El Outlander 2016 no difiere en lo fundamental del que probamos a finales de 2012 (información) Los cambios que ha hecho Mitsubishi afectan principalmente a las combinaciones de color y los tejidos disponibles para los asientos.
Es un coche amplio en términos absolutos y también respecto a sus principales rivales por tamaño (tabla comparativa de mediciones del habitáculo). Donde más ventaja ofrece es en las plazas traseras, cuyas cotas de anchura y de espacio para las piernas superan a la mayoría de todoterrenos comparables.
No es un modelo de lujo, ni por el equipamiento que puede tener (carece de elementos y detalles que se encuentran en otros modelos) ni por el aspecto y los materiales que hay en el habitáculo. Un detalle que sirve de ejemplo es cómo está rematada la guantera: no está forrada para evitar ruidos, el plástico tiene filos en algunas zonas y no tiene salida de refrigeración ni luz (imagen). Pero, a pesar de esto, y sin brillar en nada, el Outlander transmite la a sensación de ser un coche de buena calidad.
La utilización de los mandos, con botones grandes, es sencilla, si bien, algunos de ellos no están visibles mientras se conduce (imagen). La parte negativa está en el equipo multimedia (imágenes). Es un equipo relativamente complejo en algunas cosas y su utilización no está bien resuelta. Por ejemplo no se puede (o yo no he sido capaz) regular la intensidad de la pantalla: hay dos niveles (día/noche) pero dentro de esos dos, no es posible variar su ajuste. En el nivel noche, la luz de la pantalla me resultaba muy molesta por carretera (en ciudad, que hay más luz ambiental, no tanto) y tenía que apagarla. Otro inconveniente es que las zonas que representan un botón no son siempre del tamaño adecuado y a veces es complicado acertar con la selección que se quiere hacer. Este sistema permite reproducir música desde un móvil (vía Bluetooth), mediante una toma USB (está en el cajón central, bajo el apoyabrazos; imagen) o usando una tarjeta de memoria SD (imagen).
El acceso al habitáculo es cómodo. Los asientos no están muy alejados del suelo, por lo que ni hay que hacer un esfuerzo grande para subir ni existe un salto grande a la hora de bajarse del coche. Obviamente, esta situación puede ser distinta según la estatura y agilidad de la persona, por lo que recomendamos probarlo (en éste y en cualquier otro coche).
En las plazas traseras sólo hay anclajes ISOFIX en las dos laterales. En el medio, difícilmente se podrá colocar una silla si las otras dos van sujetas por ese sistema. Tres adultos podrán viajar aunque, como es habitual, el del medio irá notablemente menos cómodo que el resto. En estas plazas sólo hay salidas de ventilación en la zona de los pies.
La cota de espacio para las piernas (77 cm entre el respaldo delantero y el trasero según nuestras mediciones) es muy buena. Como este espacio puede ser superior al que se necesita, la posibilidad de adelantar estos asientos por unas guías en un recorrido de 25 cm (imagen de la diferencia) y aumentar el espacio de carga es bienvenida.
Esa regulación longitudinal sirve también para dar mayor confort a los pasajeros de la tercera fila de asientos, que podrán llevar las piernas menos encogidas si se adelantan los asientos de la segunda. Pero, entre que a estas plazas de la tercera fila se accede con dificultad (imagen del hueco que hay para pasar el pie) y que hay poco espacio libre hasta el techo, la utilidad real de estos dos asientos —que no tienen anclajes ISOFIX— queda limitada a llevar niños o adultos de poca estatura y relativa agilidad.
Si no se usan estas dos plazas, los dos asientos se puede plegar (por separado; imagen) y recoger en el piso del maletero. La superficie que queda una vez que están abatidos es totalmente plana. Ponerlos y quitarlos es fácil y no requiere mucha fuerza.
Sólo hay dos tomas de corriente. Son de 12 V y están en la parte delantera. Esto dificulta la utilización por parte del resto de los pasajeros de dispositivos que requieran ir conectados. Tampoco las hay en el maletero.
En la prueba del Outlander 2013 hay más información útil sobre el habitáculo y el maletero que sigue siendo válida para el Outlander 2016.