Las versiones GTX son las más rápidas y deportivas de la gama Volkswagen ID.3. Hay dos niveles de potencia: 286 (GTX) y 326 CV (GTX Performance). Por el momento solo está a la venta la variante GTX, cuyo precio es de 42 640 euros. Un MG 4 XPower no solo es mucho más potente (435 CV), sino también sensiblemente más barato (ficha comparativa).
La batería tiene una capacidad bruta de 84 kWh (79 útiles). Con ella, el ID.3 GTX recorre 604 km en el ciclo de homologación WLTP y el ID.3 GTX Performance, 600 km. La autonomía del MG4 XPower citado en el párrafo anterior es mucho más baja, 385 km.
El motor de estas versiones mueve únicamente las ruedas posteriores y es el mismo que Volkswagen utiliza en el Volkswagen ID.7 (síncrono de imanes permanentes, con código de identificación APP550). La batería admite recargas de hasta 175 kW en corriente continua. Según Volkswagen, son necesarios 26 minutos para pasar del 10 al 80 % de carga.
Las prestaciones de estas dos versiones son las mejores de la gama ID.3. La de 286 CV puede acelerar de 0 a 100 km/h en 5,9 segundos y alcanzar 180 km/h, mientras que la de 326 CV rebaja en tres décimas el primer dato (5,6 s) y tiene una velocidad punta de 200 km/h. Ficha técnica comparativa.
La alternativa más próxima por características técnicas es el CUPRA Born VZ de 326 CV, con quien comparte plataforma, motor y la mayor parte de los componentes mecánicos. Los datos de aceleración, velocidad y autonomía son prácticamente calcados a los del ID.3 GTX Performance (ficha comparativa). Nos queda por saber cómo quedan posicionados por precio, porque por el momento desconocemos este para el Volkswagen.
Los ID.3 GTX también tienen algunos cambios en el chasis para que su conducción sea más agradable al circular por carreteras de curvas. Son nuevas las barras estabilizadoras, más rígidas, la dirección tiene una nueva puesta a punto y es la que Volkswagen denomina «progresiva» y, en el caso de la variante Performance, la suspensión es de tipo adaptativo con varios niveles de dureza predefinidos. Las llantas de serie son de 20 pulgadas.
También hay cambios estéticos, aunque son muy discretos. Por fuera son diferentes los paragolpes de ambos extremos (el delantero con una toma de aire más grande y el trasero con un difusor de nuevo diseño) y las luces diurnas (en forma de flecha), pero además hay piezas de la carrocería que van siempre pintadas en negro brillante (los faldones laterales, los marcos de las puertas o los espejos retrovisores exteriores). En el interior hay unos asientos deportivos específicos con costuras en color rojo y logotipos que hacen alusión a la versión en la base de los reposacabezas (imagen) y un volante con detalles en el mismo color (imagen).
Con estas versiones del ID.3, Volkswagen estrena un nuevo sistema multimedia y una nueva distribución de algunos de los mandos del salpicadero. El sistema multimedia ahora tiene una pantalla de 12,9 pulgadas (en la última actualización del ID.3 tenía una de 12) y un sistema operativo mejorado que, además, incluye reconocimiento de comandos vocales con lenguaje natural (más que en versiones previas) y ChatGPT.
Otro de los cambios más importantes con respecto a otras versiones de la gama ID.3 viene dado por la eliminación del mando giratorio que hacía las veces de selector del cambio y que iba colocado justo al lado de la instrumentación, como parte de un mismo bloque (imagen). En los ID.3 GTX y GTX Performance, dicho mando ha dado paso a un selector más convencional situado en la columna de la dirección, como en el ID.7 (imagen). Es probable que estos cambios lleguen de manera paulatina al resto de versiones del ID.3.
Los ID.3 GTX e ID.3 GTX Performance se pueden pedir con cinco colores para la carrocería: Rojo metalizado, Gris cemento, Negro noche metalizado, Blanco efecto perla y Plateado metalizado. El color del techo, en cambio, siempre será el mismo: negro de alto brillo.