Plazas traseras
Uno de los valores más favorables del interior del Hyundai i30 es que tiene mucho espacio para los ocupantes de las plazas posteriores. No es el que tiene más espacio en todas y cada una de las mediciones que tomamos en km77.com pero, en todas ellas, está muy cerca de los mejores valores (aún con todo, ha perdido algo de espacio respecto al anterior).
Por ejemplo, un Honda Civic tiene un poco más de espacio para las piernas de los ocupantes de las plazas posteriores, pero tiene mucha menos distancia libre al techo que el i30. Otro posible ejemplo es el Peugeot 308, que tiene una ligera ventaja de espacio libre al techo en las plazas posteriores, pero tiene mucho menos sitio para las piernas. El interior del Hyundai está proporcionado en todas las mediciones.
Como consecuencia de lo anterior, el i30 me parece un modelo muy conveniente para usar las plazas posteriores. Pero no solo por espacio, sino también porque el acceso al interior es cómodo porque el hueco que dejan las puertas es amplio, porque las ventanillas son grandes y dejan pasar mucha luz y porque los reposacabezas se pueden colocar a la altura correcta, incluso a personas de estatura elevada.
En las plazas posteriores no hay salidas de aire desde la consola central (imagen), sino que únicamente hay salidas en el piso, justo debajo de los asientos de las plazas anteriores. Desconozco si aun con la ausencia de esas salidas de aire centrales, el sistema de ventilación tendrá suficiente capacidad para enfriar o caldear con eficacia las plazas posteriores.
En las plazas anteriores el climatizador sí funciona muy bien. Enfría rápidamente el habitáculo y sin crear corrientes molestas para los ocupantes (es decir, si se regulan bien las toberas, no da el aire directamente al cuerpo). Tiene dos programas de funcionamiento, uno que hace menos ruido pero que tarda en enfriar más el habitáculo y otro que hace más ruido y sale más caudal de aire. Este climatizador es de serie desde las versiones «Tecno», mientras que los i30 de menor equipamiento tienen aire acondicionado de ajustes manuales.
Plazas delanteras
En la plazas delanteras también hay mucho sitio a disposición de los ocupantes, aunque ese importante señalar que no he probado una versión con techo solar. Con este elemento se pierden algunos centímetros de altura, que quizá puedan ser determinantes para algunos ocupantes.
El puesto de conducción me parece bueno por la posición de los pedales, volante y caja de cambios. En general me he sentido muy cómodo a los mandos de este coche (algo que no le tiene por qué ocurrir a todo el mundo). Algunos conductores, entre los que me incluyo, prefieren el puesto de conducción de este Hyundai frente al de un Renault Mégane o un Citroën C4 porque los pedales quedan menos cerca.
Los asientos (imagen) son blandos y quizá algo cortos de banqueta. Al principio me hubiese gustado que tuvieran un relleno de espuma ligeramente más duro (especialmente en la zona central de banqueta y respaldo). Sin embargo, con el paso de los kilómetros mi percepción ha mejorado y me he sentido cómodo incluso en desplazamientos largos.
Los mandos a disposición del conductor quedan, en general, bien ubicados. Digo «en general» porque la ruleta que hay en la parte de derecha de la pantalla de la consola queda lejos; para llegar a ella hay que separar el cuerpo del respaldo. Nos ha pasado a personas con estaturas y formas de sentarnos muy diferentes, parece un problema generalizado.
La pantalla de consola cambia de aspecto en función del equipamiento que se elija: ésta es la que viene en las versiones sin navegador y ésta táctil de siete pulgadas en las que sí lo llevan. He probado esta última y me ha parecido que es sencilla y fácil de utilizar (por ejemplo, para conectar el teléfono por bluetooth o manejarse entre los diferentes menús de ajuste que ofrece). El mayor inconveniente que he encontrado es que por la noche está excesivamente iluminada (y puede molestar) aunque se reduzca al máximo su brillo. Hay un botón que permite apagarla manteniendo sus funciones activas, pero lo ideal sería que existiera la posibilidad de rebajar más el brillo.
Esta pantalla no permite consultar dos funciones diferentes a la vez. Así, cuando por ejemplo se consulta la información del equipo de sonido no se pueden ver las indicaciones del navegador y viceversa.
Las dos versiones del i30 que han pasado por la redacción de km77.com tenían los dos niveles de equipamiento más elevados «Style» y «Style+». La calidad de acabado me parece buena, por el aspecto de las diferentes piezas, por el tacto de los botones y ruletas o porque muchos de los huecos para guardar objetos tienen un fondo de goma adherente. El i30 también da buena impresión por la ausencia de ruidos molestos al pasar por carreteras en mal estado. Nuestras unidades de pruebas tenían una moldura plateada en algunas partes del salpicadero que, aunque está claro que es plástico y no metal, causan buena impresión.
Una de las cosas que he echado en falta por la noche ha sido un espejo retrovisor interior de oscurecimiento automático (que no está disponible ni siquiera en el i30 más costoso) y la conexión automática de luces o limpiaparabrisas.
Maletero
El maletero del i30 de cinco puertas tiene 378 litros de capacidad, 38 litros más que anteriormente (el del i30 de carrocería familiar es más grande: 528 litros, que pueden ser 1642 litros abatiendo los asientos traseros). Cabe holgadamente un carrito infantil (imagen) o un juego de maletas (imagen).
El maletero se puede aprovechar con facilidad porque tiene formas regulares. Todos los i30 vienen con una rueda de repuesto de emergencia (imagen). También llevan ganchos para colgar bolsas y toma de corriente (imagen).