El Range Rover es grande entre los grandes y ofrece un amplio espacio para acomodar a cinco pasajeros en su interior y mucho equipaje en el maletero. Destaca especialmente por su anchura interior, aunque también es grande el espacio para las piernas y altura entre el asiento y el techo. Al contrario de lo habitual, la plaza central trasera me ha parecido tan cómoda como el resto. Además, el suelo tiene un fondo plano que no resta ningún espacio a los pies. Tiene cinturón de seguridad de tres puntos y reposacabezas en las cinco plazas, así como salidas de aire y lectores de mapas para los pasajeros delanteros y traseros.
Como en otros coches, en el respaldo trasero hay un reposabrazos replegable. Forma una sola pieza que integra el reposacabezas central y que, al bajarlo, tiene una tapa en la parte posterior que descubre dos reposalatas. Hay distintas guanteras repartidas por el interior: salpicadero, puertas, consola central, bajo el asiento del pasajero o el portagafas en el techo. En las plazas delanteras hay también dos reposavasos escamoteables cuya particularidad es que se puede regular su tamaño para poder alojar desde un vaso estrecho hasta una botella.
El maletero es grande (535 litros) y tiene unas formas aprovechables. El portón trasero se abre en dos piezas: una mitad hacia arriba, que abre la luna trasera, y la otra mitad hacia abajo, que da completo acceso al maletero. Los pulsadores de apertura son eléctricos. Tiene un cubre maletero en material duro (aunque muy bien acabado y tapizado) que no se desmonta tan fácilmente como uno enrollable. Tampoco he encontrado un sitio específico para dejarlo dentro del coche en caso de desmontarlo por completo.
Al abatir la parte baja del portón trasero queda una bandeja de carga que dificulta el acceso al maletero al sobresalir unos 30 cm respecto a la carrocería. Si queremos meter algo hasta el fondo tendremos prácticamente que subirnos en el maletero para llegar, puesto que sus medidas son grandes: he medido una longitud útil de 1.075 mm, la anchura varía entre 1.050 y 1.400 mm y la altura es 475 mm hasta la bandeja cubre maletero o varía entre 920 y 980 mm según la forma del techo.
Para facilitar el acceso (de pasajeros o de carga), la suspensión neumática puede bajar la carrocería hasta el denominado «nivel de acceso». En condiciones normales, el plano de carga del maletero está muy alto (87 cm) y sigue quedando alto con la suspensión en el perfil de acceso (83 cm).
Los asientos traseros son abatibles en partes desiguales (60/40). Con ellos abatidos (banqueta y respaldo) se pueden transportar longitudinalmente objetos de hasta 1.570 mm de largo. Si sólo abatimos el respaldo queda una superficie de carga inclinada, pero se pueden colocar objetos de hasta 1.870 mm de longitud. La capacidad de carga con los asientos completamente abatidos es muy grande (1.756 litros).
Todo el maletero está completamente enmoquetado y revestido al detalle (el tirador para cerrar el portón está rematado en plástico pintado de suave tacto). Tiene ganchos para colocar una red y una toma de corriente adicional (12 v). En el piso del maletero hay unas tapas en los laterales bajo las cuales hay unos huecos donde alojar, por ejemplo, una lata pequeña de aceite. Bajo la tapa central se encuentra una rueda de repuesto, igual que las otras pero con llanta de chapa, así como las herramientas y el gato para cambiarla. La ubicación de la rueda de repuesto y el plano de carga (que sobresale mucho de la carrocería y está alto) puede hacer pesada la operación de cambio de una rueda pinchada.