El Aston Martin Cygnet es un utilitario de 3,0 metros de longitud y cuatro plazas que está disponible desde marzo de 2011 a partir de 39.959 € (todos los precios). Básicamente es el mismo coche que el Toyota iQ, con el que comparte estructura y motor, entre otros elementos.
Bajo pedido, de forma independiente al resto de la gama, se comercializan dos ediciones limitadas de lanzamiento, denominadas «White» y «Black». Reciben ese nombre por el color de la carrocería y la decoración interior. Aston Martin no ha especificado su coste.
El Cygnet únicamente está disponible con un motor de gasolina 1.33 Dual VVT-i de 98 CV. La caja de cambios puede ser manual de seis velocidades o automático de variador continuo («CVT»).
Es casi tres veces más costoso que el iQ, a igualdad de motor. Así, el iQ 1.33 VVT-i de 98 CV con cambio automático («Multidrive S») está disponible desde 14.570 €, mientras que el Cygnet CVT tiene un precio de 41.394 €. Actualmente es el utilitario de hasta 3,50 metros con motor de gasolina de hasta 120 CV más costoso. El modelo que más se aproxima, y cuesta la mitad, es el smart fortwo coupé BRABUS Xclusive (listado).
El consumo medio oficial de la versión del Cygnet con cambio manual es 5,0 l/100 km. Son 0,2 l/100 km menos que la variante automática. Es uno de los utilitarios de menor consumo entre los de similar potencia, aunque hay algunos que sobresalen entre todos ellos como el Fiat 500 con el motor 0.9 TwinAir de 85 CV —gasta 4,0 l/100 km— (listado ordenado por consumo).
La principal diferencia del Cygnet con respecto al iQ se da en los materiales con los que está realizado el interior. Si el habitáculo tiene el mismo espacio, algo muy probable al tratarse de prácticamente el mismo coche, habrá espacio suficiente en las plazas traseras para que viajen en ellas con un mínimo de comodidad un adulto y un niño. La plaza trasera más espaciosa es la que va detrás del acompañante delantero, ya que el asiento de éste puede ir más cerca del salpicadero —tiene cierta forma cóncava—.
No hay diferentes niveles de equipamiento sino una serie de elementos de serie y otros opcionales. Entre los primeros están los nueve airbags —incluido uno para las rodillas del conductor y otro en la luneta, que Aston Martin cuenta como dos y que protegen a los ocupantes de las plazas traseras de impactos por alcance; es igual que el del iQ (imagen)—, el control de estabilidad, el climatizador o el acceso y arranque sin llave.
También son de serie el asiento del conductor con calefacción, el navegador o las llantas de aleación de 16 pulgadas. La mayoría de estos elementos son opcionales en el iQ. Llama la atención que, en un modelo de su precio, no estén disponibles ni siquiera en opción elementos como los faros de xenón, las luces y los limpiaparabrisas automáticos, el programador de velocidad o la alarma (fichas de equipamiento).
Eso sí, algunos de sus detalles de acabado son impropios en un utilitario, como que ciertas piezas del salpicadero y de las puertas están tapizadas en cuero o que tiene algunos recubrimientos de Alcantara y detalles de aluminio.
Hasta el momento, Aston Martin nunca había fabricado un coche de este tipo. Su gama se compone de modelos de carrocería cupé —Vantage, DB9, DBS y Virage— y de una berlina de cinco puertas y cuatro plazas —Rapide—.
El Cygnet de producción es prácticamente idéntico al prototipo que Aston Martin presentó en 2009 (más información).