El Mitsubishi Grandis es un monovolumen de siete plazas que, por longitud, es semejante a modelos como el Chrysler Voyager o el Renault Espace pero, por precio, está más cerca de un Opel Zafira, un Toyota Corolla Verso o un Volkswagen Touran. Por espacio interior, es también más similar a estos últimos (sobre todo por la anchura disponible).
Tiene un motor Diesel de 136 CV y cinco versiones de equipamiento (diferencias de equipamiento entre ellas); el único elemento opcional es la pintura metalizada. Cuesta entre 27.000 (con un equipamiento que incluye estos elementos) y 35.000 €; el más barato con control de estabilidad cuesta 30.500 €. El precio es bueno, si consideramos los monovolúmenes que hay de siete plazas y con un motor Diesel de este tipo (tabla comparativa de precio y equipamiento).
Las unidades que se encarguen durante los meses de octubre y noviembre tienen una oferta que consiste en un reproductor de DVD (en la guantera trasera izquierda), una pantalla retráctil de 7” en el techo, dos auriculares y un mando a distancia, para las plazas traseras. El valor de estos elementos es 1.500 €.
Es un vehículo recomendable por sus cualidades dinámicas. Balancea menos que otros monovolúmenes y tiene unas reacciones fáciles de controlar. La suspensión es, además, cómoda.
Las proporciones son inusuales por su altura; está a medio camino entre un monovolumen y un turismo familiar. Mide 4.755 de largo y 1.655 mm de alto. No hay ningún otro monovolumen de longitud parecida que sea tan bajo. Lo más cercano por altura es el Renault Espace, que mide 1.728 mm (73 mm más). La anchura es 1.795 mm, algo inferior a lo normal en este tipo de vehículos.
La relación entre tamaño y espacio no es particularmente buena; hay algunos monovolúmenes más pequeños que no son menos habitables. En términos absolutos, sin embargo, es suficiente para que cinco adultos y dos niños puedan viajar con comodidad.
Me ha parecido un vehículo muy funcional por lo fácil que es organizar el interior según las necesidades de cada momento. Tiene siete plazas distribuidas en tres filas (2-3-2). La segunda fila tiene una banqueta única (no asientos individuales), pero dividida en partes de proporciones 60/40; es desplazable longitudinalmente (20 cm) y tiene tres inclinaciones posibles para el respaldo. Los dos asientos de la tercera fila se pueden esconder individualmente bajo el suelo del maletero.
Según Mitsubishi y de acuerdo con sus estudios «la gente solo utiliza un pequeño porcentaje de todas las configuraciones de asientos que un monovolumen ofrece. Así que se estableció como prioridad hacer simples y fáciles aquellas configuraciones que los clientes habitualmente utilizan, en lugar de aquellas que se necesitan muy rara vez».
El motor es áspero y ruidoso pero con una buena relación entre prestaciones y consumo. Las prestaciones son buenas, sobre todo teniendo en cuenta que el Grandis con este motor pesa 1.710 kg (tabla comparativa de prestaciones y consumo).
Tiene un motor Diesel cuatro cilindros de 2,0 l de cilindrada de origen Volkswagen (más información). Da 136 CV a 4.000 rpm, la misma potencia que tenía inicialmente el Volkswagen Touran con este motor. Lleva un cambio de marchas manual de seis relaciones Aisin.
Además de ABS, lleva de serie airbags frontales, laterales delanteros, y de cabeza delante y detrás. Los cinturones de las dos plazas delanteras llevan pretensores y limitadores de fuerza. Sólo la segunda fila lleva fijaciones de tipo Isofix para sillas de niños (en las plazas exteriores). El control de estabilidad («MASC») es de serie en algunas versiones y no está disponible en las otras.
Tiene climatizador de serie. Este sistema se puede complementar con una unidad de aire acondicionado o climatizador (según versiones) extra en las plazas traseras o un sistema de calefacción nada más arrancar, incluso en frío.
Mitsubishi prevé vender en España 2.500 unidades del Grandis en doce meses, una cifra notable si tenemos en cuenta que la previsión de ventas para toda Europa es 15.000 unidades.
El diseño del Grandis toma rasgos de dos prototipos de Mitsubishi, el SpaceLine y el CZ3 Tarmac; se empezó a vender en Japón (donde se fabrica) a primeros de 2004. Mitsubishi es una de las marcas pioneras en la comercialización de vehículos con la forma actual de un monovolumen. En febrero de 1983 lanzó el Chariot en Japón (en otros mercado Space Wagon), que tenía un sistema para ocultar bajo el suelo una tercera fila de asientos.