No tiene un equipamiento de serie amplio para su precio, y hay pocas opciones. Lleva ABS, aire condicionado, cierre centralizado, cuatro elevalunas eléctricos, retrovisores eléctricos (y calefactables), radio CD, llantas de aleación, alarma y climatizador de serie.
A partir de aquí lo único que se le puede añadir es el «Pack Interior» y el «Pack City». El primero sólo está disponible para la versión de cinco puertas, y consta de apoyabrazos en las plazas delanteras y una consola entre las plazas delanteras. El segundo está disponible en ambas versiones, y lleva molduras negras en el frontal, trasera y en los laterales, útiles para disimular los pequeños arañazos.
Ni tiene ni puede tener otros sistemas que están presentes en coches más baratos que el Civic. Le falta control de estabilidad (ni está previsto), airbags de cabeza, sensor de lluvia, faros de xenón, luz en los espejos de cortesía u ordenador. Tampoco tiene asideros en las plazas delanteras.
Aunque el acceso a las plazas traseras es cómodo desde la puerta derecha (se desplaza una buena distancia hacia delante la banqueta mediante un muelle), desde la puerta del conductor no se puede acceder al interior.