la regulación de los sonidos agudos y graves, el usuario puede subir el volumen de las distintas fuentes de sonido de manera independiente.
Órdenes Vocales
Gracias el sistema de órdenes vocales del Suzuki S-Cross es posible realizar prácticamente cualquier acción sin necesidad de utilizar la pantalla táctil, incluso realizar ajustes en la configuración (poco habitual en este tipo de sistemas). Para activar las órdenes hay que pulsar un botón situado junto a la pantalla (imagen) o uno que está situado en el volante (imagen).
El funcionamiento es correcto y la voz es femenina, pero su tono y entonación son mejorables. Excepto en alguna ocasión, como al pronunciar el nombre de un artista, el sistema interpreta de manera correcta las instrucciones, dando a elegir en algunos casos varias opciones. También es satisfactorio el software del sistema cuando se inicia el proceso; en la pantalla siempre están visibles las opciones disponibles.
En el vídeo adjunto mostramos algunos ejemplos de las órdenes que se pueden dar utilizando este sistema.