El Subaru WRX STI es un deportivo de cuatro puertas con 300 CV, cambio de marchas manual y tracción total. No hay posibilidad de tener otro motor, otro sistema de tracción, ni otra caja de cambios. Este modelo se comercializó hasta septiembre de 2017 (su último precio de tarifa fue 45 400 euros: ficha técnica y de equipamiento) momento en el cual Subaru lanza una actualización: el WRX STI 2018. La información que sigue es una prueba del modelo de 2015:
Sobresale por la eficacia de su sistema de tracción total (con múltiples posibilidades de reglaje para variar su funcionamiento), agilidad en curva, capacidad de frenada y por el extraordinario ajuste de su suspensión. Ésta es muy dura, sin embargo, tiene una gran capacidad para absorber las irregularidades y así asegurar un buen contacto de las ruedas con el piso, aunque éste no esté en buen estado. Esta suspensión es la responsable de que la carrocería se balancee o cabecee poco y de que el conductor casi tenga la sensación de ir en un coche de carreras.
Salvo por la suspensión, que requiere un periodo de adaptación, el Subaru WRX STI es razonablemente cómodo para un uso diario, pues no es ruidoso (ni por aerodinámica, ni por el contacto de las ruedas con el firme), los asientos son cómodos y el habitáculo es amplio para cuatro pasajeros (mediciones de interior). El maletero tiene 460 litros de capacidad (40 más que el anterior WRX STI).
Las cualidades relacionadas con su motor no son especialmente brillantes. El Subaru WRX STI puede acelerar mucho puesto que tiene 300 caballos, pero según nuestras mediciones, no ha sido tan veloz como otros coches con los que puede competir en el mercado y también tienen esa potencia (por ejemplo, un Volkswagen Golf R). El consumo de carburante que hemos medido (así como el homologado) es más elevado del corriente en otros modelos de características semejantes. En un uso variado, en su mayor parte por carretera y algo de ciudad y siempre a un ritmo suave, el gasto medio está en torno a 10 l/100 km. Es posible gastar algo menos si se circula a velocidad constante por carretera. Más información en el apartado impresiones de conducción.
Por potencia, tipo de tracción y tamaño, las dos alternativas más parecidas son el Audi S3 Sedán (43 490 euros) y el BMW 335i xDrive Berlina (51 900 euros). Sin embargo, no son alternativas reales puesto que su planteamiento es claramente distinto. El Subaru es el menos refinado ya que rueda con menor suavidad, la suspensión es más dura y, en general, la sensación que transmite es que su fin principal es ser un coche eficaz en carreteras de curvas, dejando en un segundo plano el confort, el diseño o los materiales refinados. El Subaru WRX STI está desarrollado para disfrutar conduciendo, para quien entienda por ello un vehículo que aísle poco a los ocupantes, deje sentir bien el contacto con la carretera, tenga reacciones rápidas y muy precisas y que sea eficaz en curvas lentas o circuito.
El equipamiento de serie es abundante y no se puede añadir ninguna opción. Forman parte de él las luces led para cortas (que dan buena iluminación, así como las de largo alcance), los asientos tapizados de piel y Alcantara con calefacción, el sistema de navegación, el acceso y arranque sin llave y la cámara de visión trasera, que muestra la información en una pantalla de pequeñas dimensiones (imagen). El alerón trasero de grandes dimensiones también es de serie.
Este coche ocupa en el mercado el sitio que dejó el Subaru Impreza WRX STI de 2011, con el que comparte motor y sistema de tracción, si bien ha tiene cambios en la dirección, la suspensión y los frenos (más información en el apartado de información técnica).