El Volvo VCC (Versatility Concept Car) es un prototipo de cuatro plazas individuales con portón trasero.
Según Volvo, el diseño de la parrilla deriva de la del Volvo 164 (1968) y la parte trasera es parecida a la del prototipo SCC y a la del Volvo P1800 ES (1971).
Otra característica que define su apariencia exterior es la ausencia de montante central. Para que esto sea posible en un coche con cuatro puertas laterales, las traseras están articuladas en la parte trasera en coche. Sólo es un rasgo estilístico y no se verá un futuro modelos; «por razones de seguridad no ha sido pensado para automóviles de producción». Para la fabricación del marco del parabrisas Volvo ha usado acero de alta resistencia, así puede ser más delgado que si fuera de acero normal y deja más visibilidad en los giros. El techo es de cristal translúcido y tiene un marco en forma de «X».
Las luces delanteras están desarrolladas bajo lo que Volvo denomina «luz de divergencia estática». Consta de varios grupos de luces orientadas en diferentes ángulos. En línea recta sólo se accionan las que están orientadas hacia el frente, pero cuando el conductor gira el volante, unos sensores activan las luces adecuadas para iluminar la parte de la carretera hacia donde el coche está girando. Por lo tanto, es un sistema de iluminación en curva que no tiene faros giratorios.
El salpicadero está basado en el del Volvo XC90, aunque en el caso del VCC, Volvo ha tratado de reducir el número de elementos de «diseño» para «reducir la contaminación visual». Otro aspecto que llama la atención es la ausencia de salidas de aire visibles.
La consola está fabricada en acero anodizado y no está unida al salpicadero. Agrupa las funciones de climatización independiente para conductor y acompañante, y el accionamiento de los elevalunas eléctricos. Estas funciones se manejan mediante mandos deslizables sensibles al tacto.
El volante se denomina por Volvo de «centro fijo»; la parte central, que agrupa algunas funciones (como el cambio de marchas) y el airbag, está siempre en la misma posición y el aro gira de manera independiente alrededor. Los asientos delanteros (tapizados en piel y rellenos de espuma Tempur) están montados en carriles colocados en los laterales de la carrocería y en el túnel central (no en el suelo), así dejan más espacio libre a los pies de los ocupantes traseros. Como el Volvo VCC no tiene montante central, los cinturones de seguridad delanteros están integrados en los asientos. Los dos asientos traseros se pueden deslizar individualmente mediante un motor eléctrico.
En el maletero hay un piso deslizante que maneja mediante un mando eléctrico que hay en la parte trasera del coche. Debajo de él, hay dos compartimentos, uno calefactado y otro refrigerado. Los neumáticos miden 245/40 en llantas de 20 pulgadas; los fabrica Pirelli y permiten rodar unos kilómetros a una velocidad reducida si se pinchan.
Según José Díaz de la Vega, director creativo de diseño estratégico de Volvo Cars, «el VCC es una visión de diseño de cómo puede interpretar la seducción en un futuro automóvil Volvo V-Range».